Las 41.042 Ha. del Parque Natural del Cadí-Moixeró comprenden territorio de las cuencas fluviales de los ríos Segre y Llobregat y de 17 términos municipales de las comarcas del Alto Urgel el Berguedà y la Cerdaña, muchos de ellos visitados en esta ruta.
A lo largo de esta ruta se pueden contemplar magníficas panorámicas de las sierras y macizos que conforman la orografía del Parque como el Cadí, el Moixeró, el Pedraforca, la Tosa y Puigllançada así como también descubrir parajes naturales singulares (las fuentes del Llobregat), numerosas iglesias románicas (Santa Maria de Talló o catedral de la Cerdanya), escombros de castillos milenarios (Gósol y Saldes) y antiguos núcleos medievales (Bagà y Bellver de Cerdanya).
Este itinerario, que recorre un total aproximado de 185 km, se puede hacer idealmente en un fin de semana o más días.
Para acceder al punto de partida, hay que salir de Berga por la C-16 (Eje del Llobregat) en dirección norte hacia el túnel del Cadí hasta Bagà, entrar por el primer acceso (Gisclareny) y, por la calle del Raval y las avenidas Reina Elisenda y Distrito Forestal, llegar a la oficina del Centre de información e interpretación del Parque Natural del Cadí-Moixeró (C. de la Vinya, 1 - Bagà), sede principal del Parque Natural del Cadí-Moixeró que ofrece información y exposiciones detalladas.
La ciudad de Bagà cuenta con un destacado casco antiguo de origen medieval que acoge cada año un popular mercado medieval donde se escenifican oficios comunes en otras épocas como el de calderero, ceramista, joyero, herrero, juglar ... Son espacios representativos del casco histórico la plaza Porxada (o Galceran de Pinós), la torre de Portella, el Pati del Forment, el puente de la Vila (s. XV-XVI) y el iglesia de Sant Esteve (s. XIII-XIV).
Para conocer mejor la edad media y el catarismo de estas tierras, hay que dirigirse al Centro Medieval y de los Cátaros, situado en el antiguo palacio de Pinós.
Para salir de Bagà, se toma la calle del Historiador Pedro Tomic, el de En Calic hasta la plaza Serra Vilaró, se sigue por la calle Mossèn Jaume y, por el del Raval, se llega a la carretera C-16, que se toma por la derecha en dirección a Berga.
Al cabo de sólo 2 km se accede a Guardiola de Berguedà, con su monasterio benedictino de Sant Llorenç prop Bagà, edificio construido en el s. X de planta cuadrada con tres naves y cripta, su punto de interés más remarcable.
Se continúa por la C-16 en diercció suroeste hasta girar a la derecha por la B-400, que remonta por el valle de Saldes. A medida que se asciende, se vislumbran los riscos de Vallcebre y la sierra de Ensija al este, y Gisclareny y el Cadí al norte.
A partir del bello pueblo de Maçaners, en los alrededores del cual hay un prehistórico megalito (2000-1800 a. C.) , se tienen magníficas vistas del macizo del Pedraforca y sus característicos picachos.
En Saldes, donde permaneció activa la última explotación minera a cielo abierto de la comarca del Berguedà (cerró a finales de 2007), hay que visitar los restos del castillo medieval (s. XI), la iglesia de Santa María (s. XII), situada a su lado, la iglesia parroquial de San Martín (s. XVIII) y, a los pies del Pedraforca, el mirador de Gresolet, que ofrece una dilatada panorámica del valle homónimo y las sierras y picos que lo rodean.
En el Centro de información del Macizo del Pedraforca y de la Minería, se pueden ampliar conocimientos del entorno natural de esta parte del parque y del pasado minero del municipio.
Tras el mirador del Espà y de las aldeas de la Espà (donde está el iglesia de San Andrés) y Sorribes, se accede a Gósol, donde destacan, encaramadas al Tossal, los restos de la antigua villa, la iglesia de Santa María y el castillo de origen cátaro (s. XI).
En la Sala Picasso y el Museo Etnológico, se encuentran réplicas de los cuadros que el genial pintor malagueño hizo durante la época de su estancia en Gósol y una exposición de la vida rural de la región.
Más adelante, ya en la comarca del Alto Urgel, y siguiendo la carretera C-563, se pasa por el mirador de Coll de Josa, donde hay un área de ocio y amplias vistas.
Josa de Cadí es una pequeña población ubicada sobre una colina rodeada de bosques y montañas singulares como el Cadinell, en la falda del cual se encuentra la ermita románica de Santa María de Josa. En el punto más alto del pueblo está la iglesia parroquial de Santa María y San Bernabé (s. XIX) y los restos de un antiguo castillo.
