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REINO UNIDO

Crónica de un viaje de 7 días por Londres

Marta Pérez
Published on Data viatge: 2009 | Publicat el 02/06/2009
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Introducción

Londres, ciudad multicultural donde la historia se puede admirar en cada esquina de sus calles, con sus casas victorianas. Las doce líneas de metro nos permiten recorrer la ciudad sin problemas aunque para disfrutar mejor de sus calles podéis coger cualquiera de los famosos autobuses de dos plantas londinenses con techo descubierto.

Los tres museos principales son gratuitos, cosa extraña es los tiempos que corren, aunque recomiendan un donativo de 5 £ al entrar, pero no deja de ser un donativo. Se puede disfrutar de esta ciudad con poco dinero, pero si queréis un poco de comodidad prepararos para soltar dinero, depende ya de vosotros mismos.

Aparte de los lugares descritos en esta crónica, hay muchos otros que pueden visitarse en un nuevo viaje a la ciudad de Londres: Covent Garden, montaros en el London Eye, el Arco de Wellington o el Barrio Chino (aunque sólo son dos calles).


Ficha técnica del viaje

Fechas del viaje

Del 6 al 13 de Mayo de 2009.

Gastos

+ 67,07 € (vuelo ida-vuelta Reus-Luton con Ryanair)
+ 197.82 € (alojamiento en hostal: 178 £)
+ 17,52 € (autocar Londres-aeropuerto, ida y vuelta)
+ 28,67 € (Travelcard: 25,80 £)
+ 119 € (alimentación)
+ 17,23 € (visita a la Torre de Londres: 12,50 £ (entrada) + 3£ (audioguía))
= 447,31 € (total por persona).

Transporte

Existen cinco aeropuertos desde los que podéis ir a Londres: Stansted, Gatwick, Heathrow, Luton y London City. Obviamente Heathrow es uno de los más cercanos y más conocido, pero los otros aeropuertos tienen líneas de autobús que os llevarán al centro de Londres. En el mismo aeropuerto podréis comprar los billetes. Para comprobar los horarios e incluso comprar los billetes podéis consultar la web de easyBus, entre otras.

Comer en Londres

Comer en Londres os puede costar mucho o muy poco. Muchos supermercados ofrecen buena comida para llevar e incluso la posibilidad de poder comértelo en el mismo local, ya que están habilitados para ello. El horario inglés es especial y lo debéis tener en cuenta tanto para la hora de comer como para la de cenar (en algunos locales cierran a las 22:30) o si queréis ir de compras (las tiendas y museos cierran a las 17:30).


CRÓNICA DE VIAJE

Día 1

El Támesis y el London Eye
El Támesis y el London Eye

En nuestro caso empezamos el viaje un miércoles con un vuelo de Reus al aeropuerto de Luton en Londres.

En España habíamos comprado ya el billete de ida y vuelta del autobús entre Luton y Londres: el trayecto os llevará 1 hora y 20 minutos hasta la estación de Victoria en Londres. Veréis que realiza varias paradas durante el recorrido.

Londres goza de una gran red de metro: un total de doce líneas. Las paradas están divididas en un total de 9 zonas, pero las más turísticas son la 1 y la 2.

En la web Transport for London podréis comprar on-line las tarjetas de transporte, la TravelCard o la Oyster Card, o consultar todo lo que queráis sobre el transporte en Londres. La primera de ellas os servirá para viajar de forma ilimitada durante 1, 3 o 7 días por la ciudad. Si no queréis comprarla por Internet podréis hacerlo en cualquiera de las estaciones de metro o de tren de Londres.

Respecto al metro debo advertiros que los fines de semana se pueden producir cancelaciones de líneas enteras o parte de ellas debido a obras, cosa que ocurre con bastante frecuencia.


Día 2

Nuestra visita a Londres empieza el jueves de buena mañana. Tomamos el desayuno en el albergue y tomamos el camino a Buckingham Palace para ver el cambio de la guardia a las 11:30 h.

Buckingham Palace
Buckingham Palace

Si no fuera por su antigüedad (lleva celebrándose desde 1660) diría que no es más que una atracción para turistas apelotonados en la verja que rodea el palacio. Entre los meses de abril y julio se realiza diariamente a las 11:30 pero el resto de los meses de forma alterna (si queréis saber los días consultad la web Changing the Guard at Buckingham Palace). La ceremonia dura 45 minutos.

