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Bandera de Namibia

NAMIBIA

Guía y relato de un viaje por libre a Namibia

Este es nuestro viaje independiente a Namibia, con una ruta circular de 27 días desde Windhoek, visitando el Kalahari, el Cañón del Río Fish, Kolmanskop, Lüderitz, Sossusvlei, Walvis Bay, Swakopmund, la Costa de los Esqueletos, Spitzkoppe, Twyfelfontein, el Meteorito de Hoba, Rundu y el río Okavango, Tsumeb, el Parque Nacional Etosha, el Parque Nacional Waterberg, Omaruru y Windhoek, entre otros muchos lugares.

Suanda, Yolanda y Toni (Viatgeaddictes)
Published on Data viatge: 2023 | Publicat el 19/1/2024
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El arco de piedra de Spitzkoppe, una de las muchas maravillas de Namibia
El arco de piedra de Spitzkoppe, una de las muchas maravillas de Namibia

Introducción

Esta es la guía y relato de un viaje por libre de 29 días a Namibia (27 días efectivos de viaje) que hicimos dos adultos y nuestra hija de 12 años en verano de 2023.

Alquilamos un vehículo 4x4 en Windhoek, la capital del país, y a lo largo de unos 25 días efectivos recorrimos un total de 6.000 km por carreteras y pistas de todo tipo a través de las regiones namibias de Khomas, Hardap, ǁKaras, Erongo, Kunene, Otjozondjupa, Kavango West, Kavango East, Oshikoto y Oshana.

Este viaje superó todas nuestras expectativas iniciales, que ya eran muy altas, y nos dejó un buen puñado de experiencias vividas y de buenos recuerdos.

El hecho de ser auto-suficientes y poder dormir en tiendas de campaña sobre el coche en lugares naturales increíbles tuvo bastante a ver, pero no solo.

En cualquier caso, es un destino que recomendamos a cualquier viajero/a con un mínimo de sentido de la aventura.

Namibia se encuentra en la costa atlántica del África meridional, al norte de Suráfrica, al sur de Angola y Zambia y al oeste de Botsuana. Namibia tiene una extensión de 824.295 km², más grande que España e italia juntas, pero solo con una población que no llega a los 2'8 millones de habitantes. La densidad de población es de solo 3 habitantes/km², siendo la más baja del mundo tras Mongolia.

El país es independiente desde el año 1990, a pesar de que no va fue hasta cuatro años después cuando tuvo el control sobre todo su territorio actual. Obtuvo la independencia de Suráfrica.

Namibia es atravesado por la línea del Trópico de Capricornio, pero es el país más árido del África subsahariana. Desde el punto de vista físico el país está formado a grandes rasgos por el desierto del Namib, la meseta central y el lado occidental del desierto del Kalahari.

Y que ofrece Namibia al viajero/a?

Pues el país ofrece una combinación ganadora de fantásticos paisajes que te hacen sentir como si estuvieras en otro planeta, así como algunos de los mejores avistamientos de vida salvaje del continente, una gran cantidad de plantas y animales adaptados a la dureza del desierto e impresionantes maravillas naturales.

Los paisajes namibios son tan sorprendentes como variados: mares de dunas, llanuras arenosas, sabana, la espectacular Costa de los Esqueletos, montañas de granito adornadas con arte rupestre en Damaraland, la cuenca salina gigante del parque nacional de Etosha, la profundidad y majestuosidad del Cañón del Río Fish o la belleza de la meseta de Waterberg, entre muchos otros.

Los amantes de la aventura e, incluso de la adrenalina, encontrarán en Namibia su paraíso. La sensación de conducir por zonas remotas y paisajes extremos, y en completa soledad son otro de los muchos alicientes.

Y para el turismo familiar Namibia es uno de los países más seguros y fáciles del sur de África, con una red de carreteras en buen estado, una excelente infraestructura turística y una amplia gama de opciones de alojamiento.


Ficha técnica del viaje

Fecha del viaje

Del 9 de agosto al 6 de septiembre de 2023.

Itinerario

Día 1: Barcelona (BCN)→ flight → Frankfurt (FRA) → flight → ... (vuelo nocturno)

Día 2: ... → flightaeropuerto Hosea Kutako (WDH) - Windhoek > [47 km]

Día 3: Windhoek - Rehoboth - Mariental - Anub Kalahari Lodge - Mariental > [347 km]

Día 4: Mariental - Quiver Tree Monte - Giant's Playground - Keetmanshoop - Canyon Roadhouse (Hobas) > [398 km]

Día 5: Canyon Roadhouse - Fish River Canyon (miradores y caminatas por la zona) - Canyon Lodge - Canyon Roadhouse > [110 km]

Día 6: Canyon Roadhouse - Aus - Kolmanskop - Lüderitz > [404 km]

Día 7: Lüderitz - Días Point - Aus - At Kronenhof (Duwisib) > [377 km]

Día 8: At Kronenhof - Duwisib Castle - Betta - Sesriem > [191 km]

Día 9: Sesriem - Sossusvlei - Deadvlei - Sossusvlei - Hiddenvlei - Sesriem > [124 km]

Día 10: Sesriem - Sesriem Canyon - Solitaire - Trópico de Capricornio - Walvis Bay > [339 km]

Día 11: Walvis Bay - bahía de Walvis Bay y salinas - Swakopmund > [92 km]

Día 12: Swakopmund - Zeila Wreck - Capo Cross - Henties Bay - Wlotzkasbaken - Swakopmund > [278 km]

Día 13: Swakopmund - Usakos - Spitzkoppe > [216 km]

Día 14: Spitzkoppe - Uis - Twyfelfontein > [256 km]

Día 15: Twyfelfontein - safari elefantes desierto - pinturas rupestres Twyfelfontein - bosque petrificado - Khorixas - Outjo > [325 km]

Día 16: Outjo - Otjiwarongo - Hoba Meteorite - Grootfontein > [275 km]

Día 17: Grootfontein - Hakusembe River Lodge - Rundu - Hakusembe River Lodge > [327 km]

Día 18: Hakusembe River Lodge - Sarasungu - Kayengona - Rundu - Hakusembe River Lodge - crucero fluvial Okavango - Hakusembe River Lodge > [84 km]

Día 19: Hakusembe River Lodge - Tsumeb - Puerta de Namutoni (entrada Parque Nacional Etosha) - Namutoni > [467 km]

Día 20: Namutoni - visita P. N. Etosha: área norte, este y sur de Namutoni - Namutoni > [151 km]

Día 21: Namutoni - visita P. N. Etosha: área entre Namutoni y Halali y alrededores de Halali - Halali > [176 km]

Día 22: Halali - visita P. N. Etosha: área entre Halali y Okaukuejo - Okaukuejo > [163 km]

Día 23: Okaukuejo - visita P. N. Etosha: safari matinal y ruta área al norte y oeste de Okaukuejo - Ombika waterhole - Puerta Anderson (salida Parque Nacional Etosha) - Outjo - Otjiwarongo > [243 km]

Día 24: Otjiwarongo - Cheetah Conservation Fund (CCF) - Waterberg Camp (P. N. Waterberg) > [178 km]

Día 25: Waterberg Camp - rutas a pie por el Parque Nacional Waterberg - Waterberg Camp

Día 26: Waterberg Camp - rutas a pie por el Parque Nacional Waterberg - Otjiwarongo - Omaruru > [232 km]

Día 27: Omaruru - Okahandja - Windhoek > [226 km]

Día 28: Windhoek - aeropuerto Hosea Kutakoflight → ... (vuelo nocturno)

Día 29: ... → flight → aeropuerto Frankfurt (FRA)→ flight → Barcelona (BCN)

Esta ruta de 27 días y 6.000 km por Namibia, con inicio y final en Windhoek, la diseñamos con el fin de que no hubieran jornadas de carretera maratonianas, sobre todo pensando en que nuestra hija no se aburriera.

En Namibia, etapas de 300 o 400 km, como es el caso, son perfectamente asumibles, haciendo paradas por el camino para disfrutar de los paisajes o simplemente para descansar.

Los tiempos de viaje que proporciona Google Maps o cualquier otro navegador pueden servirnos como referencia, pero haréis bien en añadir un 10% más de tiempo sin contar las paradas. No conviene, sobre todo en pistas, exprimir la velocidad máxima aconsejada de 80 km/hora, ya que algunas de ellas, a causa de su estado, no permiten correr más allá de los 60 km/hora con seguridad. Y conviene planificar bien la etapa para llegar al lugar de pernocta diario antes de que se haga oscuro.

En nuestra ruta, fuimos desde Windhoek hacia el sur hasta llegar a la zona del Fish River Canyon vía Mariental y Keetmanshoop. Desde aquí fuimos hasta Lüderitz, en la costa sudoccidental. A continuación deshicimos el camino hasta Aus y desde aquí seguimos las pistas C13 y C27 que bordean el desierto del Namib por su lado oriental. Y desde Sesriem las pistas C19 y C14 nos condujeron a Walvis Bay y Swakopmund, en la costa central namíbia.

Desde Swakopmund seguimos la pista C34 que bordea la Skeleton Coast hasta llegar a Cape Cross, en un trayecto de ida y vuelta con diferentes paradas por el camino. A continuación nos internamos en la región histórica de Damaraland para ir hasta Spitzkoppe primero y la zona de Twyfelfontein después.

El siguiente paso lógico hubiera sido ir al parque nacional Etosha, pero la disponibilidad de fechas en los campings del parque nos hicieron aplazar unos días su visita y nuestro itinerario nos llevó, vía Otjiwarongo y Grootfontein, hasta Rundu, en el extremo norte del país y haciendo frontera con Angola.

Y a la vuelta de Rundu fuimos hasta el Parque Nacional Etosha haciendo una parada en Tsumeb. Y saliendo del parque continuamos hacia el sur, vía Outjo y Otjiwarongo, hasta llegar al Parque Nacional Waterberg. Y nuestro itinerario por Namibia finalizó regresando hacia Windhoek, con una corta estancia en Omaruru y una breve parada en Okahandja.

Finalmente, para poder confeccionar esta ruta nos inspiramos en relatos de otros viajeros y viajeras, entre los que querríamos citar los tres siguientes: The Ultimate 21-days Namibia Itinerary with map, 3-week Itinerary for a road trip through Namibia y Ultimate Namibia itinerary: self-drive road trip.

Dinero

La moneda oficial de Namibia es el dólar de Namibia (abreviado como NAD o N$). El dólar namibio se introdujo en 1993 en sustitución del rand sudafricano con un tipo de cambio paritario (1 N$ = 1 rand), pero el rand continúa teniendo valor legal en Namibia y puede ser utilizado sin problemas. Eso sí, el dólar namibio no tiene validez legal en Sudáfrica.

El cambio medio que obtuvimos en este viaje fue: 1 € = 20,6 N$. Ver cambio actualizado en el enlace Eur -> N$

Dinero en efectivo. En este viaje utilizamos poco dinero en efectivo, puesto que la gran mayoría de pagos los hicimos con tarjeta. Dispusimos de dólares namibios equivalentes a unos 350 € que obtuvimos de cajeros automáticos. Buena parte de ellos los sacamos en cajeros de Windhoek el día de nuestra llegada y el resto en un cajero de Swakopmund en el ecuador del viaje.

La idea era llevar siempre encima una cantidad de dinero en efectivo (el equivalente a unos 200 €) que nos permitiera hacer frente a pagos en lugares donde no era posible pagar con tarjeta, sobre todo en lugares remotos. Conviene contar con este hecho y no confiar en que siempre podremos pagar con tarjeta o que tendremos a mano un cajero o un banco donde cambiar dinero.

Hay cajeros automáticos (ATM) en muchos lugares del país, incluyendo las grandes estaciones de servicio. Pero no los hay en lugares remotos donde la conexión a Internet no existe o es muy inestable. En otros lugares pueden estar estropeados o no tener dinero para dispensar. Pero, en general, funcionan muy bien y no deberían suponer ningún dolor de cabeza.

La cantidad máxima de dinero que se puede sacar en cada operación en un cajero automático es de 2.000 N$ (casi 100 €), pero no hay problema en hacer varias operaciones consecutivas para obtener más dinero.

A pesar de que nosotros no lo necesitamos, también se pueden obtener dólares namibios cambiando euros en alguna oficina de los bancos First National Bank (FNB), Standard Bank of Namibia o NedBank Namibia, pero con la limitación de tener que estar en una ciudad y dentro de los horarios de operación de los bancos.

Tarjetas de crédito y débito. Tal como hemos dicho anteriormente las tarjetas de crédito y débito Visa y MasterCard son ampliamente aceptadas en estaciones de servicio, alojamientos, restaurantes, supermercados, etc., pero no en todas partes ni siempre. Y de aquí la importancia de llevar dinero en efectivo.

En este viaje, tal como hemos hecho en otros durante estos últimos años, hemos utilizado las tarjetas de débito N26 y Revolut, las cuales permiten pagar y sacar dinero con un coste más reducido que una tarjeta de crédito convencional .

En Internet podéis encontrar abundante información y comparativas sobre estas y otras tarjetas similares, cada una con sus ventajas e inconvenientes. Pero la versión básica de estas tarjetas es gratuita y solo se cobra el envío postal de la tarjeta física. Además, son muy fáciles de usar a través de una app en el móvil, con la que es fácil ir recargando la cantidad de dinero disponible en la tarjeta a medida que lo vayáis necesitando.

En el caso concreto de Namibia sacar dinero de cajeros automáticos de las entidades Bank of Windhoek o FNB nos supuso una comisión de solo el 1,7% de la cantidad, muy inferior a la aplicada usando una tarjeta de crédito convencional de un banco cualquiera de nuestro país.

En cualquier caso, es recomendable llevar más de una tarjeta para no quedarnos colgados si una de ellas da problemas o no es aceptada. Y lo ideal es llevar una o más tarjetas de débito N26, Revolut o equivalente, pero también una tarjeta de crédito convencional, sobre todo para alquilar un coche o para cualquier transacción que implique el bloqueo de una cantidad.

Documentación de viaje

Para visitar Namibia para turismo es suficiente con presentar un pasaporte con una validez mínima de seis meses desde la fecha de salida de Namibia. Para estancias inferiores a los 90 días se obtiene un visado a la llegada al aeropuerto de Windhoek o en cualquier de las fronteras terrestres habilitadas para la entrada al país.

En el caso de viajar con menores de 18 años, además del pasaporte, hay que presentar obligatoriamente un certificado literal de nacimiento del menor que, según nuestra propia experiencia, se pide tanto a la llegada como la salida del país.

Este es un requisito que el gobierno de Namibia, al igual que los de Botsuana y Sudáfrica, introdujeron hace unos años para los menores que entran o salen del país con el objetivo de combatir el tráfico de personas.

Este documento debe estar en inglés y por tanto no se admite el Libro de Familia o un certificado de nacimiento normal en español.

La pagina Namibia: Recomendaciones de viaje del Ministerio de Asuntos Exteriores español dice lo siguiente: «deberá aportarse OBLIGATORIAMENTE un certificado literal de nacimiento (original sin fecha de caducidad o fotocopia compulsada de menos de 3 meses de antigüedad) traducido al inglés mediante un traductor jurado o mediante una Embajada o Consulado». Pero afortunadamente es bastante más fácil que todo esto.

En nuestro caso solicitamos un par de meses antes del viaje un certificado de nacimiento multilingüe a través de la web del Ministerio de Justicia español. Completando toda la información que se solicitaba en el formulario cursamos la solicitud y unos días después ya nos llamaron del Registro Civil correspondiente para preguntar si queríamos ir a recoger presencialmente el certificado o si nos lo enviaban por correo electrónico. Escogimos esta última opción y al día siguiente ya disponíamos del certificado de nacimiento en formato PDF en nuestra bandeja de correo.

El certificado de nacimiento multilingüe consta de dos páginas. En la primera está toda la información relativa al nacimiento del menor en apartados rotulados en español y francés. En la segunda página se expresan todos los apartados de la primera página en un total de hasta 10 lenguas, incluyendo el inglés.

Entre la documentación de viaje llevábamos una copia en papel de este certificado. Esta copia es la que mostramos al funcionario cuando nos la solicitó durante los trámites de inmigración en la llegada al aeropuerto de Windhoek. Y antes de facturar en el vuelo de regreso nos volvieron a pedir el documento. Todo en orden.

Clima

Namibia tiene un clima subtropical, desértico a lo largo de la costa y en el sur, y árido, pero con una época de lluvias de noviembre a marzo, en las zonas interiores del centro-norte y del nordeste. Encontrándose en el hemisferio sur, sus estaciones se invierten en comparación con las de Europa, y el periodo más fresco es de mayo a agosto.

El Trópico de Capricornio cruza el país, pero una corriente fría, llamada Corriente de Benguela, fluye por la costa, mientras que el interior está ocupado por una gran meseta. Como resultado, el clima es más fresco y seco de lo que se podría esperar.

Sin embargo, puede hacer calor en verano, sobre todo a cierta distancia del mar y en zonas situadas a cotas no demasiadas elevadas. Puede ser que haya días de calor intenso de septiembre a marzo en el norte, de noviembre a enero en Windhoek, que se encuentra en el centro y a una altitud bastante alta, y de septiembre a abril o principios de mayo en el centro-sur del país. En invierno, en cambio, en la meseta puede hacer frío por la noche, con posibles heladas ligeras.

El invierno es seco en todo el país, mientras que en las regiones no desérticas (norte y este) llueve en verano, de noviembre a marzo, normalmente en forma de chubascos o tormentas por la tarde. El punto álgido de la temporada de lluvias es de enero a marzo.

En las fechas de este viaje, durante el invierno austral, las temperaturas diurnas que encontramos en el centre-sur, sur y costa fueron agradables durante el día y bastante frescas o frías por la noche (en la región de ǁKaras, de madrugada la temperatura debía de llegar a los 5 °C). En el centro-norte y en el norte, en cambio, las temperaturas diurnas subían casi a los 30 °C y las nocturnas se quedaban sobre los 13 °C.