Al cabo de unos pocos kilómetros queda a la izquierda un desvío que sube a Tuixén, que cuenta con varias casas con balcones de madera, la iglesia parroquial de San Esteban, originaria del s. X, pero muy modificada a lo largo de los años, y el Museo de las Trementinaires, medicinales itinerantes que durante los s. XIX y XX curaban puerta a puerta utilizando productos naturales como hierbas y aceites. Antes, se ha dejado atrás la capilla de Sant Jaume de Tuixén, edificación de una sola nave rehabilitada documentada ya en el año 993.
Tras el pequeño pueblo de Cornellana, se llega a Fórnoles, población que conserva el aspecto tradicional del pasado con la iglesia parroquial de San Climent.
Sin embargo, las construcciones románicas más significativas del término municipal de la Vansa y Fórnols son las iglesias de Sant Julià dels Garrics, de una sola nave con bóveda de cañón, Sant Pere de la Vansa (s. XI), Sant Vicenç de Banyeres y Sant Romà de Sisquer
Más allá llegamos al Collado de Bancs, desde donde hay grandes vistas del entorno montañoso situado al oeste del parque. Se deja un desvío a la izquierda y se continúa ahora hacia el norte.
Dejamos atrás Adraén, donde se puede contemplar la iglesia iris, y, en el mirador de la Traba, se vuelve a disfrutar de una amplia panorámica al oeste del parque y, al norte, de la Seo de Urgel y del paisaje montañoso circundante.
Unos 9 km más allá accede a Ges, pequeño núcleo junto a la carretera rodeado de extensos y frondosos bosques y presidido por la pequeña iglesia de San Julià, que no parece conservar vestigios de la construcción medieval original (s. XI).
Unos 6 km más allá se deja a mano derecha la carretera que va a Ortedó y Vilanova de Banat y se continúa hacia el noroeste por la LV-4008.
Cerc es el último pueblo que se encuentra antes de la Seo de Urgel y tiene una iglesia dedicada a Sant Just y Sant Pastor, ya mencionada en el año 961.
A lo largo de este itinerario sólo se pasa por una capital comarcal: la Seo de Urgel, donde es de obligada visita la catedral de Santa María (s. XII), la única catedral románica conservada en Cataluña, con el claustro, la iglesia de Sant Miquel (s. XI) y el Museo Diocesano, expositor de arte sacro del obispado de Urgell.
Son también parte de su patrimonio cultural y arquitectónico la Casa de la Ciudad (el edificio del Ayuntamiento), el Seminario Conciliar, la iglesia de Santo Domingo (s. XV) y su bien conservado núcleo histórico, donde destacan las calles Mayor, los Canónigos, Capdevila y de las Eras.
Se sale de la Seo de Urgel por una carretera que se toma en el Parque del Segre y sigue por la izquierda del mismo río Segre hasta tomar por la derecha la N -260. A partir de ahora, se contemplarán espectaculares vistas de la cara norte de la sierra del Cadí avanzando hacia el este junto al Segre.
Se pasan los Baños de Sant Vicenç y a continuación el Pont de Bar, que tiene en la iglesia románica de Sant Andreu de Aristot (s. XII) su edificio más valioso.
En Martinet, ya en tierras de la Cerdaña, se encuentra la Casa del Río, centro de interpretación de los ecosistemas fluviales del parque natural. Es también el punto de inicio del itinerario de la Nutria, que, por el lado del Segre y a través de una frondosa vegetación de ribera, muestra el hábitat de este mamífero. En el pueblo, también se puede ver la iglesia parroquial de Sant Eloi.
A la entrada de Martinet, se abandona la N-260 y se toma por la derecha la carretera LV-4055 que conduce a Montellà, pueblo situado en lo alto de un cerro con dos iglesias de interés: la de Sant Saturní y la románica de Sant Genís, con un retablo barroco de 1790. Desde aquí se tienen espléndidas panorámicas de la vertiente septentrional del Cadí.
Se sigue hacia el este en dirección a Sant Genís por una carretera estrecha y en mal estado en algunos tramos: hay que prestar atención. Se vislumbra una buena perspectiva de la Tosa, las Peñas Altas y el Moixeró.
Se pasa por Santa Eugenia de Nerellà, aldea con una iglesia homónima que mantiene el único campanario de torre de estilo románico entero de la Cerdanya y que, al estar bastante inclinado, se le conoce popularmente como la Torre de Pisa de la Cerdanya.
Más adelante la ruta deja a la derecha el desvío hacia Olià y Nas y accede a Pi, donde se puede contemplar la iglesia de Santa Eulalia. Desde Pi, se puede ir al Aula de Naturaleza Cortariu-Cadí, centro de educación ambiental centrado en el entorno del parque.