Nos dirigimos seguidamente a la zona de Westminster donde están ubicados el Palacio de Westminster y su conocida torre, el Big Ben, la Abadía de Westminster y nos pegamos un salto al número 10 de Downing Street.

Aunque cuando hablamos del Big Ben nos referimos a toda la torre, en realidad The Big Ben es la gran campana alojada dentro de la torre y hace referencia a su creador: Benjamin Hall. En el Palacio de Westminster se reúnen ambas cámaras legislativas: la Cámara de los Lores y la Cámara de los Comunes.

Junto al Palacio encontramos la Abadía de Westminster (entrada: 10 £), lugar donde se llevan a cabo las coronaciones de los monarcas británicos desde la coronación de Guillermo el Conquistador en 1066 y siempre celebradas por el arzobispo de Canterbury. En la Abadía también están enterradas muchas otras autoridades de las ciencias y las letras, como Isaac Newton, David Livingstone, Charles Dickens, Charles Darwin, George Frideric Handel, etc, además de muchos de los monarcas que gobernaron Inglaterra. Si no queréis pagar las 10 £ de la entrada siempre podéis ir a la misa que se celebra a las 11:00 el domingo (cosa que hicimos) y comprobar su belleza por lo que echéis en el cepillo.

Seguidamente nos dirigimos hasta Piccadilly Circus y a Trafalgar Square.


Día 3

Trafalgar Square y la National Gallery están situados uno frente al otro. Descubrimos que la NG cerraba los viernes a las 21.00h. En consecuencia decidimos utilizar el viernes para visitar Camden Market y por la tarde la NG.

Camden Market
Camden Market

Camden Market lo componen cinco pintorescos mercadillos: Camdem Stables Market donde se venden antigüedades y objetos de segunda mano; Camden Lock Market, Camden Market, Camden Lock Village y Camden Canal Market. Necesitareis calzado cómodo para poder caminar por todas las paradas donde se vende desde ropa a comida. Por 4 £ podréis comprar comida para llevar en cualquiera de las paradas que se entremezclan junto con las de ropa y bisutería. Hay en el recinto banquetas donde podréis comer y reponer fuerzas. En su página web podéis consultar los horarios actualizados de los mercados. Las dos paradas de metro más cercanas son Camden Town y Chalk Farm.

Seguidamente nos fuimos a la National Gallery. De la misma forma que pasa con el British Museum y el Natural History Museum necesitaríais toda una vida para verla entera al detalle y los tres son gratuitos. En la National Gallery podemos encontrar pinturas datadas desde los siglos XIII a principios del XX; organizadas las salas por colores y cada color a una época. Están expuestas obras de Botticelli, Miguel Ángel, Raphael, Caravaggio, Rubens, Velázquez, Goya o Van Gogh, entre muchos otros. Casualmente, nos encontramos en una de las galerías que a las 19:00 empezaba un concierto de música clásica de una hora de duración. Si os encontráis con el evento, os animo a que no dejéis de gozar del momento. El horario del museo es de 10:00 a 18:00 a diario y los viernes hasta las 21:00, aunque por si hubiera cambios os recomiendo consultar su página web, no sea que os encontréis con sorpresas.


Día 4

Siendo sábado decidimos ir a Notting Hill y a su mercado en Portobello Road. Es un mercado muy distinto a Camden Market, basado más en antigüedades y baratijas. El mercado es en sábado y siendo un único día a la semana os imaginaréis las aglomeraciones que se forman alrededor de cualquier tenderete.

Nuestra siguiente parada fue la Catedral de St Paul y desde ahí atravesamos el Puente del Milenio.

El Puente del Milenio
El Puente del Milenio

La Catedral de St Paul fue construida entre los años 1676 y 1710 sobre las cenizas de la primera catedral, que sucumbió al fuego en el gran incendio de Londres de 1666. Es famosa también por haber albergado la boda del Príncipe Carlos con Diana. Si queréis saber más podéis consultar su web.

El Puente del Milenio, primer puente desde la construcción del Tower Bridge en 1894, fue inaugurado el 10 de junio de 2000, pero unos pocos meses después tuvieron que cerrarlo al público debido a unos fallos estructurales que balanceaban el puente y se reabrió definitivamente, ya resueltos todos los problemas, el 22 de febrero de 2002. El puente tiene a un lado la St Paul's Cathedral y al otro el Tate Modern. Os recomendamos un paseo tranquilo por el Támesis siguiendo el Thamesis Path, que va desde más atrás del BankSide hasta el Tower Bridge. Veréis letreros que os dirigen, restaurantes en vuestro camino y mucho movimiento de turistas y no turistas. Es un paseo que a nosotras nos llevó hasta la Torre de Londres, pasando bajo el Tower Bridge.