Siendo la época seca no encontramos ni un solo episodio de lluvia. Solo un día, durante dos minutos, cayeron cuatro gotas anecdóticas que no llegaron ni a mojar el suelo. En la línea de costa es fácil encontrar, en esta época, nieblas matinales que después van desapareciendo..

En cuanto a la ropa a llevar, si váis de mayo a agosto, y dado el contraste térmico entre el día y la noche, conviene llevar ropa que podamos ponernos o quitarnos por capas: camisetas ligeras, sudadera o jersey y abrigo. Y para la parte norte del país conviene llevar también ropa veraniega.

Por último, si hacéis acampada en los meses de invierno es conveniente usar un saco de dormir que soporte bien el frío a causa de las bajas temperaturas nocturnas que se puedan dar.

Dicho todo esto, ahora la pregunta es: ¿Cuál es la mejor época para viajar a Namibia?

Dependiendo de cuál sea nuestro principal interés en este viaje una época puede resultar mejor que otra, pero en términos generales la mejor época para ir a Namibia es entre los meses de junio y octubre.

En este periodo es cuando las temperaturas diurnas son ideales para subir a las dunas de Sossuvlei o hacer senderismo por desiertos y montañas del interior. También es la estación seca, sin lluvias, por lo que el follaje de la vegetación es mucho menos denso y permite ver fácilmente a los animales mientras se acercan a los escasos lugares donde todavía hay agua. Por lo tanto, es una buena época para observar la vida salvaje en el parque nacional de Etosha. Basta con aparcar el coche junto a uno de estos pozos de agua y esperar a que vaya desfilando la vida salvaje por delante de nuestros ojos.

Los únicos inconvenientes de esta época es que las noches pueden llegar a ser muy frías en desiertos y lugares de altura. También que es temporada alta y hay que reservar con antelación el alojamiento en los parques nacionales. Y en la costa a menudo hay una espesa niebla matinal, aunque generalmente hacia el mediodía ya ha desaparecido.

Por otro lado, los meses de diciembre a marzo son, coincidiendo con la época de lluvias, la mejor época para visitar la línea de costa y para la observación de pájaros. Pero las temperaturas son altas en todas partes, llegando hasta los 40 °C en el extremo sur; la vida salvaje de Etosha está dispersa por toda la extensión del parque y puede ser difícil de encontrar animales; las lluvias pueden dificultar los desplazamientos por pistas de tierra que cruzan cauces de ríos que ahora llevan agua; y durante las vacaciones navideñas los alojamientos se llenan, sobre todo en la costa y en Etosha.

En los meses de Abril, Mayo y Noviembre se pueden aprovechar los descuentos por ser temporada baja y también son una oportunidad para explorar el país lejos de las multitudes, a pesar de que este concepto es muy relativo en Namibia.

Salud

Debido a la peculiar climatología de Namibia hay menos peligro de contraer enfermedades tropicales que son habituales en otros países de África. Aun así, en el norte del país hay una cierta incidencia del paludismo, sobre todo en temporada de lluvias (de diciembre a abril), por lo que se recomienda el tratamiento profiláctico en caso de viajar a aquella zona y en esa época del año.

Por otro lado, desde hace unos años Namibia exige la presentación de un certificado de vacunación de fiebre amarilla a todos los viajeros que lleguen desde un país con riesgo de contraer la fiebre amarilla. Estos países son la mayoría de los que hay en la región del África subsahariana y algunos de América del Sur.

En cualquier caso, conviene seguir las recomendaciones que nos puedan dar en un Centro de vacunación internacional.

El agua del grifo es potable en Namibia, pero igualmente se recomienda el consumo de agua embotellada para evitar dolencias de transmisión hídrica (cólera, fiebres tifoideas y diarreas).

En Namibia los accidentes de tráfico son la causa más común de atención médica y de hospitalización por parte de visitantes extranjeros. Una velocidad inadecuada, la presencia de animales en la vía o no llevar el cinturón de seguridad abrochado son las principales causas de estos accidentes.

En cuanto a la vida salvaje es muy importante seguir al pie de la letra las instrucciones que se encuentran en las entradas de los parques naturales, respetando las normas básicas como no dormir al raso, no bajar del vehículo excepto en las zonas donde esté expresamente permitido y no alejarse de la zona de acampada por la noche, cuando aumenta la actividad de los animales salvajes. En caso de acampada no se debe dejar comida al alcance de los animales, sobre todo por la noche.

En caso de acampada en zonas de desierto, principalmente, hay que contar con la posible presencia de serpientes venenosas y de escorpiones, aunque en el periodo invernal su nivel de actividad suele ser más bajo. Conviene tomar la precaución de cerrar bien las tiendas de campaña (si están en el suelo), así como mochilas y bolsas donde puedan entrar. También conviene dejar los zapatos dentro de una bolsa o en algún lugar fuera del alcance de estos animales.

Dadas las características de poca población del país es importante llevar en el equipaje un botiquín de primeros auxilios, así como los medicamentos que podamos necesitar una vez allí. También es importante llevar una crema protectora solar de alto factor de protección, así como crema protectora labial y crema hidratante por la sequedad ambiental.

Finalmente recordar que es más que recomendable viajar con un seguro médico internacional de amplia cobertura y que incluya la repatriación en caso de necesidad. Esto es especialmente vital en el caso de Namibia, donde los hospitales muy equipados se encuentran en la capital y puede ser necesario en casos graves el uso de un avión medicalizado que nos traslade hasta Windhoek o bien de regreso a Europa.

Para los casos en que la compañía del seguro contratado no disponga de contraparte local en Namibia o no pueda hacer los pagos requeridos en el momento, se recomienda viajar con una tarjeta de crédito con un límite diario elevado (o una tarjeta de débito con un gran saldo disponible) que permita hacer frente al pago por avanzado de un traslado de urgencia en ambulancia o avioneta. Debe tenerse en cuenta que este tipo de servicios en Namibia, incluyendo médicos y hospitales, son privados y los gastos en caso de accidente pueden llegar a ser muy elevados.

Seguridad

Namibia es un país muy seguro y políticamente estable, sobre todo comparándolo con los estándares africanos. En general hay pocos motivos de preocupación en cuanto a la seguridad personal, sobre todo fuera de las ciudades. Las ciudades namibias son relativamente seguras; la mayoría de los problemas de delincuencia son menores, como por ejemplo pequeños robos y carteristas.

En general, basta con tomar las precauciones habituales y usar el sentido común, estando siempre vigilantes, pero sin caer en la obsesión. Si alquiláis un coche no dejéis las cosas de valor ni el equipaje a la vista cuando lo aparquéis.

Nuestra experiencia en este viaje fue totalmente positiva y no tuvimos en ningún momento la más mínima inquietud sobre nuestra seguridad.

Alojamiento

Solo habíamos reservado antes de viajar los alojamientos de las primeras noches en Windhoek, Mariental, y Fish River Canyon, así como el camping en Sesriem y en el Parque Nacional Etosha. El resto de alojamientos de este viaje los fuimos reservando sobre la marcha a través del portal Booking.com a medida que íbamos concretando la ruta seguida.

Los tipos de alojamiento que probamos en este viaje fueron de lo más variados: camping público, camping privado, casas privadas, chalés, bungalós, B&B, apartamentos y lodges.

Los precios por noche dados en el caso de los campings son para tres personas y el coche.

Podréis encontrar más información en el apartado Camping vs. lodges, así como una referencia individualizada para cada uno de los alojamientos donde estuvimos.

Transporte

Avión / vuelo internacional. Para el trayecto intercontinental entre Barcelona (BCN) y Windhoek (WDH) elegimos, por precio, número de escalas, tiempos de viaje total y horarios, un vuelo de la compañía Discover Airlines, anteriormente llamada Eurowings Discover, una joven compañía aérea de largo recorrido que forma parte del grupo alemán Lufthansa.

El vuelo de ida lo hicimos en dos tramos: un primer vuelo de Barcelona a Frankfurt (1 hora y 50 minutos) y, después de una escala en el aeropuerto de Frankfurt (FRA), otro vuelo entre Frankfurt y Windhoek (10 horas y 20 minutos en un avión Airbus A330-300 para un trayecto de 8.320 km).

Y el vuelo de vuelta también lo realizamos en dos tramos: un primer vuelo de Windhoek a Frankfurt (10 horas y 5 minutos) y, después de una escala en el aeropuerto de Frankfurt (FRA), otro vuelo entre Frankfurt y Barcelona (1 hora y 40 minutos).

Se dio la circunstancia de que todos los vuelos salieron con un retraso de entre 20 y 50 minutos. Y el servicio a bordo de la compañía Discover Airlines en los vuelos de larga distancia dejó bastante que desear: los asientos eran estrechos, había que pagar los auriculares (2 €), así que llevadlos de casa. Las comidas a bordo fueron bastante pobres y si quieres vino o cerveza se debe pagar aparte (7 € y 4,5 € respectivamente).

Eso sí, esta fue la única opción de vuelo en que solo hacíamos una escala intermedia. En el resto de opciones el número mínimo de escalas era de dos, con Qatar Airways vía Doha (Qatar), Ethiopian Airlines vía Addis Ababa (Etiopía), TAP vía Luanda (Angola) y otras compañías vía Johannesburgo (Sudáfrica).

Como que el número de vuelos a Windhoek es limitado, los precios de estos son altos, especialmente en temporada alta, de julio a octubre. Y con el incremento generalizado de los precios de los vuelos tras la pandemia de COVID-19 es fácil encontrar precios a partir de 1.200 € por persona en temporada alta.

Coche de alquiler. El coche de alquiler es la mejor opción, sino la única, para recorrer Namibia por libre y disfrutar de la libertad de pararte en cualquier lugar a voluntad y visitar cualquier zona del país, por remota que sea. En un país tan poco poblado y remoto el transporte público no es realmente una opción a contemplar.

Namibia es el destino ideal para disfrutar de los grandes espacios abiertos, de unos paisajes impresionantes y de los encuentros con numerosa vida salvaje, saliendo de los caminos trillados. Y para experimentar todo esto no hay nada mejor que hacerlo por libre conduciendo tu propio vehículo (alquilado).

Conducir tu propio coche por Namibia da una libertad inigualable. Además, diseñar tu propia ruta por el país es una experiencia de viaje totalmente gratificante y emocionante.

Dada la importancia que tiene este apartado en la organización de un viaje por libre en Namibia le dedicaremos un capítulo especialmente extenso, puesto que son diversos los puntos a desarrollar:

Donde alquilar un coche en Namibia

En nuestro caso, la elección de Namibia como destino la decidimos solo tres meses antes del viaje y esto condicionó las opciones de alquiler, dado que en Namibia estos meses son temporada súper-alta y hay una gran demanda de vehículos de alquiler. Desde el principio tuvimos claro que queríamos un vehículo 4x4 con camping y, tras un proceso de búsqueda por Internet, enviamos solicitudes de presupuesto a unas 15 empresas de alquiler diferentes.

La mayoría de ellas ya no tenían vehículos disponibles del tipo que pedíamos para las fechas solicitadas y sólo tres de ellas pudieron ofrecernos un vehículo. Tras analizar detenidamente las ofertas recibidas nos decidimos por la empresa Autovermietung Savanna (también llamada Savanna Car Hire).

Esta empresa forma parte de CARAN (Car Rental Association of Namibia), una asociación que reúne compañías de alquiler de coche namibias que se comprometen a respetar unos estándares de calidad para proteger a los clientes y al sector del alquiler de automóviles contra los operadores de alquiler con un servicio y calidad inferiores. Podéis pedir presupuesto a través de su web, el cual se hará extensivo a todas sus empresas asociadas.

En general, los tipos de vehículos que podéis alquilar en Namibia se engloban en las siguientes categorías:

  • coches 2x4 berlina clase C
  • vehículos SUV 2x4 o 4x4
  • vehículos 4x4 sin camping
  • vehículos 4x4 con camping 2 plazas
  • vehículos 4x4 con camping 3-5 plazas

Los precios dependen mucho del tipo de vehículo elegido, de las fechas del alquiler (los precios más caros se dan entre los meses de julio y octubre) y de la compañía escogida. Los vehículos 4x4 (no SUV) suelen ser de los modelos Toyota Hilux, Toyota Land Cruiser, Ford Ranger, Nissan Navara, Isuzu o similar.

Es realmente necesario un 4x4 para conducir por Namibia?

Esta es una de las preguntas del millón que se nos plantea en todo viaje a Namibia.

Pues para visitar las principales atracciones de Namibia no es estrictamente necesario un 4x4 y un vehículo 2x4 sería suficiente. Por lo tanto, si el presupuesto es un condicionante muy importante en vuestro viaje entonces alquilad al menos un vehículo 2x4 que tenga una gran distancia al suelo.

Conduciendo por una pista de grava camino de Sesriem
Conduciendo por una pista de grava camino de Sesriem

Las carreteras y pistas de Namibia generalmente se encuentran en buenas condiciones, pero la grava, la arena, las piedras y las ondulaciones de algunas pistas pueden dañar los neumáticos y los bajos de los vehículos más pequeños. Y si viajáis a Namibia durante la época de lluvias (diciembre a marzo), las carreteras pueden volverse resbaladizas, fangosas, inundadas y con hoyos, con lo que necesitaréis un 4x4.

Además, si tenéis previsto salir de los caminos más trillados e ir a algunas de las zonas más remotas de Namibia, entonces tendréis que alquilar un 4x4 sí o sí. Y si queréis hacer camping entonces un 4x4 es del todo necesario.

Por tanto, la elección de un 4x4 o de un 2x4 vendrá del todo condicionada por el presupuesto, por el tipo de viaje que queráis hacer, así como del alcance de este y de la época del año en que vayáis.

Pero en cualquier caso los trayectos con 4x4 proporcionan un nivel de comodidad y seguridad muy superior a los coches convencionales. Los 4x4 también tienen más espacio para las piernas y para el equipaje, así como depósitos de combustible más grandes que proporcionan una mayor autonomía.

Algunos lugares o actividades en Namibia donde un 4x4 es altamente recomendable, sino imprescindible:

  • Pistas del desierto del Kalahari
  • Elefantes del desierto en la región de Damaraland
  • La ruta de la Costa de los Esqueletos al norte de Cape Cross
  • Llegar a los pies de las dunas de Sossusvlei y Deadvlei
  • Arte rupestre de Twyfelfontein, el Bosque Petrificado y los Tubos de Órgano, en Damaraland
  • Pistas interiores del área de Spitzkoppe
  • El cañón de Kuiseb
  • La regiones de Kavango, Zambezi y Kaokoveld
  • Los puertos de montaña

El coste del alquiler de un 4x4, y más si tiene la opción de camping, es una parte muy importante del presupuesto de viaje a Namibia, pero, y esta es nuestra humilde opinión, vale mucho la pena. La sensación de libertad, de poder ir a todas partes y con seguridad no tiene precio. Y para nosotros, además, tuvo un plus importante de aventura porque nunca antes habíamos conducido un vehículo de estas características. Y la experiencia fue del todo satisfactoria.

Nosotros hicimos unos 6.000 km por rutas namibias durante este viaje, de los cuales un 70% aproximadamente transcurrieron por pistas de todo tipo, y solo en dos ocasiones recurrimos al modo 4L del vehículo 4x4 (tracción a las cuatro ruedas y con las revoluciones disminuidas para aumentar la fuerza que se aplica a la rueda y salir de situaciones comprometidas), pero fueron muchas las ocasiones en que si no hubiéramos conducido un 4x4 habríamos sufrido mucho por la integridad del coche y también por nuestra seguridad o, sencillamente, habríamos renunciado a conducir por aquel camino.

Camping vs lodges

Tal como hemos comentado en el apartado anterior, la opción de alquilar un 4x4 equipado con camping (tiendas de campaña en el techo) es muy cara y conviene plantearse todas las posibles alternativas.

De camping en el área del Cañón del Río Fish
De camping en el área del Cañón del Río Fish

Si se alquila un coche 2x4 entonces no existe la opción de tiendas en el techo y el alojamiento debe ser en lodges y bungalous de campings en zonas remotas y parques nacionales o bien en hoteles, B&B o apartamentos si estáis en ciudades. Los precios de los lodges y bungalous van de caros a muy caros, dependiendo de la época del año y del nivel de lujo.

Con un coche 2x4 aún habría una opción, la más económica de todas, que pasaría por llevar o alquilar allí tiendas de campaña y dormir en el suelo en campings. Pero es una opción poco realista porque el espacio de un coche normal es muy reducido como para meter en él la tienda de campaña y todo lo necesario para hacer camping, además del equipaje normal.

Si nos decidimos por un vehículo 4x4 también existe, evidentemente, la opción de no hacer camping y alojarse en lodges, bungalous, etc. Pero nos centraremos en la opción de hacer camping, bien con tiendas en el techo o bien con tiendas en el suelo. Y cada una de estas dos opciones de camping tiene ventajas e inconveniente:.

  • Las tiendas en el techo son, en general, más fáciles de montar que las normales en el suelo. También nos aíslan de éste y nos alejan de los animales, pequeños o grandes, que puedan rondar por la noche en la zona de acampada (nosotros tuvimos de vecinos, que viéramos, a cebras, babuinos o facóqueros, entre otros). Si vais con niños les divertirá mucho la experiencia de subir y bajar. Y despertarse por la mañana, bajar la cremallera de la tienda y ver las vistas desde allí arriba es un plus.

    Entre sus inconvenientes se encuentra el sobrecoste que supone alquilar un 4x4 con tienda en el techo. También el hecho de que cada vez que tenemos que mover el vehículo deberemos plegar las tiendas y si queremos marchar del camping muy pronto por la mañana tendremos que hacerlo cuando todavía es oscuro. Y, por último, subir y bajar las escaleras hasta las tiendas o bien hacer el plegado/desplegado puede suponer un problema para ciertas personas, además de un posible riesgo de caída.

  • Las principales ventajas de las tiendas de campaña en el suelo son su coste, bastante más económico que el de las tiendas en el techo; el hecho de que se pueden dejar montadas en el camping cuando marchamos por la mañana y si pernoctamos dos o más noches; y que permiten una variedad en su capacidad en plazas más amplia que las de techo (solo una o dos plazas por tienda).

