Parque Natural de los Aiguamolls del Empordà es el último testigo de lo que fueron las amplias zonas húmedas que cubrían la costa del golfo de Roses. El parque cubre una superficie de unas 4.731 ha, de las que unas 824 son reserva natural integral estrictamente protegida.
Es un espacio de convivencia entre agua, tierra, seres humanos y naturaleza, dando lugar a una serie de ecosistemas diferentes pero interdependientes entre sí: el mar, las playas y arenales costeros, lagunas salobres litorales (localmente conocidas como llaunes), los campos y prados de pasto, los estanques y humedales de agua dulce, los ríos, arroyos y canales, los campos de cultivo, y los pequeños núcleos habitados.
El Centro de Información del Cortalet, que acoge las oficinas del Parque Natural, es el punto de inicio y final de unas cuantas rutas a pie o en bicicleta que podemos hacer dentro de los límites del parque.
Para llegar a él hay que dirigirse a Figueres, desde donde se toma la C-260 hacia Roses. Justo pasado el cruce hacia Castelló de Empúries, hay que tomar a mano derecha la carretera que se dirige hacia Sant Pere Pescador (la GIV-6216). A unos 3 km encontraremos, a mano izquierda, el indicador para tomar el desvío que conduce a él.
En este centro se puede encontrar información de los posibles recorridos a hacer, así como una hoja informativa del itinerario completo, óptimamente señalizado en su totalidad.
De entre los diferentes itinerarios disponibles nosotros elegimos, en esta ocasión, la ruta a pie entre el Cortalet y el Estanque Europa (8 km y 2 horas, ida y vuelta). Este itinerario enlaza dos espacios húmedos creados por el Parque Natural y además conecta el Cortalet con Empuriabrava. Esta ruta cruza una llanura agrícola sin sombras, y hacerlo a pie puede ser pesado en tiempo de calor, pero es interesante todo el año, sobre todo en primavera y si ha llovido abundantemente en días anteriores, ya que fácilmente veremos zonas inundadas y cubiertas de flores. El último tramo del recorrido bordea los lagos Europa y acaba sobre el puente de madera para peatones que hay sobre el río Muga, donde se puede apreciar muy bien el bosque de ribera.
Otros itinerarios dentro del Parque Natural de los Aiguamolls del Empordà son (algunos de ellos se pueden combinar): Itinerario de la Massona (a pie, sólo ida, 1,5 km, 40 minutos), la vuelta a la Reserva de las Llaunes (a pie, ida y vuelta, 9 km, 3 horas), Desde el Cortalet hasta el Mas del Matà (a pie, sólo ida, 2 km, 40 minutos), Itinerario de Vilaüt (a pie, sólo ida, 3 km, 45 minutos), Ruta de los estanques (en bicicleta, circular, 38 km, 4 horas) o el Itinerario natural del Fluvià (a pie o en bicicleta, circular, 8,6 km, 2 horas a pie y 45 minutos en bicicleta).
Para poder ver bien los pájaros (los más representativos aquí son la cigüeña, el ánade real, el pato cuchara, la garza real o el flamenco, entre otros), uno de los grandes alicientes del parque, conviene llevar unos prismáticos (se pueden alquilar en el Centro de Información del Cortalet) y/o un buen teleobjetivo en la cámara fotográfica.
Es recomendable empezar pronto para ver más pájaros y estar más tranquilos a los escondites. Del 1 de abril al 15 de junio la playa está cerrada porque hay pájaros nidificando y no se puede dar la vuelta entera.
También hay que informarse bien los meses de invierno o épocas de lluvia, ya que el camino de acceso a la playa puede encontrarse inundado, aunque con escasa profundidad.
El acceso al parque es gratuito, pero el aparcamiento que hay junto al centro de información del Cortalet cuesta 5 €/día. Y también aquí encontraremos una zona de picnic donde poder comer algo para reponer fuerzas.
Terminada la visita a la zona de los humedales puede complementarse la jornada yendo a alguna de las playas cercanas al parque si la climatología acompaña. Y desde el punto de vista histórico y cultural es muy recomendable una reposada visita a la vecina villa de Castelló d'Empúries.
Castelló d'Empúries fue la capital medieval del Empordà durante los siglos de mayor esplendor político del condado de Empúries. Su rico pasado medieval le otorga un importante legado como la Basílica de Santa María, el palacio de los condes o convento de Sant Domènec, la Lonja, la prisión medieval y las calles y casas medievales. A la entrada de la villa también se puede visitar el Ecomuseo-Farinera, donde se revelan los secretos de la obtención de la harina.
© Viatgeaddictes.com | Fecha publicación: 05/2016