Tomamos la decisión en ese momento de visitar la Torre de Londres pero para ello debíamos tomarnos nuestro tiempo así es que acordamos hacerlo a lo largo de este viaje. Y con ésto llegamos al día siguiente, domingo.


Día 5

Entrada del Museo Británico
Entrada del Museo Británico

Como ya hemos comentado, decidimos ir a la misa de las 11:00 a Westminster Abbey. No se entra por la puerta principal, sino por el lateral. El portero os preguntará si vais al servicio, y si respondéis afirmativamente simplemente os dejarán entrar.

La misa dura una hora y para que puedas seguirla te dan al entrar un libreto con todo tipo de información. Aparte de esta misa dominical de las 11:00 también las hay entre semana y si queréis tener horarios actualizados consultad su página web.

Nuestro siguiente paso fue el British Museum. No hay palabras para describirlo y os recomiendo que cuando vayáis utilicéis todo un día para verlo.

Fue fundado en 1753 y alberga muestras de la evolución humana y su historia, desde África, Egipto, Grecia, época medieval, etc. y a modo de ejemplo encontramos la Piedra de Rosetta o las esculturas del Partenón de Atenas (llegaron al museo en 1816 de la mano de Lord Elgin y han sido mostradas al público desde 1817).

De hecho, podemos encontrar los restos del Partenón repartidos por museos de 8 países distintos, entre ellos el Louvre parisino o el Museo Vaticano en Roma.


Día 6

Museo de Historia Natural
Museo de Historia Natural

El Natural History Museum abre todos los días de 10:00 a 17:50 y de nuevo necesitaréis un día entero para visitarlo.

Está dividido en cuatro zonas identificadas por colores: verde,azul, roja y naranja. Fue abierto al público en 1881, pero su existencia se remonta al siglo XVIII, cuando parte del British Museum fue trasladado a un nuevo hogar por iniciativa de Sir Richard Owen, el entonces encargado de la colección de historia natural del Museo Británico.

Cuando abandonamos el museo dirigimos nuestros pasos al centro comercial Harrods. Está ubicado en Brompton Road y es uno de los más lujosos centros comerciales de Londres, con las marcas más exclusivas del mercado.

Es fácil perderse por sus pasillos, donde se entremezclan los turistas que solo podrán adquirir artículos en su tienda de souvenirs y los compradores que están eligiendo color para un sofá que cuesta más que mi coche. Sus grandes dimensiones os obligarán a tomaros vuestro tiempo.


Día 7

Elegimos este día para visitar la Torre de Londres. La entrada nos costó la friolera de 12,50 £ en taquilla, y eso con tarifa reducida. No hagáis mucho caso de las tarifas que aparecen en internet, ya que hemos comprobado que son ligeramente más caras que compradas en taquilla, pero os podréis hacer una idea. Abren hasta las 18:00 (las 17:00 en invierno).

Los Beefeaters, alabarderos o Yeoman Warders son las figuras características de la Torre de Londres y realizan visitas guiadas (sólo en inglés) gratuitas por el recinto.

Tower Bridge
Tower Bridge

No podéis perderos la visita a las Joyas de la Corona o el emplazamiento del cadalso, señalado con una escultura en su memoria de todos los ejecutados y muchos otros elementos interesantes de la fortaleza. En su historia tuvo varias funciones: residencia real, fortaleza militar o prisión y lugar de ejecución de personajes históricos como Lady Juana Grey, Ana Bolena o Catalina Howard (éstas últimas, esposas de Enrique VIII).

La Torre Blanca, principal símbolo de la Torre de Londres, empezó a construirse en la década de 1070 por orden de Guillermo el Conquistador. La construcción actual data de 1350 más o menos.

Finalizamos nuestro viaje en Hyde Park. Un paseo por este parque, vecino de los Kensington Gardens, es ineludible en nuestra visita a Londres. Adquirido por Enrique VIII en 1536 y mantenido como coto privado de caza hasta 1637, cuando fue abierto al público en general.


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