    Y entre sus inconvenientes destacamos el gran espacio que el equipo de acampada puede ocupar en el interior del vehículo.

Como siempre, elegir una alternativa u otra dependerá del presupuesto, del tipo de viaje que queremos hacer y de las preferencias de cada cual.

Nosotros nos decidimos por la opción de un 4x4 con tiendas en el techo porque nos hacía gracia probarlo. Y la verdad es que la experiencia fue muy buena, a pesar de que nosotros no somos, a priori, mucho de camping. En este viaje nos alojamos 12 días en camping y 14 días en lodges, bungalous, self-catering, hotel, etc.

En cualquier caso, sobre todo en temporada alta y en zonas remotas y parques nacionales, hay que reservar con antelación los campings y los lodges. Esto es especialmente crítico si queréis alojaros en estas fechas en el campamento Okaukuejo del Parque Nacional Etosha debido a su elevada demanda.

Nuestro coche en Namibia

Nosotros alquilamos a Autovermietung Savanna un 4x4 con camping para tres plazas durante un total de 27 días. El vehículo que tuvimos fue un Ford Camper 2.2 tDci de doble cabina, 4x4, automático y con doble tanque de gasolina (80 + 60 litros, con una autonomía de más 1.000 km). Era tan nuevo que aún estaba en garantía y solo tenía 7.000 km.

El coche venía con dos neumáticos de repuesto, una cuerda de remolque, un conjunto de herramientas básicas, un kit de primeros auxilios, unos fusibles de repuesto, un triángulo de peligro, un bloque de apoyo de madera para el gato, un gato hidráulico y uno manual, unos cables de arranque y un compresor eléctrico con manómetro, entre otros extras.

El sistema multimedia del coche nos resultó muy práctico y útil. Conectando el móvil vía USB y Bluetooth y mediante la app Android Auto podíamos utilizar todas las aplicaciones del móvil: música, navegación, mapas, llamadas, Whatsapp, etc.

En cuanto a la equipación de camping incluida había dos tiendas de campaña de techo (dimensiones: 1,3 x 2,4 metros) con colchón, dos sábanas para el colchón, una nevera Engel de 40 litros con batería propia, una mesa y cuatro sillas, dos bombonas de gas, dos placas de cocina individual, un grilo de barbacoa, una lámpara de 12 V, un recipiente de agua de 20 litros, una pala, una hacha y una caja grande con tazas de café, tabla de cortar grande, bol de cereales, abridor de latas, cuchillo de pan, cuchillos pequeños, cubertería, pelador de patatas, abridor de botellas, cerillas, enseres de cocina, cuchara de madera, ollas grande, mediana y pequeña, tazas de agua, platos, raspador, sartén, hervidor de agua, paño de cocina, detergente lavaplatos y fregadero de lavado de PVC.

El saco de dormir y la almohada se podían alquilar por 30 N$/día. Nosotros llevamos nuestros propios sacos de dormir y solo alquilamos las almohadas (por las cuales no nos cobraron nada).

El precio total del alquiler de este vehículo en nuestro caso fue de 64.800 N$ (unos 3.145 € al cambio). El precio incluía dos conductores, kilometraje ilimitado y traslado a/del aeropuerto. Además, contratamos un seguro para reducir la franquicia estándar de 35.000 N$ a 8.500 N$ en caso de accidente. El coste de este seguro fue de 150 N$/día.

No fue nuestro caso, pero si tenéis planeado sacar el coche a cualquiera de los países vecinos (Botsuana, Sudáfrica, Zimbabue o Zambia) entonces debéis avisar con tiempo a la compañía de alquiler para que puedan preparar la documentación del coche. El coste de estos permisos era de 750 N$ para los tres primeros países y 2.000 N$ para el último.

Nosotros no lo necesitamos, pero se podía alquilar también un teléfono por satélite (130 N$/día) o un sistema de navegación Garmin Nuvi con mapas Tracks4Africa (65 N$/día).

El día que fuimos a recoger el coche a las oficinas de Autovermietung Savanna empleamos unas dos horas en el papeleo y, sobre todo, en atender a todas las explicaciones sobre el vehículo y sobre el material de camping: como cambiar una rueda, como hinchar/deshinchar una rueda para circular por arena, como y cuando usar la caja reductora, como montar las tiendas sobre el vehículo, etc.

También nos informaron sobre las normas mínimas pera una conducción segura por carreteras y pistas, además de darnos una carpeta con abundante información práctica sobre talleres, servicios sanitarios, teléfonos de emergencia, etc..

Hicimos bien de no recoger el coche el día anterior, tras la llegada del vuelo internacional, ya que es importante prestar mucha atención y estar muy despiertos y descansados para intentar retener tanta información y que puede ser vital en una situación de emergencia.

En cualquier caso, el trato y la atención del chico que nos dio las explicaciones, y en general de todo el personal de la compañía Autovermietung Savanna, fue muy bueno. Por lo tanto, recomendamos muchísimo esta empresa, la cual nos dio mucha confianza por su seriedad, empatía y servicio al cliente. En cuanto a sus tarifas, se encuentran en un rango intermedio si las comparamos con otras compañías de alquiler de Namibia.

Y respecto al coche en sí, no tuvimos absolutamente ningún problema con él. Después de recorrer 6.000 km a lo largo de 27 días, el único "incidente" fue una rueda pinchada y que pudimos solucionar fácilmente.

El consumo de combustible de estos vehículos 4x4 es alto debido a la cilindrada, al peso y a la mala aerodinámica a causa de las tiendas en el techo, entre otros causas. En nuestro caso calculamos un consumo medio de combustible de 9,87 litros/100 km gracias a intentar conducir de una forma eficiente. En las fechas de este viaje a Namibia el precio medio del diésel era de 19,50 N$/litro (0,94 €/l).

Conducir en Namibia

La conducción por las carreteras namibias no es tan difícil como podríais pensar. A pesar de que un 87% de las carreteras de este país remoto son pistas de grava y que ocasionalmente algún gran animal, salvaje o no, puede cruzarse en vuestro camino, la escasez de tráfico por estas carreteras y la facilidad de navegación por la escasa red de vías hacen que conducir por Namibia sea un juego.

Pero dicho esto, no se debe subestimar en absoluto el reto que supone conducir en unas condiciones a las que no estamos acostumbrados la mayor parte de visitantes que optamos por esta opción. De hecho, los accidentes de tráfico son la principal causa de muerte o lesiones graves para los viajeros en Namibia.

Señal de peligro de varios tipos de «animales» en la carretera hacia Rundu
Señal de peligro de varios tipos de «animales» en la carretera hacia Rundu

La causa de esta elevada siniestralidad son, principalmente, los propios conductores. En la mayoría de accidentes no hay ningún otro vehículo implicado, ni animales u objetos. El exceso de velocidad, combinado con no llevar el cinturón de seguridad abrochado, es la principal causa. Sea por desconocimiento o bien por una falsa sensación de seguridad por el buen estado de las pistas de grava, muchos conductores pueden caer en la trampa de creer que está todo controlado. No corráis riesgos innecesarios para no arruinar un viaje tan bonito.

A continuación siguen unos cuántos puntos a tener en cuenta sobre la conducción en Namibia:

  • En Namibia se conduce por la izquierda. Pero en las pistas de grava o arena, si no viene nadie en sentido contrario, que es lo más habitual, es recomendable conducir lejos del borde de la pista, puesto que allí se concentra la arena y las piedras más grandes que pueden dañar las ruedas o hacernos perder el control del coche.
  • Mejor alquilar un vehículo 4x4. Tal como hemos dicho anteriormente, para visitar la mayoría de lugares turísticos de Namibia no es estrictamente necesario un 4x4, pero su altura permite circular por pistas onduladas, con baches o con piedras grandes de una forma más segura y cómoda. Y la tracción a las cuatro ruedas nos permitirá salir de situaciones complicadas sobre arena o grava. Así que, aunque el alquiler de un 4X4 es bastante más caro y consume más combustible, creemos que los beneficios en comodidad, velocidad y seguridad superan el inconveniente del alto coste.
  • Últimas comprobaciones antes de iniciar la ruta por Namibia. Antes de salir de la oficina de la compañía de alquiler con el coche es importante asegurarse de que el vehículo está en buen estado y tiene todo aquello que podamos necesitar: rueda de repuesto (mejor si tiene dos), herramientas para cambiar un neumático pinchado, botiquín, etc. Tened siempre a mano los datos del seguro y sus números de teléfono de emergencia, así como el móvil siempre cargado y con una tarjeta SIM local que permita hacer llamadas.
  • Llevar siempre encima el carné de conducir normal y el internacional. Solo encontramos un par de controles policiales en todo nuestro itinerario, pero en ambos nos pidieron el carné de conducir internacional.
  • Reducir la velocidad al cruzarnos con otros coches en pistas de grava. A pesar de que podéis conducir horas por pistas sin encontraros ni un solo coche, cuando lo hagáis es recomendable reducir la velocidad y apartarse hacia la izquierda, puesto que es fácil que algunos conductores circulen a gran velocidad, dejándonos inmersos en una nube de polvo que nos cegará durante unos segundos y expulsando piedras que pueden rompernos un vidrio.
  • Límites de velocidad de las carreteras namibias. Los límites de velocidad actuales en Namibia eran de 120 km/h en las carreteras asfaltadas (las B), 80 km/h en las pistas de grava (C o D) y 60 km/h en las pistas del parque nacional Etosha y en las áreas urbanas. De todas maneras, el límite de 80 km/h en pistas es un límite teórico y muchas veces inalcanzable a causa del estado de la vía. En cualquier caso se recomienda ir a 60 km/h.
  • Llevar siempre abrochado el cinturón de seguridad. Esto incluye también, por supuesto, las pistas.
  • Mantener las luces encendidas en todo momento. Debido a las grandes columnas de polvo que se levantan con el paso de los coches por las pistas, es muy importante que los coches que vienen por delante, pero también, y sobre todo, los que vienen por detrás nos puedan ver claramente.
  • Controlar la presión de los neumáticos y saber como cambiarlos. La arena, la grava y las piedras pasan factura a los neumáticos, de forma que merece la pena controlar la presión de las ruedas con regularidad, aprovechando cuando repostemos combustible. Para conducir por pistas, y sobre todo por arena, se debe reducir la presión estándar de la rueda. Y, por otro lado, conviene estar preparado por si tenéis que cambiar un neumático. No es difícil hacerlo, pero hace falta un poco de técnica, sobre todo con los enormes neumáticos de los 4x4. Y en caso de reventón, una vez cambiada la rueda, se debe reparar lo antes posible en uno de los muchos lugares de reparación de neumáticos que hay.
  • Atención con los animales en la carretera. En Namibia encontraréis animales salvajes, y domésticos, por todas partes. Podéis encontrar, por ejemplo, órices y babuinos corriendo por pistas de grava o jirafas comiendo hojas de árbol junto a la carretera. Pero también podéis encontrar cabras, vacas, perros, caballos, etc. Si veis animales junto a la vía conviene anticiparse y reducir la velocidad por si deciden cruzar de forma inesperada.
  • No conducir nunca por la noche. Conducir por la noche en Namibia, fuera de las áreas urbanas, es una temeridad. Por la noche los animales están más activos y es mucho más difícil verlos en la oscuridad. Y algunos de estos animales, como por ejemplo el kudú y otros antílopes, tienden a ir hacia los faros que se acercan.
  • Descargar mapas en el móvil o tableta para evitar el uso de datos. La navegación por la red de carreteras de Namibia es relativamente fácil porque hay pocas. La aplicación Google Maps, por ejemplo, tiene una amplia cobertura del país, pero (aunque hayáis comprado datos) la recepción en las zonas menos pobladas será irregular o inexistente. Por lo tanto es conveniente descargar en el dispositivo los mapas de la zona que queréis explorar antes de iniciar el viaje. Esto os permitirá usar la aplicación sin datos. Otras aplicaciones, como Maps.me o Sygic permiten hacer lo mismo.
  • Dejar siempre un margen de tiempo suficiente en cada etapa. A pesar de que las aplicaciones de navegación, como Google Maps, Maps.me o Sygic, son de una gran ayuda a la hora de estimar los tiempos de trayecto, lo cierto es que este dependerá mucho del tipo de vehículo alquilado (en algunas pistas un vehículo 2x4 será mucho más lento que un 4x4), de la confianza con que conducís y del estado de la pista, entre otros motivos (en nuestro viaje encontramos algunas obras de mantenimiento de las vías que nos hicieron parar o circular más lentamente). Por todo ello, no hagáis etapas demasiado largas y empezadlas temprano para no encontraros teniendo que conducir de noche por culpa de un mal cálculo del tiempo o por un problema con el coche.
  • Llevad siempre mucha agua y comida en el coche. En Namibia os encontraréis fácilmente en mitad de la nada, con distancias enormes entre una tienda (donde comprar agua y comida) y la siguiente. Por este motivo es importante aprovisionarse con mucha agua y comida cuando tengáis la oportunidad. En primer lugar, los snacks (y si tenéis nevera también cualquier tipo de alimento) os pueden hacer más soportable un largo trayecto por carretera. Pero, aún más importante, si tenéis un problema con el coche y tenéis que esperar unas horas para obtener ayuda, definitivamente querréis tener agua y comida con vosotros.
  • Saber donde están las estaciones de servicio y llevar siempre el depósito bastante lleno. Hay bastante gasolineras repartidas por todo el país para encontrar combustible, pero no tantas como para confiar en que siempre encontraremos una cuando la necesitamos. En las zonas más remotas las estaciones de servicio son mucho menos frecuentes. Y tampoco es extraño que las estaciones de servicio se queden sin combustible. Así que aseguraos de saber donde encontraréis la próxima gasolinera y de tener suficiente combustible en el depósito para continuar hasta la siguiente opción en caso de necesidad. Como norma general, llenad el depósito siempre que podáis y no dejéis que el indicador baje de la mitad.​
  • Conducción en el Parque Nacional Etosha. El Parque Nacional Etosha es un territorio de vida salvaje donde hay que respetar a los animales y seguir determinadas reglas: no bajar nunca del coche fuera de las zonas expresamente habilitadas; no sacar el cuerpo por la ventana ni sentarse en el techo del coche; no intentar tocar ni alimentar a los animales salvajes; conducir lentamente y no molestar ni asustar a los animales que estén cerca de la carretera y recordad que los animales siempre tienen derecho de paso; estad atentos a vuestro entorno y observad de cerca los movimientos de los grupos más grandes, no separando los miembros de las manadas de elefantes que crucen la carretera; no hacer ruido ni poner la música del coche a un volumen alto; etc.
  • Atención al paso por ríos y arroyos. En Namibia es habitual que las pistas crucen ríos y arroyos por el propio cauce. La mayor parte del año no veréis ni una gota de agua y se pueden cruzar sin problemas, pero en época de lluvias hay que tener mucho cuidado para evitar ser arrastrado por la fuerza del agua. En esa época, de diciembre a abril, las inundaciones repentinas son habituales y el mejor consejo es sentarse, disfrutar del paisaje y esperar hasta que el caudal se reduzca o se pare.
  • Propinas en Namibia. En todas las estaciones de servicio namibias hay personal que llena el depósito y que, frecuentemente, también se ofrecen a limpiar el parabrisas. La propina esperada es de aproximadamente 5 N$. Por otro lado, siempre que intentéis estacionar en cascos urbanos o parkings de supermercados, aparecerán uno o más vigilantes de coches que os ayudarán a aparcar y después velarán por vuestro vehículo mientras no estéis. Vale la pena «contratar» a uno de ellos y a la vuelta al coche hacerle una «donación» de 5 o 10 N$ en función del tiempo que hayamos aparcado. Estamos hablando de cantidades bastante ridículas, pero que ayudarán a mantener la economía local de mucha gente.

Gastronomía

En Namibia nuestra experiencia en los restaurantes, en general, fue muy satisfactoria, con platos muy bien cocinados y muy bien presentados, aparte de muy buenos. Las cantidades suelen ser bastante generosas y los precios baratos: un plato principal va desde los 90 hasta los 160 N$ y si el lugar es más caro entonces pueden llegar hasta los 270 N$.

La cerveza nacional (Windhoek o Tafel) costaba entre 18 y 25 N$ según el lugar y el tipo de botella, desde los 330 a los 500 ml. Una copa de vino, normalmente sudafricano, valía entre 35 y 45 N$. Un café expreso solía costar 30 N$.

La cocina de Namibia está influenciada culturalmente por dos grandes corrientes principales:

  • la cocina practicada por los grupos indígenas del país, como los pueblos Himba, Herero y San
  • la cocina de los colonos introducida durante el periodo colonial, sobre todo de alemanes, pero también de afrikaner y británicos.

Idioma

Namibia es un país muy poco poblado, pero debido a sus vicisitudes históricas y etnogeográficas tiene una gran diversidad de lenguas y dialectos.

Desde que Namibia es un país independiente el Inglés es la única lengua oficial, pero se reconocen como lenguas nacionales el Afrikaans, el Alemán, el Otjiherero, el Khoekhoegowab, el Oshiwambo, el RuKwangali, el Setswana y el siLozi.

Diferencia horaria

No hay diferencia horaria en Namibia respecto al horario de verano en la España peninsular.

En las fechas de este viaje a Namibia el sol salía sobre las 7:10 de la mañana y se escondía sobre las 18:40 de la tarde, tomando los valores medios de todo el periodo en que estuvimos en el país.

Telefonía e internet

Disponer durante la estancia en Namibia de una línea móvil para llamadas a números locales y para datos es casi imprescindible, puesto que en caso de problemas con el coche o de cualquier otro tipo es importante poder comunicarnos con alguien, sobre todo teniendo cuenta las características de aislamiento del país.

Tras analizar las opciones disponibles en Namibia optamos por un paquete prepago que ofrecía la compañía de telefonía MTC, el operador de telefonía móvil más grande del país.