Por pla de Pi, se sale a Bellver de Cerdanya, que cuenta con un casco antiguo, conocido como el Barri de la Plaça, que conserva el tipismo de la antigüedad, con lugares emblemáticos como las calles del Mig y del Cadell y las plazas del Portal, del Abat Oliba y la porticada plaza Mayor del 27 de abril, donde se encuentra la antigua Casa del Común (sede hoy del Ayuntamiento) y la iglesia parroquial de Sant Jaume, edificio gótico ya mencionado al final del s. XIII.
Es imprescindible la visita a la iglesia románica de Santa Maria de Talló (s. X), situada 1 km al este del centro de Bellver, llamada, por sus grandes dimensiones, la catedral de la Cerdanya. Tiene una sola nave con un ábside central del s. XI.
En Bellver se celebran dos ferias muy concurridas: la Ganadera, en octubre, que se remonta al s. XIII, y la de Sant Lorenç, en agosto, sobre productos artesanales del Pirineo.
Desde Bellver se continúa por la carretera LP-4033 en dirección a Prats y, después de Riu de Santa Maria, se toma a la derecha un desvío que conduce a Bor y Pedra.
Bor cuenta con un núcleo que tiene un edificio construido en la primera mitad del s. XI: la iglesia de Sant Marcel. Pedra, por su parte, es una aldea situado en un bucólico paraje natural entre prados y espesos bosques. La pequeña iglesia románica de Sant Julià de Pedra (s. X), declarada Monumento Histórico Nacional en 1984, preside majestuosamente el lugar.
Tras Riu de Cerdanya, donde se puede contemplar la iglesia parroquial de Sant Joan Baptista, de origen románico (s. XI), pero restaurada y modificada en el s. XVIII-, se pasa por debajo del puente por donde discurre la C-16, se llega a continuación a una rotonda, junto al Área de Servicio del Cadí, y se toma un desvío hacia Urús en el mismo sentido de la marcha.
El pueblo de Urús tiene como puntos de interés la iglesia de Sant Climent y, al monte de Urús, la ermita de Sant Grau.
Al cabo de 2 km se llega a Das, donde hay algunas edificaciones singulares de finales del s. XIX y principios del XX, como la iglesia de Sant Llorenç, de campanario neogótico, y la Casa del Común, que acoge el Consistorio y la Colección Museo de Das, una muestra etnográfica del pasado rural de la Cerdaña que expone antiguos utensilios relacionados con los trabajos del bosque y el campo.
Alp, 2 km más allá. está situado en la entrada del valle de la Molina. La iglesia de Sant Pere, de origen románico y fortificada en el s. XII, ha sido muy modificada con el paso del tiempo. Se cruza el pueblo por la calle del Nord y se gira a mano derecha por la carretera GI-400 hasta Masella, que se cruza por la avenida del mismo nombre.
Se llega a la estación de esquí de la Molina, se sigue por la misma carretera GI-400 (indicaciones hacia Girona y Barcelona) y, en el collado del Pedró, se toma la carretera BV-4031 que lleva a Castellar de n'Hug dejando a la izquierda el acceso a Toses.
El trayecto transcurre por el llano de Anyella, extensos prados de hierba propios de la alta montaña donde pastan, con el buen tiempo, numerosos rebaños de vacas, caballos y demás ganado. En el collado de la Creueta se disfrutan de buenas vistas del Puigllançada, el Pedraforca y Castellar de n'Hug. Se entra de nuevo en la comarca del Berguedà.
Tomando la bifurcación a la derecha se accede a Castellar de n'Hug, población turística que conserva el tipismo del pasado. Se puede contemplar la iglesia parroquial de estilo románico de Santa Maria de n'Hug (s. XI) y las plazas del Castell y de la Generalitat. Desde el pueblo, sale un camino señalizado que lleva al paraje donde nace uno de los ríos más importantes de Cataluña: las fuentes del Llobregat.
El último domingo de agosto, se celebra en Castellar de n'Hug el Concurso Internacional de Perros Pastores, que da a conocer y promueve el cada vez más escaso oficio de pastor.
Sigue el itinerario hacia la Pobla de Lillet. Por el camino encontramos el iglesia románica de San Vicenç de Rus, construida en el s. XII y de una sola nave. Más adelante se deja a mano derecha el camino de acceso al Museo del Cemento Asland, ubicado en la que fue la primera fábrica de cemento portland del país y que estuvo activa casi 75 años (de finales del s. XIX a principios de los 70 del siglo pasado).
Así llegamos a La Pobla de Lillet, con puntos de interés destacables como el magnífico monasterio románico de Santa Maria de Lillet, el puente viejo (construido a mediados del s. XIV) y los Jardines Artigas-Font de la Magnesia, projectados por el insigne arquitecto modernista Antoni Gaudí. También se puede subir al Ferrocarril Turístico del Alt Llobregat (del antiguo carrilet).
Se sigue la carretera B-402 hacia el oeste hasta tomar la C-16 por la derecha, a la altura de Guardiola de Berguedà, para volver a Bagà, punto de inicio y final de este completo itinerario.
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