En contraste con el Anoia más meridional, eje de grandes viales de comunicación y más desarrollada urbanística e industrialmente, la Alta Anoia sigue inmersa en la serenidad de la vida rural ofreciendo paisajes y rincones de gran interés que esperan ser descubiertos reposadamente.
Esta ruta se inicia en Copons, un buen ejemplo de estos pequeños y tranquilos núcleos, para subir a Sant Martí Sesgueioles siguiendo la riera Gran y pasando por el molino de la Roda. De vuelta, se dispondrá de buenas vistas de los caracte- rísticos relieves suaves de la comarca que combinan pequeñas sierras y torrentes, cultivos y masías desperdigadas. La segunda parte discurre por un terreno bastante abierto, expuesto al sol y de ambiente más bien árido, hecho por el cual se recomienda tomar precauciones respecto al calor e hidratarse a menudo.
A Copons se llega desde Igualada inicialmente por la carretera N-II y, pasado Jorba, se toma la C-1412a que se dirige a Tremp discurriendo por Calaf. Pasado el punto kilométrico 53 se coge un desvío (indicador de entrada al pueblo Copons/Veciana) que, en pocos metros, lleva a la zona deportiva, donde se puede aparcar.
Copons es un muy pequeño pero bonito y arreglado pueblo, tranquilo pese a la proximidad de Igualada. Vale la pena visitar, entre otros lugares, la plaza, can l'Estany y los tres molinos harineros, el de Arriba, el del Medio y el de Abajo que, mayoritariamente de origen medieval y en funcionamiento hasta el s. XIX, iban aprovechando la fuerza del agua desviada del río uno tras otro.
Los otras puntos de interés de la ruta los encontramos en Veciana (Carena de las Viudes, vecindario abandonado de camino al molino de la Roda, el Molino de la Roda) y en Sant Martí Sesgueioles (el campanario de la iglesia, el portal y la iglesia de Sant Martí).
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