Nosotros adquirimos dos SIM, cada una con 300 minutos de llamadas nacionales gratis, 150 SMS y 18 GB de datos durante un periodo de 30 días. El precio de cada SIM fue de 297 N$, unos 14,4 €

Hay una tienda MTC en la terminal de llegadas del aeropuerto de Windhoek, pero nosotros compramos las SIM en otra tienda en un centro comercial del centro de la ciudad.

Lo cierto es que este paquete fue del todo satisfactorio para nuestras necesidades durante el viaje y nos sorprendió mucho la amplia cobertura de red de móvil en la mayor parte del país. Esto significa que no es necesario alquilar un teléfono por satélite a no ser que la idea sea moverse mayoritariamente por zonas muy aisladas y remotas del país.

Electricidad

En Namibia la electricidad tiene un voltaje de 220 V y una frecuencia de 50 Hz, por lo que no es necesario ningún adaptador de voltaje. Pero los tipos de enchufe que encontraremos son los de tipo D y tipo M (ambos tienen tres pines redondos en un patrón triangular), incompatibles con nuestras clavijas, por lo que necesitaremos un adaptador de enchufes.

Guía de viaje

Namibia (de Bradt Travel Guides Ltd., 6ª edición, Agosto 2019, en inglés), en formado papel. Mucha información, muy estructurada y bien presentada, además de muy útil y bastante actualizada. Guía muy recomendable y mucho mejor, al menos según nuestra humilde opinión, que la correspondiente de Lonely Planet.

Map of Etosha (Honeyguide Publications, en inglés). Este folleto, muy útil y necesario, lo compramos en la tienda de uno de los campings del propio parque por 65 N$. Incluye mapas detallados y otras muchas informaciones del Parque Nacional Etosha, así como fotografías identificativas de todos los pájaros y mamíferos que se pueden encontrar en él. Esto último va muy bien para poder ir marcando todos los animales que vayamos viendo, algo que gustará mucho si vais con niños.

Patrimonios de la Humanidad visitados en este viaje



Qué llevar en el equipaje a Namibia?

Además de todo aquello que llevaríamos a cualquier otro viaje, a continuación adjuntamos una lista de cosas que, según nuestra propia experiencia, pueden ser útiles, necesarias y/o convenientes en un viaje a Namibia.

En cualquier caso, en el momento de hacer el equipaje tened siempre presente la máxima de que «menos es más»: no carguéis cosas innecesarias, optimizad volúmenes, pesos y espacios, etc. Y si viajáis durante los meses secos del invierno por pistas, el equipaje y todo aquello que va en la parte posterior del vehículo queda cada día bajo una capa de polvo. Por ello conviene llevar bolsas de equipaje que no os importe si se ensucian mucho.

Si hacéis camping en este viaje entonces tenéis que saber que si alquiláis en Namibia un vehículo 4x4 equipado con camping, entonces la compañía de alquiler incluye en el precio todo aquello necesario para la acampada: tiendas, nevera, bombonas de butano, enseres para cocinar, platos, cubiertos, sillas, mesa, etc. También provee un saco de dormir y una almohada por pasajero, pero en este caso se paga un alquiler diario por ambos. Por este motivo hemos marcado con un (*) estos dos conceptos de la lista, ya que opcionalmente los podéis llevar desde casa o alquilarlos a la compañía.

Documentos de viaje
  • Pasaporte válido
  • Carné de conducir y carné de conducir internacional
  • Certificado de nacimiento multilingüe para cada uno de los menores de 18 años que viajen
  • Seguro médico internacional (en papel o digital)
  • Billete de avión (en papel o digital)
  • Tarjetas de débito y/o crédito
  • Euros en efectivo
Electrónica y fotografía
  • Cámara de fotografiar con suficiente zoom (para la observación de animales)
  • Suficiente memoria SD y/o un disco externo para guardar miles de fotos
  • Trípode (esencial para los cielos nocturnos)
  • Binoculares
  • Móvil libre (para utilizar una SIM local) y cargador
  • Mapas descargados en el móvil (Google Maps, Sygic, etc)
  • Auriculares
  • Adaptador de enchufes tipos D o M
  • Linterna frontal (mejor si dispone de luz roja y si se puede cargar vía USB)
  • Opcional: Batería externa (puede ser solar)
Higiene y salud
  • Cepillo de dientes y pasta dentífrica
  • Desodorante
  • Peine o cepillo cabello
  • Gel de ducha y champú
  • Crema hidratante
  • Protector labial (con protección UV)
  • Crema solar con alto factor de protección
  • Enseres afeitado
  • Pinzas y tijeras pequeñas
  • Botiquín, con tiritas, vendas, desinfectante, analgésicos, pastillas antidiarreicas, termómetro, etc.
  • Desinfectante para las manos y toallitas húmedas
  • Repelente insectos y anti-picadas
  • Papel WC
  • Opcional: Medicación crónica u otros artículos de higiene personal
Ropa, calzado y complementos
  • Pantalones largos y cortos
  • Camisetas de manga larga y corta y jerséis/polares para poner o quitar por capas según el momento
  • Abrigo que sea fácil de transportar y ocupe poco espacio
  • Calcetines
  • Ropa interior
  • Bañador (aunque el agua de las piscinas namibias en invierno está realmente fría)
  • Toallas de baño pequeñas y grandes
  • Sombrero o gorra para protegerse del sol
  • Bufanda, pañuelo o buff pera protegerse del frío, del sol, de la arena o del mal olor de las osos marinos en Cape Cross
  • Chanclas de baño
  • Sandalias abiertas
  • Zapatos para andar por cualquier tipo de camino (arena, piedra, etc)
  • Gafas de sol con protección UVA
Otros
  • Mochila pequeña para el día donde llevar la cámara, el agua, la crema solar, comida para picar, etc.
  • Botella de agua reutilizable
  • Cosas de comer envasadas al vacío (embutidos, frutos secos, etc)
Camping
  • (*) Sacos de dormir de 3-4 estaciones (las noches de invierno pueden ser muy frías)
  • (*) Almohadas para dormir
  • Antifaz para dormir (si sois sensibles a la luz)
  • Jabón para lavar la ropa
  • Cuerda y agujas para tender la ropa
  • Mechero
  • Navaja suiza


Viajar con niños a Namibia

Namibia es un lugar fantástico para viajar con niños de cualquier edad, un lugar bastante seguro y desarrollado, ideal para un primer viaje a África. Entre las muchas razones que podríamos dar citaremos las siguientes:

  • Es un país bastante seguro. Mucha gente tiene dudas sobre si viajar a África es seguro porque los problemas de algunos países se proyectan sobre todo el continente. Pero Namibia ha sido un país políticamente estable desde su independencia de Sudáfrica, en 1990. Y el nivel de inseguridad ciudadana en las calles de sus ciudades es bajo y limitado en buena parte a la capital. Por tanto, tomando algunas precauciones básicas no debe haber ningún problema en este sentido.
  • Buena atención médica. Namibia es un país desarrollado, con un estándar bastante alto de médicos y hospitales. Pero también hay que tener cuenta que se trata de un país muy extenso y poco poblado. Por este motivo es conveniente ser autosuficiente en primeros auxilios y tener a mano un buen botiquín.
  • Bajo riesgo de enfermedades tropicales. En comparación con otros países de África, Namibia presenta, en general, un riesgo bajo de enfermedades tropicales, como el paludismo, sobre todo si viajáis durante el invierno austral, ya que la extrema sequía provoca que los mosquitos tengan muy poca presencia. Este es una gran ventaja, sobre todo si vais con bebés y/o niños pequeños. Pero recordad que siempre conviene consultar con un Centro de vacunación internacional.
  • Mucha abundancia de fauna salvaje. En todo el país es fácil ver animales salvajes junto a las carreteras y pistas, a pesar de que lógicamente es en el parque nacional de Etosha donde se encuentra la mayor variedad y cantidad. Y ver miles de osos marinos en Cape Cross, flamencos o delfines en Walvis Bay y guepardos en el CCF o en Okonjima serán un plus añadido para los niños en este viaje.
  • Parques nacionales con precios muy asequibles. Las tarifas de entrada a los parques nacionales y reservas naturales en otros países africanos, como Kenia o Tanzania por ejemplo, son exorbitantes en comparación a las de Namibia. Así, si viajáis con niños, sobre todo si son muy pequeños, no tenéis la presión añadida de tener que exprimir la estancia en el parque para amortizar el alto coste de la entrada. En las fechas de este viaje el precio de la entrada al parque nacional de Etosha era de 150 N$ por adulto y día (unos 7,5 €), mientras que los menores de 16 años no pagan nada.
  • Dunas de arena. A qué niño o niña no le gusta correr o dejarse caer rodando por una duna de arena?. El desierto del Namib ofrece incontables ocasiones, por ejemplo en Sossusvlei o cerca de Walvis Bay, de subir y bajar dunas de arena tan altas como rascacielos.
  • Museos de Cultura Viva. Namibia es un país enfocado al turismo cultural sostenible gracias a la diversidad de su población autóctona y a sus profundas raíces culturales. En este sentido, los diversos Museos de Cultura Viva que hay en diferentes partes del país son una de las mejores experiencias educativas interactivas, tanto para niños como para adultos, ya que permiten conocer de primera mano las formas de vida tradicionales de diferentes grupos étnicos como los Himba, los Damara, los San o los Kavango, entre otros.
  • Buena climatología. Con un clima desértico y árido, y lluvias concentradas en unas pocas semanas a lo largo del año, Namibia ofrece al viajero un sinfín de días soleados, con sus espectaculares salidas y puestas de sol. Solo hay que ir preparado para las frías noches del invierno. Y un aliciente extra para niños y adultos es la observación de los cielos estrellados nocturnos, sobre todo de mayo a noviembre. A causa de su baja densidad de población, una contaminación atmosférica muy baja y una contaminación lumínica prácticamente inexistente, Namibia ofrece unas condiciones ideales para explorar el cielo austral nocturno.
  • Aventura en campings de buena calidad. En Namibia hemos encontrado algunos campings con un nivel de confort y calidad que no habíamos visto nunca antes, y a un precio muy asequible. Y esto sin mencionar un entorno natural inigualable. Y es que acampar y dormir al aire libre es divertido para los niños, más todavía si añadimos la emoción de posibles encuentros con vida salvaje justo al lado del lugar de acampada.
  • Buenas carreteras. Las principales vías de Namibia están perfectamente asfaltadas y muy bien señalizadas. El resto son pistas de arena, grava y sal que, en general, están bien conservadas. Esto hace más fácil y cómodo recorrer las largas distancias del país, especialmente si viajáis con niños.
  • Comida. En la mayoría de ciudades namibias hay supermercados bien surtidos de productos que son similares a los que podamos encontrar en Europa, con frutas y verduras, lácteos, panadería, carne, embutidos, etc. Y también es bastante fácil encontrar restaurantes que satisfarán el paladar más exigente de cualquier niño/a.
  • Áreas de juegos infantiles. En las ciudades más grandes de Namibia hay buenos parques infantiles, con columpios, toboganes y arena, que gustarán a los más pequeños.

GUÍA Y RELATO DE UN VIAJE POR LIBRE A NAMIBIA

Día 1: Barcelona - Frankfurt - ...

Nuestro vuelo de Lufthansa despegó del aeropuerto Barcelona / El Prat a las 16:45 y aterrizó en el aeropuerto de Frankfurt a las 18:35, en un vuelo efectivo de 1 hora y 50 minutos.

Tras una escala de cuatro horas en este aeropuerto alemán nuestro siguiente vuelo, en un Airbus A330-300 de la compañía Discover Airlines (del grupo Lufthansa), despegó a las 22:45. Noche en ruta, en un trayecto de 8.320 km sin paradas hasta llegar a nuestro destino final.


Día 2: ... - AEROPUERTO HOSEA KUTAKO - WINDHOEK

Tras volar durante toda la noche aterrizamos en el aeropuerto internacional Hosea Kutako a las 9:05 hora local namibia, la misma que en la España peninsular durante el horario de verano.

Este es el principal aeropuerto internacional de Namibia y sirve a la capital del país, Windhoek, a 47 km de él. A pesar de todo, este aeropuerto es muy pequeño y fuimos andando desde el avión hasta la terminal. La temperatura exterior era de 13 °C y el día estaba nublado.

Al pasar los controles de inmigración, el policía de turno nos pidió el certificado de nacimiento de nuestra hija menor. Todo correcto. Puso los sellos en nuestros pasaportes y ya estábamos oficialmente en territorio namibio.

Al salir a la terminal de llegadas localizamos al empleado de la empresa Autovermietung Savanna que nos había venido a recoger para llevarnos hasta la ciudad, tal como habíamos acordado. Y es que a partir de los 8 días de alquiler de un coche esta empresa incluye el traslado gratuito entre el aeropuerto y Windhoek, a la ida y a la vuelta.

Antes de dejar el aeropuerto obtuvimos 2.000 N$ de un cajero del Bank of Windhoek, la máxima cantidad que se podía sacar en una sola operación en cualquier cajero namibio, y que equivalía a unos 100 € al cambio. Los bancos locales no cobraban comisión, mientras que la comisión de la tarjeta N26 es del 1,7% aproximadamente de la cantidad retirada.

En esta terminal de llegadas hay una tienda de la compañía de telefonía MTC donde adquirir una tarjeta SIM para llamadas y datos, pero nosotros preferimos hacer la compra en una tienda del centro de la ciudad.

El minibús de Autovermietung Savanna nos llevó hasta el hotel de Windhoek que habíamos indicado, el Hotel Uhland. Tal como habíamos acordado con la empresa de alquiler nosotros recogeríamos el coche al día siguiente. Teníamos muchos días por delante y preferimos dejar el primer día para descansar del vuelo intercontinental y hacer una primera toma de contacto con el país antes de coger el coche.

Llegados al hotel, dejamos el equipaje, nos duchamos y fuimos andando hacia el centro de la ciudad, a 1,5 km del hotel. Por el camino encontramos grandes avenidas y edificios ministeriales y privados.

Fragmentos del meteorito Gibeon en la calle Post St Mall de Windhoek
Fragmentos del meteorito Gibeon en la calle Post St Mall de Windhoek

Bajando por la calle peatonal Post St Mall llegamos al Town Square Mall, un centro comercial donde hay una tienda MTC en la que compramos las tarjetas SIM para nuestros móviles. Adquirimos dos SIM, cada una con un paquete de 300 minutos de llamadas nacionales gratis, 150 SMS y 18 GB de datos durante 30 días. Fue más que suficiente para nuestras necesidades. Pagamos 594 N$ (unos 28,8 €) por las dos SIM, ya colocadas y funcionando.

Comimos algo por el centro y compramos algunas cosas en un supermercado del centro comercial para cenar en el hotel. Después de pasear un poco por el centro volvimos a pie por otro camino hasta el hotel. El resto del día descansamos y preparamos las siguientes jornadas de viaje.

Alojamiento en Alojamiento en Windhoek: Hotel Uhland (62 €/nochepor una habitación triple con desayuno incluido). Ubicado en el nº 147 de la calle dr. Kenneth David Kaunda, en un barrio residencial, a 1.5 km al norte del centro de la ciudad. El hotel está bastante bien y el personal es muy atento. El único inconveniente es que está lejos del centro para ir a pie. Tiene una piscina pequeña. Recomendable

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 47 km.


Día 3: WINDHOEK - REHOBOTH - MARIENTAL - ANIB KALAHARI LODGE - MARIENTAL

Nos despertamos a las 6 de la mañana, desayunamos en el restaurante del hotel y preparamos el equipaje. A las 8:00 ya estábamos listos y esperando al empleado de Autovermietung Savanna con el que habíamos acordado que nos pasaría a buscar por el hotel para llevarnos a sus oficinas, a 3,5 km del hotel, en otro punto de la ciudad.

Una vez en las oficinas de Autovermietung Savanna (80 Trift Street, Windhoek), acabamos de arreglar todo el papeleo del alquiler y, sobre todo, nos explicaron un montón de cosas sobre el vehículo y todo lo que lo que lo acompañaba (ver en otro apartado de esta guía las características del coche que alquilamos). Entre las explicaciones pusimos especial atención en como cambiar una rueda, como inflar/desinflar una rueda para circular por arena, como montar las tiendas sobre el vehículo, etc.

Todo ello nos llevó dos horas e hicimos bien de no recoger el coche el día anterior, recién aterrizados del vuelo intercontinental, ya que es importante prestar mucha atención y estar muy despiertos y descansados para intentar retener tantas explicaciones.

Ya con el coche, y antes de marchar de Windhoek, nos paramos en un súper Spar para comprar agua y algunos víveres. Y a continuación salimos hacia el sur de la capital por la carretera B1. La primera impresión sobre las carreteras namibias es que, en general, son estrechas. Y eso que no parece que la falta de espacio sea un problema en Namibia!!.

Al llegar a la población de Rehoboth nos paramos a comer en un lugar llamado Tony's Pizza, en la entrada norte.

Después continuamos viaje hacia el sur por la misma carretera asfaltada y llegamos a Mariental sobre las 15:30. Durante el recorrido desde Windhoek habíamos pasado por paisajes desérticos, pero cautivadores.

Dejamos el equipaje en el Aub Guesthouse, el alojamiento que teníamos reservado en Mariental y a continuación salimos con el coche hacia el nordeste para hacer una breve incursión en el desierto del Kalahari.

Para hacerlo decidimos ir hasta el Kalahari Anib Lodge, un lodge situado a unos 34 km de Mariental. De la carretera B1 parte la bonita pista C20 en dirección a Stampriet y a continuación seguimos por una pista de arena hasta el lodge.

Paisaje del Kalahari
Paisaje del Kalahari

Una vez en el lodge quisimos hacer una caminata por los alrededores y elegimos un camino llamado Ostrich Trail, una ruta circular de 6 km que atraviesa un paisaje muy bonito, típicamente del Kalahari, con tierra roja, matorrales y algunos árboles.

La temperatura era muy agradable. Por la mañana, en Windhoek, hacía fresco, pero después la temperatura había llegado a los 26 °C. Estábamos en invierno, pero habíamos ido en manga corta casi todo el día.

​Caminando por la ruta Ostrich Trail, en el Kalahari
​Caminando por la ruta Ostrich Trail, en el Kalahari

Pasadas las 6 de la tarde, con el sol a punto de esconderse en el horizonte, iniciamos el camino de vuelta hacia Mariental. Llegamos cuando ya era casi oscuro, sobre las 18:40, y justo antes de que cerrara el súper Shoprite, donde queríamos comprar algunas cosas. Este súper cerraba a las 19:00 y el Spar a las 18:00.

De vuelta al apartamento cenamos y después estuvimos preparando la ruta del día siguiente antes de ir a dormir.

Alojamiento en Alojamiento en Mariental: Aub Guesthouse (31 €/noche en un apartamento con cocina, dos habitaciones y dos baños). Ubicado en el nº 668 de la calle Aub St de Mariental. Este sitio es muy tranquilo y tiene una excelente relación calidad/precio. Su propietario es muy cordial. Muy recomendable.

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 347 km.


Día 4: MARIENTAL - BOSQUE DE ÁRBOLES QUIVER - GIANT'S PLAYGROUND - KEETMANSHOOP - HOBAS

Nos levantamos a las 6:45 y, tras el desayuno, hicimos el equipaje y lo cargamos en el coche antes de marchar de Mariental. Pusimos rumbo hacia Keetmanshoop por la carretera B1. Había tramos de esta carretera que no estaban en muy buen estado y poco después encontramos 90 km de obras, con trayectos ya arreglados y otros a medias.

Tras recorrer 230 km desde Mariental, y justo antes de llegar a Keetmanshoop, nos desviamos por la pista M29 para ir hasta el Bosque de Árboles Quiver (Quiver Tree Forest). Son unos 15 km de pista en buen estado.

En el bosque de árboles Quiver
En el bosque de árboles Quiver

Al llegar al Quiver Tree Rest Camp fuimos a recepción y allá pagamos la entrada al bosque de árboles Quiver. En total pagamos 330 N$ los tres. Con el coche continuamos hasta el parking del bosque y allí lo aparcamos.

A pie recorrimos el bosque de estos árboles tan curiosos. Este bosque comprende unos 250 ejemplares del árbol Aloidendron dichotomum, una especie conocida localmente con el nombre de «árbol Quiver». Es un lugar extraordinario, muy bonito y realmente mágico. Tiene que una gran experiencia pernoctar en el Quiver Tree Rest Camp y acercarse al bosque por la noche a hacer fotografías.

Un ejemplar «chafardero» de damán de El Cabo (Procavia capensis) en el bosque de árboles Quiver
Un ejemplar «chafardero» de damán de El Cabo (Procavia capensis) en el bosque de árboles Quiver

Después de un largo rato recorriendo el bosque en compañía de unos animalitos muy simpáticos, llamados damanes de El Cabo, dimos por acabada la visita y volvimos hacia el coche. Si visitáis el sur de Namibia no os perdáis este lugar. No pararéis de hacer fotos para intentar retener la magia del lugar.

Seguimos por la pista unos 5 km más allá y llegamos al parking del Giant's Playground, un lugar muy curioso, formado por pilas de piedras basálticas. El nombre proviene del hecho de que parecen piezas gigantes de un juego infantil de construcción. A veces estas pilas de rocas toman formas inverosímiles.

Hicimos un circuito a pie de unos 30 minutos que nos llevó por lugares muy bonitos. Y tanto aquí como en el Quiver Tree Forest estuvimos siempre completamente solos. No encontramos a nadie, lo cuál ayudó aún más a tener la sensación de estar en un lugar muy remoto.

Montones de piedras basálticas en el Giant's Playground
Montones de piedras basálticas en el Giant's Playground

Acabada esta visita volvimos al coche y marchamos hacia Keetmanshoop. Cuando llegamos a esta ciudad era la hora de comer y fuimos al centro comercial Old Mutual Mall pensando que habría algún restaurante normal, pero nos tuvimos que conformar con uno de comida rápido de la cadena Hungry Lion.

Después fuimos a un súper Shoprite que hay justo al lado para comprar víveres para los días siguientes.

Eran ya las 15:15 y pusimos rumbo hacia el Canyon Roadhouse Campsite, nuestro alojamiento para las dos noches siguientes, situado a 135 km de aquí. Los primeros kilómetros por la B4 son de asfalto, pero poco después cogimos la pista D545 que ya no dejamos hasta el final. Fueron casi 100 km de pista polvorienta. Pero por suerte estaba en buen estado y podíamos circular a unos buenos 80 km/h. Esta pista pasa por la cabecera de la presa Naute Dam y cruza el río Lowen.

Cuando aún era claro llegamos al Canyon Roadhouse Campsite. Al registrarnos en la recepción nos dieron la plaza 12 en el camping que hay en la parte de atrás del restaurante. Primeramente montamos las tiendas sobre el coche, ya que era el primer día que lo hacíamos nosotros solos y necesitamos nuestro tiempo.

Tras una merecida ducha fuimos a cenar al restaurante del camping. No nos atrevimos a cenar en el exterior, junto al coche, porque hacía un poco de viento y era frío. Y eso que durante el día habíamos llegado a los 28°C.

Y después de una agradable y buena cena en el restaurante, con una decoración temática muy curiosa, volvimos hacia nuestro coche para pasar nuestra primera noche de aventura.

Alojamiento en Alojamiento en Hobas: Canyon Roadhouse Campsite (34 €/noche en camping). Lugar ubicado en mitad de la nada, ideal para visitar el Fish River Canyon. Las plazas de camping están bastante bien, debajo de un árbol, con electricidad, agua y barbacoa. Las duchas y lavabos comunes están bien mantenidos. También hay un restaurante temático. Merece la pena visitar el lugar aunque no se aloje, ya que tiene una curiosa colección de coches antiguos y una estética norteamericana de los años 50. Muy recomendable

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 398 km.


Día 5: HOBAS - FISH RIVER CANYON (miradores y caminatas por la zona) - CANYON LODGE - HOBAS

Mientras desayunábamos en el camping vimos unas cebras que venían a beber a un charco de agua próximo a nuestra parcela. Tras recogerlo todo y plegar las tiendas nos fuimos hacia el Cañón del río Fish (Fish River Canyon).

El Cañón del río Fish es el más grande de África, con unos 160 km de largo, hasta 27 km de ancho y en algunos lugares casi 550 metros de profundidad. El río Fish es el río interior más largo de Namibia, pero que solo fluye de forma intermitente. La parte del cañón que visitamos forma parte del parque transfronterizo ǀAi-ǀAis/Richtersveld, entre Namibia y Sudáfrica.

Al llegar a Hobas, al cabo de 16 km de pista, encontramos la entrada principal a la zona natural del Cañón del río Fish. En la oficina del parque nos registramos para entrar en la zona protegida y pagamos en efectivo 450 N$ por nosotros tres y el coche. Junto a la entrada, pero ya dentro de los límites del parque, se encuentra el Hobas Campsite, un camping de gestión estatal y dónde hay un gran grupo de babuinos al acecho para robar la comida de los campistas.

Vista del Cañón del Río Fish desde el mirador principal
Vista del Cañón del Río Fish desde el mirador principal

Desde aquí hay 10 km más de pista hasta llegar al mirador principal del Cañón del río Fish. Desde este mirador las vistas sobre el cañón son realmente espectaculares. En las fechas de este viaje el río Fish no tenía prácticamente agua, pero, aun y así, el lugar es extraordinario. Nos dejó sin palabras y no podíamos dejar de admirar este paisaje grandioso.

Desde este mirador fuimos andando por el borde del cañón unos 2 km hasta llegar al Hiker's Point, el lugar donde empieza el camino de bajada hacia el río para los que hacen la ruta a pie de cinco días y 86 km por el cañón del río Fish. Para el resto de visitantes está del todo prohibido bajar, puesto que es necesario un permiso especial.

Desde el mirador de Hiker's Point hay vistas diferentes sobre el cañón, pero igualmente espectaculares. Desde aquí volvimos hacia el mirador principal y ya con el coche regresamos hasta el Hobas Campsite, donde hicimos un almuerzo de picnic.

Después de comer volvimos hacia el cañón del río Fish y cogimos una pista que sale a la izquierda del mirador principal y que al cabo de 1,5 km finaliza sobre un promontorio. En este punto hay otro mirador, el Sunset viewpoint.

Las vistas desde este mirador son también fuera de serie. Y es muy recomendable hacer el camino a pie que baja hasta el extremo sur del promontorio, sobre el mismo acantilado.

Con el coche deshicimos el camino hacia el mirador principal. Esta pista puede ser complicada de hacer para un coche con poca altura al suelo. Y desde el mirador principal cogimos la pista que va hacia Hobas, pero 1,6 km más allá nos desviamos hacia la derecha siguiendo otra pista que es el camino hacia el mirador de Sulphur Springs.

El mirador de Sulphur Springs se encuentra a unos 15 km del cruce con la pista hacia Hobas. La pista que conduce a él transcurre pegada al borde del acantilado sobre el cañón y por el camino hay otros miradores, como el mirador Swaelbron.

Otro punto de vista diferente del Cañón del Río Fish
Otro punto de vista diferente del Cañón del Río Fish

Desde cualquiera de estos miradores disfrutamos de unas vistas increíbles sobre diferentes puntos de este escenario natural tan extraordinario. Con la última luz de la tarde se crean sombras y tonalidades de luz sobre las rocas que le dan un nuevo aire. Y así no nos cansábamos de mirar y admirar estos paisajes, no encontrando nunca el momento de marchar.

Desde el mirador de Sulphur Springs deshicimos el camino hasta la pista principal y, una vez más, volvimos hasta el mirador principal para hacer más fotos de la fotogénica y archifamosa curva del río Fish. De todos modos, para hacer fotos desde este punto es mejor la luz de la mañana que la de la tarde.

Desde aquí iniciamos, cuando ya eran las 18:30, el camino de regreso hacia nuestro camping siguiendo la pista D601, pero unos pocos kilómetros más allá de Hobas nos desviamos por la pista C37 hacia el sur. Esta pista transcurre durants unos kilómetros a los pies de unos grandes acantilados que forman parte de la reserva natural privada Gondwana Canyon Park.

Chacales de lomo negro en la zona del Cañón del Río Fish
Chacales de lomo negro en la zona del Cañón del Río Fish

Al llegar a la altura de los lodges Gondwana Canyon Village y Gondwana Canyon Lodge dimos media vuelta y, ahora sí, regresamos a nuestro alojamiento. Por el camino pudimos ver varios órices, chacales de lomo negro, avestruces, etc.

Llegamos al Canyon Roadhouse Campsite sobre las siete de la tarde, cuando ya era prácticamente oscuro. Montamos rápidamente las tiendas, nos duchamos y fuimos hacia el restaurante a cenar. Y tras la cena, de vuelta a nuestra parcela, aún pudimos disfrutar un buen rato de un magnífico cielo estrellado como hacía tiempo que no veíamos.

Alojamiento en Alojamiento en Hobas: Canyon Roadhouse Campsite (34 €/noche en camping)

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 110 km.


Día 6: HOBAS - AUS - KOLMANSKOP - LÜDERITZ

Nos levantamos a las 6:35, cuando aún era oscuro, y muy abrigados para combatir el frío, subimos andando por un camino hasta lo alto de un cerro que hay junto al camping para ver la salida del sol desde su cima. En el camino nos encontramos un par de órices jóvenes muy cerca del camping.

Salida del sol vista desde una colina cerca del camping Canyon Roadhouse
Salida del sol vista desde una colina cerca del camping Canyon Roadhouse

Desde la cima de esta loma hay una vista abierta de 360° que está muy bien. El sol no apareció por el horizonte hasta las 7:20. Nos quedamos un rato más antes de volver al camping, desayunar y recogerlo todo antes de abandonar el camping. Pero antes de hacerlo nos paramos en la entrada principal del Canyon Roadhouse para tomar un último café y aprovechar para hacer fotos de los coches antiguos y la decoración de época que define este lugar tan curioso.

Decoración exterior del complejo Canyon Roadhouse
Decoración exterior del complejo Canyon Roadhouse

Teníamos por delante 402 km hasta llegar a Lüderitz, con algunas paradas intermedias. Tomamos la pista C12 hacia el norte y deshicimos todo el trayecto que habíamos hecho el día que vinimos desde Keetmanshoop.

Cuando la C12 desemboca en la carretera B4 entonces cogimos esta hacia el oeste. Por el camino pasamos por paisajes muy variados y bonitos. Cuando llegamos a Aus, a 277 km desde el punto de inicio, ya eran ya las 13:30 y nos desviamos hacia el centro del pueblo para ir a comer al restaurante del Bahnhof Hotel.

Esta fue una decisión de lo más acertada porque comimos de lujo en la terraza exterior del restaurante. Tanto la comida como el servicio fueron más que excelentes. Y no os perdáis la carta de postres que ofrece (y el tamaño de las raciones). Fue, sin duda, uno de los mejores restaurantes de todo el viaje.

Conduciendo por la carretera en dirección a Lüderitz
Conduciendo por la carretera en dirección a Lüderitz

Al las 15:15 retomamos la ruta y a partir de Aus la B4 cruza los límites del Parque Nacional de Namib-Naukluft, el parque nacional más grande de Namibia con casi 50.000 km². Este parque incluye parte del desierto del Namib, considerado el desierto más antiguo del mundo, y la cordillera de Naukluft. Todo el recorrido hasta la costa es una sucesión de paisajes increíbles.

Al llegar a la altura de Kolmanskop, a 115 km de Aus, nos desviamos para visitar este famoso pueblo fantasma. Pero cuando llegamos a la puerta de entrada, sobre las 16:30, vimos que el acceso estaba cerrado porque el horario de visita era de 8 a 13 horas todos los días. Y el precio de la entrada era de 130 N$ por persona, incluyendo una visita guiada que se hacía a las 9:30 y a las 11:00 todos los días, excepto el domingo que se hacía a las 10:00.

También hay un ticket, que costaba 330 N$ y que permite entrar en cualquier momento del día, incluyendo la salida y la puesta de sol, pensado básicamente para fotógrafos.

Estuvimos a punto de irnos para volver a la mañana del día siguiente, pero vimos un vigilante cerca de la entrada y le pedimos si podíamos hacer la visita y, para nuestra sorpresa, dijo que sí, que aparcáramos en la entrada y que podíamos entrar y hacer la visita por nuestra cuenta... y gratis.

Antiguas casas de Kolmanskop asediadas por las dunas de arena
Antiguas casas de Kolmanskop asediadas por las dunas de arena

Dicho y hecho, nos colamos por la valla de entrada e hicimos toda la visita al pueblo completamente solos. Realmente se trata de un lugar muy curioso. En total estuvimos más de una hora visitando lo que queda de esta antiguo asentamiento, entrando en muchos de los edificios abandonados y haciendo un montón de fotos. Y es que se trata de un lugar terriblemente fotogénico y, hasta cierto punto, inquietante.

Kolmanskop es ahora un pequeño asentamiento fantasma que está siendo engullido por la arena del desierto, pero a principios del siglo XX fue un pequeño núcleo de mineros que llegó a ser muy próspero gracias a la abundancia de diamantes en la zona. Pero más tarde esta riqueza en piedras preciosas se fue agotando y el pueblo se abandonó definitivamente en 1958.

Nos fuimos de Kolmanskop con la última luz del sol del día, la cual le proporcionaba una atmósfera especial. De vuelta al coche retomamos el camino hacia Lüderitz, a solo 12 km de aquí.

Arena invadiendo el antiguo hospital de Kolmanskop
Arena invadiendo el antiguo hospital de Kolmanskop

Cuando llegamos a Lüderitz fuimos hacia el alojamiento reservado de hoy, The Cormorant House, ubicado en una península llamada Shark Island, junto al puerto de Lüderitz.

Tras dejar el equipaje y el coche en el alojamiento y de ver una preciosa puesta de sol sobre el océano desde el balcón de nuestra habitación, fuimos andando hacia el centro de la pequeña ciudad para ir a cenar. Nos quedamos en el restaurante Barrels Restaurant and Barimage, donde cenamos bastante bien y el ambiente era muy acogedor.

Alojamiento en Alojamiento en Lüderitz: The Cormorant House (92 €/nocheen un apartamento). Situado en el nº 627 de Insel St en Lüderitz, este apartamento tiene unas vistas extraordinarias de la bahía de Lüderitz y está decorado con buen gusto. Dispone de cocina y también de un balcón frente al mar. Tiene parking privado y seguro para el coche. Y está a sólo 600 metros del centro a pie. Muy recomendable.

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 404 km.


Día 7: LÜDERITZ - DÍAS POINT - AUS - AT KRONENHOF (DUWISIB)

Cuando nos levantamos pronto por la mañana, había una espesa niebla sobre Lüderitz y la visibilidad era muy limitada. Después de desayunar y recoger el equipaje y cargarlo en el coche, dejamos el alojamiento y aparcamos el coche en la calle Bismark, junto al FNB. «Contratamos» a un chico que se ofreció, tal como pasa en todas las ciudades namibias, a hacer de vigilante de nuestro coche.

La estación de tren de Lüderitz
La estación de tren de Lüderitz

E iniciamos el recorrido a pie por el centro de Lüderitz que proponía nuestra guía Bradt. En aquel momento la niebla ya se había levantado un poco y la visibilidad ya no era tan mala. Empezamos este itinerario a pie en la fuente que hay en el cruce de las calles Bismark y Dias.

A lo largo de esta interesante ruta tuvimos la oportunidad de ver un montón de bonitas casas y edificios construidos a principios del siglo XX, durante la época colonial alemana. Muchas de ellas están pintadas de colores y le dan un toque bastante pintoresco en la ciudad. En un lugar donde son habituales las nieblas, estos colores vivos ayudan a romper la grisu del ambiente.

Calle de Lüderitz, con la Goerke Haus y la iglesia Felsen Kirche al fondo
Calle de Lüderitz, con la Goerke Haus y la iglesia Felsen Kirche al fondo

Los dos edificios más característicos de la ciudad, la Goerke Haus y la iglesia Felsen Kirche están situados en la parte más elevada de la ciudad y son visibles prácticamente desde todas partes. Están perfectamente mantenidos y son muy bonitos, a pesar de que solo los pudimos ver por fuera, puesto que los horarios de visita son muy restringidos.

También es bastante bonito el edificio de la Colonial Train Station, el cual aún sirve como estación de tren para trenes de mercancías.

Acabado el circuito a pie por la ciudad de Lüderitz fuimos al Spar para comprar algo que necesitábamos. Después volvimos al coche y salimos de Lüderitz hacia el sur por una pista que llega hasta Dias Point.

El camino para ir hasta el extremo de la península donde se encuentra Dias Point, a 21 km de Lüderitz, es muy bonito y vale realmente la pena. En el trayecto vimos numerosos grupos de flamencos en diferentes sitios.

Cuando llegamos donde se encuentra el faro de Dias Point aparcamos el coche cerca del puente de madera que va hacia Dias Point. El nombre de este lugar proviene del hecho que el navegante y explorador portugués Bartolomeu Dias fue el primer europeo en llegar a la bahía donde se encuentra Lüderitz en 1487 y en este punto erigió una cruz de piedra. Actualmente hay una réplica de esa cruz.

La cruz de Dias Point, con vistas sobre esta costa salvaje
La cruz de Dias Point, con vistas sobre esta costa salvaje

El puente de madera que conecta con el lugar donde se encuentra la réplica de la Cruz de Dias Point estaba en muy mal estado en las fechas de nuestra visita y no era accesible. Para acceder a la cruz había que saltar por encima de las rocas y esquivar los charcos de agua hasta llegar a unas escaleras de cemento que suben hasta el promontorio donde se encuentra la Cruz.

Desde este promontorio hay muy buenas vistas sobre el mar y este pedazo de costa tan escarpada. Desde aquí vimos unos cuántos leones marinos que había sobre unas rocas, así como cormoranes, flamencos y delfines. Después exploramos los alrededores del promontorio, donde había muchos flamencos pescando en los charcos de agua que habían quedado tras la bajada de la marea.

El día era gris, lo cual añadía aún más dramatismo a este lugar tan salvaje y bonito. Antes de marchar de aquí también fuimos hasta el faro de Dias Point, puesto que desde su base hay muy buenas vistas sobre la bahía de Shearwater.

Flamencos buscando alimento en la costa cercana a Dias Point
Flamencos buscando alimento en la costa cercana a Dias Point

Acabada la visita a este lugar tan interesante volvimos en dirección a Lüderitz para conectar con la carretera B4 y poner rumbo hacia el este. Al llegar a Aus, a 125 km de Lüderitz, ya era la hora de comer y repetimos en el restaurante del Bahnhof Hotel. Tras el almuerzo, y antes de marchar de Aus, aprovechamos para llenar los dos depósitos de gasolina del coche en la estación de servicio que hay a 50 metros del hotel. Repostamos 108 litros de diésel que pagamos con tarjeta.

Salimos de Aus pasadas las tres de la tarde y teníamos por delante 203 km de pista hasta llegar al camping que teníamos reservado. La pistas C13 primero y C27 después siguen una ruta muy escénica, bordeando el desierto del Namib por su lado oriental. Entre paradas para hacer fotos y muchos kilómetros por tramos en que la pista tiene muchas curvas y cambios de rasante o bien su estado no era demasiado bueno, tardamos más tiempo de lo esperado y el tiempo se nos echó encima.

Siguiendo la pista C27 que bordea el desierto del Namib
Siguiendo la pista C27 que bordea el desierto del Namib

Llegamos a la puerta exterior del camping At Kronenhof Campsite, situada justo antes de llegar a Betta, cuando eran las 18:43 y ya empezaba a hacerse oscuro. Pero, para nuestra sorpresa, un rótulo sobre la puerta anunciaba que la recepción del camping estaba aún a 10 km siguiendo una estrecha pista que se adentra hacia el sur. Por el camino tuvimos que abrir hasta tres puertas de paso entre fincas. Finalmente llegamos a la recepción del camping cuando ya era casi totalmente oscuro.

Nos dieron una parcela en un lugar en el que estábamos completamente solos, sin nadie en un par de kilómetros a la redonda. En cualquier caso fue un sitio de lujo, uno de los mejores de todo el viaje.

Por la noche el silencio era total, solo roto por un búho... o similar.

Alojamiento en Alojamiento en Duwisib: At Kronenhof Campsite (26 €/noche en camping). Ubicado en un sitio absolutamente extraordinario, en mitad del desierto, ya unos 10 km de la entrada principal en la pista C27, antes de llegar a Betta. Las instalaciones del camping estaban superbien y las duchas y aseos comunes inmaculados. Puesto que estábamos solos en el camping los sitios comunes eran privados, sólo para nosotros. Un auténtico lujo de camping. Y sin wi-fi ni señal de móvil ya 2 km de la recepción, el aislamiento era total. Probablemente la mejor relación calidad/precio en todos los alojamientos del viaje. Puesto absolutamente recomendable.

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 377 km.


Día 8: AT KRONENHOF - DUWISIB CASTLE - BETTA - SESRIEM

Cuando salió el sol, sobre las 7:15, nos dimos cuenta de que estábamos rodeados por un paisaje alucinante, de montañas y sabana. Después de desayunar y plegar las tiendas fuimos con el coche hasta la recepción, donde tomamos un café y aprovechamos el wi-fi del edificio para conectarnos a internet.

Paisaje alrededor del camping At Kronenhof
Paisaje alrededor del camping At Kronenhof

Deshicimos los 10 km (abriendo y cerrando las tres puertas de paso) hasta llegar nuevamente a la pista C27. Continuamos en dirección a Betta, donde nos desviamos por la pista D638 para ir hasta el castillo de Duwisib, a 20 km de este cruce.

Cuando llegamos al castillo de Duwisib pagamos la entrada (80 N$/pax) para hacer la visita. Es muy chocante encontrar un castillo pseudo-medieval en un lugar como Namibia, en mitad de la sabana africana.

Fue construido por el Barón von Wolf, un oficial alemán de alto rango, a principios del siglo XX como un regalo para su entonces prometida Jayta. Actualmente el castillo está bajo la gestión del gobierno namibio.

El interior del castillo esta decorado con mobiliario alemán de los años 1908-09 y con fotos de la familia von Wolf, así como de miembros de las realezas europeas de la época. La visita está bien y vale la pena desviarse para venir hasta aquí. El camino para llegar hasta el castillo desde Betta también vale mucho la pena por su belleza paisajística.

Vista frontal del castillo de Duwisib
Vista frontal del castillo de Duwisib

Acabada la visita al castillo de Duwisib desandamos el camino hasta llegar de nuevo a Betta, donde nos paramos a comer en el pequeño restaurante que hay junto a la estación de servicio. Y almorzamos muy bien, en su terraza exterior.

A continuación proseguimos la ruta hacia Sesriem, siguiendo los 137 km de pista de la C27. Los últimos kilómetros de pista antes de llegar a Sesriem fueron lentos a causa de las obras de mejora que se estaban llevando a cabo.

El trayecto entre Betta y Sesriem es muy escénico e hicimos muchas paradas para hacer fotos de paisajes y de animales que íbamos viendo aquí y allá. Los animales que más vimos fueron órices y avestruces, pero también perros salvajes africanos y cebras, entre otros.

Unos órices cruzando la pista C27 que nos condujo a Sesriem
Unos órices cruzando la pista C27 que nos condujo a Sesriem

Llegamos al camping Sossus Oasis Campsite de Sesriem sobre las 18:15. Tras registrarnos en el camping montamos las tiendas sobre el coche en la parcela asignada. Cada plaza tiene ducha y lavabo privado, pero este es semi-abierto y aquel día y aquella hora hacía bastante viento y la sensación de frío durante la ducha era molesta.

Después dimos un paseo a pie por los alrededores del camping, pero volvimos pronto a nuestra parcela porque hacía frío a causa del fuerte viento y nos tuvimos que refugiar dentro de las tiendas porque fuera el viento era muy molesto.

Alojamiento en Alojamiento en Sesriem: Sossus Oasis Campsite (30 €/noche en camping). Este camping está situado en Sesriem, a menos de 500 metros de la entrada principal del parque Namib Naukluft. Es más básico y rústico que el de la noche anterior, pero no está mal. Y el nivel de ocupación era casi del 100%. Las parcelas son amplias y disponen de baño y ducha privados. Tiene una gasolinera y una tienda junto a la recepción. Recomendable.

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 191 km.


Día 9: SESRIEM - SOSSUSVLEI - DEADVLEI - SOSSUSVLEI - HIDDENVLEI - SESRIEM

Tras el desayuno, el plegado de las tiendas y recogerlo todo salimos del camping para ir hacia Sossusvlei.

El día anterior anterior ya habíamos decidido que no nos levantaríamos mucho antes de la salida del sol para estar en la puerta del parque Namib-Naukluft en la hora de su apertura y después ir a toda velocidad (con mil coches más) hasta Deadvlei o la Duna 45 para ver la salida del sol.

La puerta exterior del parque, o Sesriem Gate, abre a la hora de la salida del sol y cierra coincidiendo con la puesta de sol. Por lo tanto, los horarios van cambiando según la época del año y conviene saber cuáles son por no tener problemas a la entrada o la salida.

También hay una puerta interior, la cual da acceso al desierto, que abre una hora antes y cierra una hora después de los horarios de la puerta exterior. Por tanto, para poder cruzar esta puerta en el horario de apertura o de cierre hay que estar alojados dentro de los límites del parque, o sea, en el Sesriem Campsite, el Sossus Dune Lodge, el Sesriem Oshana Campsite, o bien en el Dead Valley Lodge.

Carretera desde Sesriem a Sossusvlei
Carretera desde Sesriem a Sossusvlei

Nosotros llegamos a la puerta exterior, la Sesriem Gate, y allá pagamos los 450 N$ por el acceso de dos adultos, una menor y el coche. No encontramos nada de cola para entrar. Una vez ya dentro de los límites de parque del Namib-Naukluft seguimos la carretera asfaltada que se interna en el parque. Los paisajes a lado y lado de la carretera son alucinantes.

Nos paramos en el primer mirador que encontramos, a 24 km de Sesriem, pero también en otros lugares que nos gustaron especialmente. Pasamos de largo las dunas 40 y 45 (las dejamos para la tarde) y al cabo de un rato llegamos al parking de Sossusvlei, a 51 km de Sesriem.

Para ir hasta Deadvlei, a 4,2 km de aquí, hay que hacerlo obligatoriamente en un vehículo 4x4, ya que el terreno es de arena fina y profunda y sin la tracción total y una cierta pericia en la conducción sobre este tipo de terrenos es fácil quedarse bloqueado en la arena.

Pero si vais con un coche 2x4, o bien con un 4x4 pero no os atrevéis a conducir sobre la arena, existe la opción de hacer a pie el trayecto o bien subir a un vehículo 4x4 compartido que sale cada 30 minutos hasta las 15:00 horas.

Este servicio lanzadera entre los parkings de Sossusvlei y Deadvlei está gestionado por Namibia Wildlife Resorts (NWR), la entidad gubernamental que gestiona los parques namibios. El precio de este servicio era, en las fechas de este viaje, de 180 N$/adulto y 90 N$ para menores de 16 años, ida y vuelta.

Vista elevada sobre Deadvlei, con la duna Big Daddy a la izquierda
Vista elevada sobre Deadvlei, con la duna Big Daddy a la izquierda

Una vez llegados al parquing de Deadvlei anduvimos 1 km hasta llegar al Deadvlei propiamente dicho. Había bastante gente para el estándar de Namibia, pero menos de la que esperábamos, teniendo en cuenta que este es probablemente el lugar más famoso y visitado del país.

Deadvlei es un lago seco de arcilla blanca rodeado de altas dunas de arena y donde se pueden ver los esqueletos de numerosos árboles que se secaron hace centenares de años a causa de un cambio de clima en la zona. Este lugar es realmente de otro mundo, increíble, hipnótico, irreal, ... No sorprende que las fotos y videos de este lugar sean tan reproducidas y virales.

Uno de los árboles fosilizados de Deadvlei
Uno de los árboles fosilizados de Deadvlei

Después de disfrutar de un largo rato en el lecho de este lago seco, haciendo fotos a diestro y siniestro, subimos por un camino de arena muy empinado hacia la cima de la duna Big Daddy. Esta duna, de 350 metros de altura, es la más alta de Sossusvlei y una de las más altas del mundo. Este camino de subida es tan empinado y andar por la arena tan cansado que nos dejó exhaustos, así que no llegamos arriba de todo de la duna porque no quisimos dedicarle tan tiempo. De todas maneras, las vistas desde la atalaya donde estábamos recompensaron sobradamente el esfuerzo.

De vuelta al parking de Sossusvlei, sobre las 14:00 horas, hicimos un picnic en unas mesas que había allí, bajo un árbol. La mayor parte de la gente ya había marchado y estuvimos casi solos.

Por lo que vimos, parece que la mayoría de visitantes llegan a Sossusvlei / Deadvlei a primera hora de la mañana y a las 12 del mediodía ya empiezan a irse. A partir de las 13:00 horas Deadvlei, por ejemplo, ya estaba casi vacío de gente.

Y tras el picnic hicimos la caminata hacia Hiddenvlei, el «vlei» (lago seco) menos visitado de todos los de la zona. El camino para ir hasta él sale del parking de Sossusvlei y son unos 2 km sobre arena y rodeados de un paisaje de dunas realmente impresionante. El camino esta marcado por unas estacas de madera de color blanco. No hay pérdida.

Matorrales y dunas de arena roja en el camino de Sossusvlei a Hiddenvlei
Matorrales y dunas de arena roja en el camino de Sossusvlei a Hiddenvlei

Hay que contar unos 45 o 50 minutos en hacer el camino por cada sentido, ya que se anda sobre la arena. El camino es absolutamente maravilloso y lo mejor de todo es que no encontramos a nadie en ningún momento, ni en el camino ni en todo el rato que estuvimos disfrutando del Hiddenvlei. Estábamos completamente solos en mitad del desierto, rodeados de dunas espectaculares.

Durante la caminata mirad de cerca la arena y muy probablemente veréis huellas de los diversos animales que habitan la zona, como por ejemplo los órices (gemsbok) y las gacelas saltadoras (springbok), así como huellas de animales más pequeños que generalmente viven bajo la arena.

Vista de Hiddenvlei
Vista de Hiddenvlei

Comparando ambos vlei, Hiddenvlei y Deadvlei, el primero no es tan espectacular como ei segundo, pero es igualmente muy bonito y con el añadido de poder experimentar la soledad en este bello entorno natural, ya que muy pocos visitantes van hasta él.

Volvimos al parking de Sossusvlei sobre las 17:30, después de hacer la caminata a Hiddenvlei. Ya solo quedaba un coche, aparte del nuestro. Teníamos una hora para volver a Sesriem antes de que cerraran la puerta exterior del parque, a las 18:30. Hicimos los 65 km de carretera asfaltada hasta Sesriem prácticamente solos.

Por el camino hicimos algunas paradas para hacer fotos de la Duna 45 y la Duna 40, entre otras, pero no las escalamos porque ya no teníamos tiempo. En cualquier caso, el último sol de la tarde realzaba aún más el color rojizo de la arena.

La Duna 45, una de las más populares de Sossusvlei
La Duna 45, una de las más populares de Sossusvlei

Llegamos a la puerta exterior del parque a las 18:29, sobre la campana, y el funcionario que había en la puerta nos tachó de la lista de coches que habíamos entrado por la mañana.

De vuelta a nuestro camping nos duchamos y descansamos un rato antes de volver a salir. Fuimos andando hasta el Sesriem Restaurant, a 1 km de nuestro camping. Este restaurante forma parte del Sesriem Campsite, gestionado por NWR, y se encuentra dentro de los límites del parque. Así que tuvimos que cruzar de nuevo la puerta exterior de entrada al parque, abierta ahora sólo a peatones y justificando que teníamos reserva en el restaurante.

Este restaurante está bien, pero se dio la circunstancia de que antes de que nos sirvieran la cena el complejo se quedó sin luz eléctrica y tuvimos que cenar con la luz de nuestros frontales. Tras la cena volvimos andando tranquilamente al camping mientras disfrutábamos de la vista de un magnífico cielo estrellado.

Más información de como organizar vuestra visita a Sossusvlei en How to explore Sossusvlei: your perfect guide.

Alojamiento en Alojamiento en Sesriem: Sossus Oasis Campsite (30 €/noche en camping)

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 124 km.


Día 10: SESRIEM - SESRIEM CANYON - SOLITAIRE - TRÓPICO DE CAPRICORNIO - WALVIS BAY

Antes de dejar el camping, a primera hora, compramos cosas que necesitábamos en el súper del propio camping.

Nuestro destino de hoy era Walvis Bay, pero antes de marchar de Sesriem no queríamos dejar de visitar el magnífico Cañón de Sesriem (Sesriem Canyon), la segunda atracción turística más importante de la zona después de Sossusvlei.

Vista superior del Cañón de Sesriem, con las dunas de Sossusvlei al fondo
Vista superior del Cañón de Sesriem, con las dunas de Sossusvlei al fondo

El Cañón de Sesriem se encuentra a unos 4,5 km al sur de Sesriem y para llegar al parking del cañón (posición GPS: -24.518385, 15.800258) hay que entrar forzosamente por la misma puerta de entrada exterior al parque Namib-Naukluft, tal como si fuéramos a Sossusvlei, y por tanto hay que pagar la entrada al parque.

Cuando pasamos por esta entrada justificamos al funcionario que había en la puerta que no queríamos volver a pagar la entrada porque ya lo habíamos hecho el día anterior y le mostramos el comprobante.

Ante la insistencia del funcionario del parque en que debíamos pagar amagamos con dar media vuelta y marchar de allí sin ir al cañón. Afortunadamente para nosotros, el funcionario cedió y nos permitió pasar sin tener que pagar otra vez. En caso contrario hubiéramos pagado, claro.

Desde esta entrada hay poco más de 4 km de pista hasta llegar al parking del Cañón de Sesriem donde, nada más llegar, enseguida se intuye la presencia del cañón ante nosotros.

Se trata de un cañón natural creado por el río Tsauchab en la roca sedimentaria de la zona. Hace aproximadamente 1 km de largo y hasta 30 metros de profundidad, con una anchura mínima de dos metros en algunos lugares. Este cañón tiene la particularidad de que retiene agua de forma permanente en un punto donde muchos animales van a beber.

En el interior del Cañón de Sesriem, en uno de los tramos más estrechos
En el interior del Cañón de Sesriem, en uno de los tramos más estrechos

El Cañón de Sesriem no tiene nada que ver con el Cañón del Río Fish, ni en dimensiones ni en forma, pero sería una lástima marchar de Sesriem sin visitarlo. En nuestra opinión vale muchísimo la pena.

Desde el parking, a pie, fuimos hacia el oeste siguiendo el borde del cañón por su parte superior, proporcionándonos una vista elevada sobre el propio cañón. De vuelta al parking bajamos por un camino hasta el lecho seco del río, ya dentro del cañón. Desde aquí seguimos el trazado del río hacia el este, el lado donde el cañón es más estrecho y espectacular.

Al cabo de unos pocos centenares de metros llegamos a un cul-de-sac, un punto donde unas enormes rocas han caído sobre el cauce y cierran el paso. Si subís por las rocas veréis una especie de cueva dónde, durante la mayor parte del año, se esconde una piscina llena de agua gracias a la sombra y la humedad que proporciona la propia cueva. Esta es una importante fuente de agua para algunos animales de la zona.

Desde este punto deshicimos el camino y anduvimos hacia el otro lado del cañón, el cual se va abriendo y ensanchando paulatinamente, a la vez que el cañón va perdiendo profundidad. Transcurridos más de 90 minutos explorando el cañón volvimos al parking y cogimos el coche para iniciar el camino hacia Walvis Bay, saliendo antes del parque Namib-Naukluft.

Desde Sesriem hasta Walvis Bay son 325 km donde casi todo es pista y algunos tramos de pista están en mal estado. Eso sí, los paisajes a lo largo de esta ruta son todos una maravilla.

A la hora de comer nos paramos en Solitaire, un lugar de parada muy popular entre los viajeros y que está situado en el cruce de las pistas C19 y C14, a 84 km de Sesriem. En este punto encontramos más guiris que en cualquier otro lugar de Namibia.

Pizarra con las precipitaciones recogidas en Solitaire
Pizarra con las precipitaciones recogidas en Solitaire

A mediados del siglo XX unos colonos establecieron un asentamiento en este lugar, con una tienda ( y más tarde una estación de servicio) que era la única en muchos kilómetros a la redonda, tal como continúa pasando hoy en día. Pero ahora, además, tiene una cafetería/panadería, un restaurante, un taller mecánico, dos lodges y un camping.

Almorzamos en la agradable terraza exterior del restaurante y lo cierto es que comimos muy bien. Y los precios eran muy razonables, tratándose de un lugar tan turístico. Después de comer fuimos a la cafetería para probar su famosísimo pastel de manzana, un clásico en toda visita a Solitaire.

Y finalizamos la visita a este lugar tan popular paseando y curioseando por el asentamiento y sus alrededores. A continuación retomamos el trayecto hacia Walvis Bay cogiendo la pista C14 hacia el norte.

Al cabo de 51 km nos paramos en el lugar donde se encuentra la señal que marca el paso de la línea del Trópico de Capricornio. Esta es otra de las paradas clásicas de los viajeros a lo largo de esta ruta, pero no tiene más: es solo un letrero lleno de pegatinas que señaliza una línea imaginaria.

La señal que indica el paso por la línea del Trópico de Capricornio en la ruta entre Sesriem y Walvis Bay
La señal que indica el paso por la línea del Trópico de Capricornio en la ruta entre Sesriem y Walvis Bay

Unos 38 km más adelante la pista C14 se adentra en un escenario rocoso espectacular, el que forma el Cañón del Río Kuiseb (Kuiseb River Canyon) y que contrasta con las llanuras abiertas de otras zonas del Namib.

De todos modos, algunos tramos de la C14 están en mal estado y ello obliga a disminuir la velocidad, con lo que el tiempo de viaje se alarga. Por suerte los últimos kilómetros antes de llegar a Walvis Bay eran de carretera asfaltada o de pista compactada y pudimos correr más.

Llegamos a Walvis Bay a las 18:46, cuando aún era claro. Primeramente fuimos hasta Walvis Bay Backpackers, el alojamiento que teníamos reservado, ubicado donde se encuentra el Walvis Bay Tourism Centre y junto al curioso y sorprendente campo de golf de Walvis Bay.

Después de registrarnos y de dejar el equipaje en el chalé fuimos a comprar víveres al gran supermercado Spar que hay en el centro de la ciudad. De vuelta al confortable chalé cenamos y a dormir.

Alojamiento en Alojamiento en Walvis Bay: Walvis Bay Backpackers & Self-Catering (32 €/noche en apartamento de tipo chalet). Ubicado en la esquina de las calles 5th Rd y Union St de Walvis Bay, justo donde se encuentra la oficina de turismo. Se trata de un sitio muy tranquilo, acogedor y agradable, con cocina, comedor, dormitorio y baño. Tiene parking privado para el coche. Relación calidad/precio excelente. La señora que lleva el sitio es muy simpática y atenta. Sitio muy recomendable.

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 339 km.


Día 11: WALVIS BAY - BAHÍA DE WALVIS BAY Y SALINAS - SWAKOPMUND

Cuando nos levantamos, a primera hora de la mañana, comprobamos que había niebla, tal como ya sabíamos que pasaba habitualmente en la costa namibia en esta época del año. Y la segunda sorpresa del día fue que teníamos una de las ruedas de detrás bastante deshinchada. Primer pinchazo en 2.300 km, la mayoría por pistas. Y afortunadamente fue la única.

Siguiendo las instrucciones que nos habían dado cuando recogimos el coche el primer día (también habíamos hecho fotos y video de las explicaciones), pero no sin esfuerzo a causa de las dimensiones de estas ruedas, conseguimos cambiarla por una de las dos ruedas que teníamos de repuesto.

Dejamos el alojamiento y fuimos, antes que nada, a buscar un taller donde arreglar la rueda pinchada. Nos habían recomendado un lugar llamado TrenTyre, un taller especializado en neumáticos y baterías que está ubicado en el n.º 152 de la calle 6th St. En solo 15 minutos tuvimos la rueda arreglada y solo por 85 N$. Pagamos y pedimos la factura de la reparación, ya que al final del viaje la compañía de alquiler nos reembolsó este dinero.

Resultó que la rueda se había pinchado a causa de un trozo de metal clavado en el neumático que seguramente habíamos pillado ayer en algún punto entre Sesriem y Walvis Bay. La suerte es que el propio trozo de metal había taponado la salida del aire de la rueda y esto había evitado que el pinchazo se hubiera manifestado durante el trayecto del día anterior. Y durante la noche en Walvis Bay el neumático se fue deshinchando poco a poco hasta que lo vimos por la mañana. Estábamos en una ciudad y aquí fue mucho más fácil y rápido arreglar el pinchazo.

Vista sobre la laguna de Walvis Bay
Vista sobre la laguna de Walvis Bay

Solucionado el tema del pinchazo, y nuevamente con dos ruedas de repuesto, fuimos con el coche hasta la zona del frente marítimo de Walvis Bay y lo aparcamos junto al hotel Protea Pelican Bay. A estas alturas la niebla ya se había disipado y lucía el sol. Así que paseamos un buen rato a lo largo del paseo marítimo Lagoon Esplanade que bordea la laguna hacia el sur. La temperatura era fresca, pero iba remontando poco a poco.

Desde un muelle de madera pudimos ver numerosos flamencos y también unos cuántos delfines nadando en las aguas poco profundas de esta laguna. Tras este agradable paseo volvimos al coche. Ya conduciendo repetimos parcialmente la ruta que habíamos hecho a pie, pero ahora siguiendo la avenida The Esplanade.

Más hacia el sur esta avenida desemboca en la carretera D1986, la cual continúa bordeando la laguna hasta el final. Al cabo de unos 8 km llegamos a unas salinas, las más importantes de Namibia, y siguiendo por la D1986, ya convertida en pista de tierra y sal compactada, pudimos ver numerosos lagunas y canales de color rosado que son muy fotogénicos. Después esta pista junto a unas lagunas más grandes y finaliza en una playa que da a mar abierto: es la playa de Paaltjies.

En la playa de Paaltjies, el verdadero inicio por arena de la ruta hacia Sandwich Harbour
En la playa de Paaltjies, el verdadero inicio por arena de la ruta hacia Sandwich Harbour

En este punto comienza el trayecto de 50 km que va por la playa, literalmente encajonada entre las grandes dunas del desierto del Namib y el mar, hasta llegar a Sandwich Harbour, un remoto lugar de la costa atlántica namibia que tiene una gran laguna que sirve de refugio para un gran número de aves.

El camino a Sandwich Harbour, que tal como hemos dicho transcurre por la arena de la playa, solo se puede hacer con un vehículo 4x4, pero es del todo temerario intentarlo por libre, ni que sea que tengáis mucha experiencia conduciendo sobre arena.

Las mareas, la climatología o un pequeño error en la elección del camino correcto os pueden dejar con el vehículo dentro del agua o bloqueado en la arena en mitad de la nada. Hay varias agencias de Walvis Bay que venden tours de medio día o un día entero a Sandwich Harbour. Los precios son bastante elevados, pero si queréis vivir la experiencia de ir hasta allá, esta es la mejor opción.

Nosotros tuvimos cierto interés en hacer esta excursión a Sandwich Harbour, pero no pudimos cuadrar la excursión en el calendario que teníamos y la descartamos. A pesar de ser, obviamente, paisajes diferentes, en el pasado ya habíamos hecho rutas por arena y también habíamos subido y bajado grandes dunas con un 4x4 en el desierto del Sahara, tanto en Libia como en Argelia.

Volviendo a la playa de Paaltjies donde estábamos, hicimos unas cuántas fotos de esta bonita playa. Tuvimos la oportunidad de ver unos cuántos lobos marinos pescando entre las olas. Y mientras estábamos en esta playa, hacia las 13:15 horas, pasaron unos cuántos vehículos 4x4 de las excursiones que iban hacia Sandwich Harbour. Aquí empezaba su verdadero periplo por la arena.

Imagen de las salinas de Walvis Bay
Imagen de las salinas de Walvis Bay

En cualquier caso, la ruta que habíamos hecho desde Walvis Bay bordeando la laguna, pasando por las salinas de Walvis Bay y acabando en la playa de Paaltjies nos pareció fantástica y nos gustó muchísimo. Todo ello justificaba por si sola la visita a Walvis Bay. Y además aquí tendréis la oportunidad de ver muchos flamencos.

Con el coche volvimos hasta el frente marítimo urbano de Walvis Bay y aparcamos junto al Walvis Bay Yacht Club. Y fuimos andando hasta el próximo restaurante Anchors Waterfront, situado frente a los embarcaderos desde donde salen los catamaranes turísticos. Almorzamos de lujo en una mesa exterior de este restaurante. Pedimos pesacdo y tanto el producto, como la presentación, como el servicio fueron de primera. Muy recomendable, de verdad.

Tras la comida y una buena sobremesa dimos un pequeño paseo por el Waterfront antes de volver al coche y poner rumbo hacia Swakopmund en un trayecto corto, de solo 30 km.

Almuerzo de pescado en el restaurante «Anchors Waterfront» de Walvis Bay
Almuerzo de pescado en el restaurante «Anchors Waterfront» de Walvis Bay

Cuando llegamos a Swakopmund fuimos hasta el Desert Sands Boutique B&B, donde nos tenían que entregar las llaves de la casa Cozy Inn Swakopmund, que habíamos reservado. A continuación fuimos hasta la casa y descargamos el equipaje. Se trata de una casa enorme, de tipo Self Catering, que tuvimos para nosotros solos.

A continuación, con el coche fuimos hasta el centro de Swakopmund, concretamente hasta la zona donde se encuentran el faro de Swakopmund y el Swakopmund Mole.

El año 1899 se construyó un dique marino (llamado Mole) con la intención de proteger el puerto de Swakopmund y crear un lugar de amarraje para grandes cargueros, pero un mal diseño del arquitecto, que desconocía la corriente de Benguela, hizo que en menos de cinco años la entrada del puerto quedara ahogada por un banco de arena.

Y dos años más tarde el propio puerto había sido invadido por la arena para crear la que ahora es la playa Palm Beach. Actualmente el Swakopmund Mole es una zona de recreo desde la que hay muy buenas vistas sobre el océano, la playa y la ciudad.

Cielo rojizo en la puesta de sol, vista desde el Swakopmund Mole
Cielo rojizo en la puesta de sol, vista desde el Swakopmund Mole

También dimos una vuelta por el centro para ver sus edificios históricos, muy interesantes. Cuando se hizo oscuro fuimos a un supermercado Spar del centro para comprar lo que necesitábamos y después volvimos hacia la casa.

En la costa atlántica de Namibia, durante el invierno, la temperatura máxima no suele pasar de los 19ºC, pero la temperatura nocturna no baja tanto como en el interior.

Alojamiento en Alojamiento en Swakopmund: Cozy Inn Swakopmund (91 €/noche en una casa entera). Casa ubicada en la calle Makriel St de Swakopmund, a unos 1,7 km del centro. Es una enorme casa de planta baja con un agradable jardín. Es tan grande que puedes perderte en su interior, pero es prácticamente como estar en tu casa. Tiene garaje cerrado privado para aparcar el coche. Muy recomendable.

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 92 km.


Día 12: SWAKOPMUND - ZEILA WRECK - CAPE CROSS - HENTIES BAY - WLOTZKASBAKEN - SWAKOPMUND

Este día el objetivo era recorrer y visitar una parte de la Costa de los Esqueletos (Skeleton Coast), una franja costera que se extiende entre el río Kunene, en la frontera norte con Angola, y el río Swakop, en el lado sur de la ciudad de Swakopmund. Pero en algunas ocasiones se usa este nombre para describir toda la costa namibia.

La Costa de los Esqueletos es famosa mundialmente por los numerosos naufragios de barcos que tuvieron lugar en sus aguas debido a las corrientes marinas y a sus persistentes nieblas, antes de la existencia de los modernos sistemas de navegación por satélite. También es famosa por su extrema desolación.

Antes de salir de Swakopmund hacia el norte nos paramos a llenar los dos depósitos de diésel en una estación de servicio Shell que encontramos en la parte norte de la ciudad. A continuación tomamos la carretera asfaltada C34 que va hacia el norte y pasa junto a las salinas de Swakopmund y sigue paralela a la costa.

El primer punto donde nos paramos fue en el lugar del naufragio del barco Zeila, a 52 km de Swakopmund. Este naufragio es uno de los más recientes en la zona, puesto que tuvo lugar en el año 2008 y, en consecuencia, también es el que se encuentra más intacto. Este es el naufragio más fotografiado de todos, porque es el más accesible. Ahora el barco, varado a pocos metros de la arena, es la percha preferida de los cuervos marinos.

Lugar del naufragio del barco Zeila en la Costa de los Esqueletos
Lugar del naufragio del barco Zeila en la Costa de los Esqueletos

Hicimos unas cuántas fotos del barco y de los alrededores. Es un lugar muy desolado y el día gris que teníamos aún acentuaba más esta sensación. Como que este lugar es muy frecuentado por visitantes también encontraréis varios vendedores de figuritas y minerales. Vigilad las pertenencias en los coches porque parece que ha habido casos de robos.

A continuación continuamos viaje hacia Cape Cross, unos 73 km más al norte. Pasada la población de Henties Bay se acaba rápidamente el asfalto y la C34 se convierte en una pista de arena y sal compactadas. La conducción por ella es fácil y agradable, pero hay que tener cuenta que puede ser resbaladiza.

Toda esta franja costera del país, entre Walvis Bay al sur y el río Ugab al norte, es una zona protegida que forma parte del Parque Nacional Dorob.

Al llegar a las oficinas de la Cape Cross Seal Reserve pagamos 450 N$ por la entrada de los tres y del coche. Después continuamos otros 2,5 km hasta el parking que hay junto a la zona donde se encuentran los animales.

Varios lobos marinos apilados en la colonia de Cape Cross, en la Costa de los Esqueletos
Varios lobos marinos apilados en la colonia de Cape Cross, en la Costa de los Esqueletos

En esta reserva protegida se encuentra la mayor colonia de lobos marinos afroaustralianos (Arctocephalus pusillus y Cape fur seals o Brown fur seals en inglés) del mundo, llegando hasta los 200.000 ejemplares. Estos mamíferos marinos son más próximos a los leones marinos que a las focas. Las frías aguas de la Corriente de Benguela son muy ricas en pescado, suficiente para alcanzar una colonia tan masiva.

Gracias a unas pasarelas de madera se puede andar entre la enorme colonia de animales. Tanto en tierra como en el mar veréis muchísimas lobos marinos, por todas partes. Es fácil ver peleas entre machos o pequeños buscando un pecho de donde alimentarse, pero la gran mayoría parecen dormitar, sin importarles demasiado si están apilados los unos encima de los otros.

No dejaron de sorprendernos por su comportamiento y también por los gritos y sonidos que emiten. Es importante tener cuenta el fuerte mal olor que hay en el ambiente a causa de la concentración de excrementos, por lo que es recomendable llevar algo para taparse la nariz, como un pañuelo, un buff o similar.

La visita a la reserva de Cape Cross nos gustó mucho. Pensamos que es una experiencia que vale mucho la pena y si vais con niños se lo pasarán muy bien viendo los animales.

Un joven lobo marino mirándonos con ojos lastimosos, en la colonia de Cape Cross
Un joven lobo marino mirándonos con ojos lastimosos, en la colonia de Cape Cross

Una vez finalizada esta visita estuvimos valorando la posibilidad de continuar la ruta hacia el norte hasta llegar a la Ugab Gate, la puerta de entrada sur al Skeleton Coast National Park, pero finalmente desistimos porque suponía hacer 81 km de ida y 81 de vuelta (unas dos horas de trayecto en total) solo para ver ia famosa puerta de entrada al parque con las calaveras, ya que no teníamos intención de continuar más allá.

El parque nacional de la Costa de los Esqueletos cubre una de las áreas más remotas y hostiles del mundo. La parte sur del parque, que va desde el río Ugab hasta Terrace Bay es fácilmente accesible. Solo hay que comprar un permiso que se obtiene en la entrada del parque y seguir unas ciertas normas, puesto que es una zona muy remota y solitaria. Un 4x4 no es estrictamente necesario, pero es altamente aconsejable. La parte norte del parque, entre Terrace Bay y Kunene, en la frontera con Angola, solo es accesible a través de un turoperador que cuente con la concesión y los permisos necesarios.

Cuando estábamos planificando el viaje estudiamos la posibilidad de entrar en el parque nacional de la Costa de los Esqueletos por la entrada de Ugab, pernoctar en Torra Bay o a Terrace Bay y salir por Springbokwasser para llegar a Damaraland. Pero finalmente no pudo ser por la imposibilidad de meter esta ruta en el calendario previsto.

Así que desde Cape Cross empezamos a deshacer el camino, en dirección a Swakopmund, pero ahora haciendo más paradas por el camino para disfrutar de un escenario realmente increíble.

Parada en la ruta por la Costa de los Esqueletos, cerca de las colinas de Lagunenberg
Parada en la ruta por la Costa de los Esqueletos, cerca de las colinas de Lagunenberg

Por ejemplo, antes de llegar a la altura de los pequeños cerros de Lagunenberg dejamos el coche junto a la carretera e hicimos un paseo a pie por la zona para encontrar gemas, preciosos bloques de sal cristalizada de colores rosados y formas complejas, que abundan en la zona. También encontramos otros muchos minerales de atractivos colores y formas.

Y conduciendo por estos paisajes, bonitos pero a veces también monótonos, llegamos a Henties Bay. Esta vez nos desviamos para entrar en el pueblo y buscar un lugar donde comer. Tuvimos la gran suerte de encontrar el restaurante The Fishy Cornerimage (19 Benguela St, Henties Bay), donde disfrutamos de una comida memorable a base de pescado y acompañado de vino de Namibia. Este lugar fue un gran descubrimiento, tal como pasó con el restaurante Anchors de ayer en Walvis Bay.

Algunas de las singulares construcciones de Wlotzkasbaken
Algunas de las singulares construcciones de Wlotzkasbaken

Tras el almuerzo retomamos la ruta hacia el sur y 40 km después nos paramos en el pequeño pueblo de Wlotzkasbaken, formado por casas de veraneo pintadas de vivos colores. Aquí no llega ni la electricidad ni la red pública de agua. De hecho el agua potable llega en camiones por carretera y se almacena en torres de agua sobre los tejados de las casas, proporcionando un carácter único a este asentamiento.

Por tanto, cada una de las poco más de 100 casas que hay son autosuficientes en cuanto a agua y electricidad. Y todas ellas han sido diseñadas y construidas por sus propietarios. Todo ello hace que el pueblo de Wlotzkasbaken sea un tipo de asentamiento único en Namibia y, en broma, se le conoce con el sobrenombre de la «República Libre de Wlotzkasbaken».

Paseamos un buen rato por su playa, repleta de pequeñas piedras muy curiosas y de colores muy variados. Nos lo pasamos muy bien buscando piedrecitas. La visita valió mucho la pena.

Uno de los singulares edificios históricos de Swakopmund
Uno de los singulares edificios históricos de Swakopmund

Finalmente llegamos a Swakopmund, 33 km más al sur, cuando el sol ya se estaba escondiendo. Aparcamos en el centro para dar un paseo por el centro y por Palm Beach mientras se iba haciendo oscuro. El centro de Swakopmund está repleto de bonitos edificios, muchos de ellos de carácter histórico.

Alojamiento en Alojamiento en Swakopmund: Cozy Inn Swakopmund (91 €/noche en una casa)

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 278 km.


Día 13: SWAKOPMUND - USAKOS - SPITZKOPPE

Hoy dejábamos Swakopmund y la costa namibia para ir hacia el interior, a la región de Damaraland. Y antes de hacerlo aprovechamos la mañana para visitar nuevamente el centro de Swakopmund, pero ahora con luz diurna.

El frente marítimo de Swakopmund, visto desde el laaaaaargo muelle de madera
El frente marítimo de Swakopmund, visto desde el laaaaaargo muelle de madera

Aparcamos el coche en una calle del centro de la ciudad e hicimos una visita a pie por los alrededores. Fuimos hasta el largo muelle de madera que hay en la parte sur de Palm Beach. Desde él pudimos ver numerosos delfines nadando por la zona.

A continuación volvimos al centro por los bonitos jardines que hay a lo largo de A. Schad Promenade. En estos jardines hay abundantes ejemplares de pintadas (o gallinas de Guinea), llamativas por los colores de su plumaje.

Después recorrimos varias calles de la zona centro para ver edificios históricos y otros monumentos de importancia. Está claro que Swakopmund tiene un marcado carácter alemán, mientras que la vecina Walvis Bay tiene un estilo más holandés.

El edificio Altes Amtsgericht, la antigua magistratura de Swakopmund
El edificio Altes Amtsgericht, la antigua magistratura de Swakopmund

Cuando era casi mediodía nos despedimos de Swakopmund y tomamos la ruta asfaltada B2 que va hacia Windhoek. Cuando llegamos a Usakos, al cabo de 142 km, nos paramos en un restaurante que hay a la entrada de este pueblo: el restaurante Namib Oasis farmstall & deliimage, donde comimos bastante bien.

Después de comer deshicimos 22 km por la misma ruta B2 por la que habíamos venido hasta llegar al cruce de donde sale la pista hacia Spitzkoppe. De este punto sale la pista D1918 que al cabo de unos kilómetros nos conduce a la D3716 y finalmente a la D1925. En total son 30 km hasta llegar a la entrada del Spitzkoppe Community Restcamp, el camping donde queríamos pernoctar.

Llegando a Spitzkoppe, con las montañas en el horizonte
Llegando a Spitzkoppe, con las montañas en el horizonte

No teníamos reserva para el camping, pero no tuvimos ningún problema en encontrar plaza. De hecho, en la recepción nos dijeron que podíamos ponernos allá donde quisiéramos y así lo hicimos. Elegimos estar junto a unas bonitos y enormes bloques graníticos que están junto al famoso arco de piedra de Spitzkoppe, conocido también como The Bridge (el Puente) .

El resto de la tarde lo dedicamos a explorar a pie la zona y antes de la puesta de sol fuimos hasta el arco, un lugar mágico. Cuando se hizo oscuro pudimos hacer fotos, con la ayuda de un trípode, de un cielo nocturno increíble.

Formas graníticas de Spizkoppe
Formas graníticas de Spizkoppe

Spitzkoppe es un parque natural, gestionado por una comunidad local, que está rodeado de una vasta extensión árida de donde sobresalen unas espectaculares e insólitas formaciones rocosas que son muy interesantes desde el punto de vista geológico. Estos grandes bloques de granito tienen más de 700 millones de años y forman parte de una antigua cordillera de volcanes que se formaron cuando el supercontinente Gondwana empezó a separarse.

Estas rocas graníticas, de formas extrañas y paredes rojizas, dan lugar a un paisaje especialmente bonito durante la puesta de sol. Y por la noche es uno de los mejores lugares del mundo para ver cielos estrellados. Spitzkoppe también es un lugar espectacular para senderistas y escaladores.

Y es una zona con mucha historia, donde podremos encontrar diferentes pinturas de arte rupestre sobre las rocas, datadas entre 2.000 y 4.000 años atrás, que testimonian la presencia humana de la etnia San (bosquimanos) en este lugar tan especial de Namibia.

Paisaje de Spizkoppe, con el monte Spitzkoppe al fondo
Paisaje de Spizkoppe, con el monte Spitzkoppe al fondo

La cima más alta y característica de Spitzkoppe, visible desde muy lejos, tiene una altura de 670 metros y por su forma es conocida con el mote de «el Matterhorn de Namibia» (el nombre alemán del monte Cervino, entre Italia y Suiza).

En resumen, Spitzkoppe es un lugar insólito y espectacular, siendo la montaña más famosa de toda Namibia. Pero, incomprensiblemente, es un lugar poco visitado y no suele figurar en la lista de lugares imprescindibles a visitar en Namibia. Quién sabe, quizás es mejor así para evitar su masificación.

Nuestro sitio de acampada en Spitzkoppe
Nuestro sitio de acampada en Spitzkoppe

Alojamiento en Alojamiento en Spitzkoppe: Spitzkoppe Community Campsite (23 €/noche en camping). Camping gestionado por una comunidad local damara ubicado a los pies de un conjunto de cimas graníticas que dan lugar a un paisaje extraordinario. No sorprende que este camping está catalogado como uno de los más bonitos del mundo y es mundialmente conocido, sobre todo entre los fotógrafos gracias a sus paisajes ya los cielos nocturnos. Dispone de 31 lugares de acampada repartidos por toda la reserva, dando mucha privacidad y sensación de soledad porque cada una está lejos de las otras. Pero en realidad cada uno puede acampar libremente, donde quiera. Repartidos por los lugares de acampada hay aseos sin agua corriente, pero que están bastante limpios. Los únicos lavabos con agua se encuentran a la entrada de la reserva al lado de unas duchas al aire libre.

Por tanto, en los lugares de acampada no hay agua, ni electricidad, ni wi-fin, ni señal de móvil. Todo aquí es muy básico, pero justamente éste se parte de su encanto. Conviene quitar todo el que necesitamos, porque en la entrada del parque hay una pequeña tienda, pero mejor no confiar. Lugar súper-recomendable.

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 216 km.


Día 14: SPITZKOPPE - UIS - TWYFELFONTEIN

Nos levantamos a tiempo para ver la salida del sol desde lo alto de unas rocas. Una vez recogido todo, con el coche recorrimos diferentes áreas del parque. Empezamos por la Piscina Rocosa (Rock Pool). También fuimos por pistas hacia el oeste, pasando entre las montañas Spitzkoppe y Sugarloaf, llegando hasta la puerta oeste del parque de Spitzkoppe.

Vayas donde vayas en este parque todos sus paisajes son muy bonitos y de aquellos que no se olvidan nunca.

La gran roca que da cobijo a las pinturas rupestres «Small Bushman Paradise»
La gran roca que da cobijo a las pinturas rupestres «Small Bushman Paradise»

Continuamos nuestra ruta por el parque yendo hasta un lugar llamado Small Bushman Paradise, donde se pueden ver pinturas rupestres sobre la roca hechas por los antiguos bosquimanos. Al llegar al parking cogimos uno de los guías locales disponibles para hacer la visita guiada obligatoria. La explicación del chico sobre las pinturas que íbamos viendo fue muy interesante y enriquecedora. Al acabar le dimos una merecida propina, ya que no se paga entrada por ver las pinturas.

Tras esta interesante actividad y de recorrer otros lugares del área dimos por acabada la visita a Spitzkoppe. Pero antes de marchar nos paramos en las duchas que hay a la entrada del camping, las únicas que hay en el complejo.

Nos duchamos y refrescamos en estas duchas al aire libre, mientras veíamos estas imponentes cumbres graníticas. Ahora ya estábamos listos para iniciar el trayecto de 234 km hasta nuestro próximo destino: Twyfelfontein.

Todo el trayecto es por pista, excepto los últimos 20 km, pero los paisajes de Damaraland son, en general, muy bonitos.

Desde Spitzkoppe cogimos la pista D3716 hacia la izquierda y después la D1930 hacia el norte. Justo antes de llegar al asentamiento minero de Uis esta pista conecta con la C36. Y al llegar a Uis, a 91 km de Spitzkoppe, nos desviamos para ir al centro del asentamiento y buscar un lugar donde comer, pero lo único que encontramos fue un pequeño supermercado donde compramos unas bebidas y nos las bebimos fuera mientras hablábamos con algunos locales.

Una de las pistas de grava de Damarlanad en el camino hacia Twyfelfontein
Una de las pistas de grava de Damarlanad en el camino hacia Twyfelfontein

A continuación retomamos la marcha por la C36 y 1,5 km hacia el oeste encontramos el restaurante Brandberg White Lady Cafeimage, donde almorzamos de fábula en su terraza exterior.

Uis es conocido por la riqueza de sus yacimientos de estaño (se pueden ver claramente las minas junto a la C36). El asentamiento se encuentra situado a los pies del monte Brandberg, la montaña más alta de Namibia, con 2.573 metros sobre el nivel del mar y visible desde muy lejos.

Después de comer retomamos la ruta y poco después nos desviamos por la C35 hacia el norte. Esta pista cruza el río Ugab, el cual sirve de frontera entre las regiones de Erongo y Kunene. Unos 250 metros antes, a la derecha, veréis unas paradas de artesanía del pueblo Herero.

En un punto de la ruta nos desviamos por la D2612 que va hacia el oeste. Esta pista estaba asfaltada a partir del cruce que va al Malansrus Tented Camp. Al llegar a la altura del Damara Living Museum giramos a la izquierda por la pista de grava D3254 y al cabo de 2,9 km hacia el sur llegamos al camping Aba-Huab sobre las cinco de la tarde.

Rocas de tonos rojizos en la entrada del Twyfelfontein Country Lodge
Rocas de tonos rojizos en la entrada del Twyfelfontein Country Lodge

Tras registrarnos en este camping, que no habíamos reservado (tampoco era necesario), y para aprovechar la última luz del día fuimos con el coche hasta el Twyfelfontein Country Lodge, el alojamiento de más nivel en esta zona y situado a unos 7 km de pista del camping.

Este lodge está ubicado a los pies de una montaña de roca rojiza, la cual parece de fuego a causa de su fuerte tonalidad con el último sol de la tarde. En la entrada del lodge hay unas rocas con pinturas rupestres.

Antes de que se hiciera oscuro volvimos hacia nuestro camping, ubicado junto al río de Aba Huab, el cual estaba completamente seco, como casi todos los ríos namibios en esta época del año. Este camping está gestionado por una comunidad local y claramente tuvo días mejores.

Esta camping era caro para lo que ofrecía, ya que el mantenimiento brillaba por su ausencia y todo era muy básico. Pero al menos tuvimos electricidad en la parcela, ya que la necesitábamos para enchufar la batería auxiliar del coche, así como nuestras cámaras y móviles.

Alojamiento en Alojamiento en Twyfelfontein: Aba-Huab Community Campsite (30 €/noche en camping). Camping ubicado junto al río Aba Huab, seco la mayor parte del año. También está gestionado por una comunidad local, pero éste, a diferencia del de Spitzkoppe, tiene muchas deficiencias en el mantenimiento y su personal es algo indolente. Dependiendo de la parcela tendrá agua, luz, electricidad, ... o nada de eso. Los baños y duchas son muy espartanos y básicos. Este camping ha tenido días mucho mejores y es caro para el que ofrece.

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 256 km.


Día 15: TWYFELFONTEIN - SAFARI ELEFANTES DEL DESIERTO - PINTURAS RUPESTRES TWYFELFONTEIN - BOSQUE PETRIFICADO - KHORIXAS - OUTJO

A las 8:00 horas habíamos quedado con la chica del camping para hacer la excursión de los elefantes del desierto. Ya lo teníamos todo recogido y las tiendas plegadas porque teníamos que ir con nuestro propio coche y conduciendo nosotros, mientras que la chica iba de guía y como copiloto.

En todo el mundo solo hay elefantes del desierto en Mali y en Namibia. Estos elefantes son una prueba fehaciente de la adaptabilidad de los animales a su entorno. A pesar de que genéticamente no son diferentes de sus primos que viven en la sabana, con una mayor abundancia de alimentos, estas criaturas han adaptado su comportamiento a las duras condiciones del desierto. Comen menos, beben menos y andan hasta 70 km diarios para alimentarse y encontrar agua. Como que también recorren distancias tan grandes en un día, sus piernas parecen más delgadas que las de sus parientes.

Elefantes del desierto sobre el cauce del río Aba Huab
Elefantes del desierto sobre el cauce del río Aba Huab

Actualmente se estima que la población de elefantes del desierto en Namibia es de unos 600 ejemplares y se concentran en las regiones históricas de Damaraland y de Kaokoland. Para poder verlos hay que contratar algún tipo de «tour» porque esta zona no está preparada para la observación de la vida salvaje yendo por libre.

Volviendo a nuestra excursión, nos habían avisado de que ésta solo se podría hacer con un 4x4, pero no nos habían preguntado si teníamos experiencia conduciendo por terrenos realmente complicados, al menos para nuestro estándar.

Desde el camping recorrimos unos 70 km, de ida y vuelta, por pistas de todo tipo (arena, piedras, etc) y con algunos tramos realmente infernales. Finalmente localizamos un par de ejemplares de elefantes del desierto sobre el cauce arenoso del río Aba Huab, pero en un lugar al oeste y muy lejos de nuestro camping. Y en el camino también vimos avestruces y gacelas saltadoras, entre otros animales.

En un momento dado, conduciendo sobre el cauce del río, en un tramo con una gran concentración de arena, necesitamos de la tracción a las cuatro ruedas y la reductora para sacar el coche de la arena. Esta fue nuestra graduación en conducción off-road!!.

En resumen, aparte de poder ver los elefantes del desierto, esta excursión fue toda una aventura y vimos paisajes realmente fantásticos, pero acabamos muy agotados por el hecho de tener que conducir en un terreno tan exigente.

De vuelta al camping pagamos el precio acordado de la excursión: 350 N$/adulto y 175 N$ por nuestra hija menor. El día anterior habíamos preguntado por la misma excursión en el Twyfelfontein Country Lodge y el precio de esta era más del doble que el pagamos nosotros, aunque allí se iba en un grupo organizado sobre un vehículo 4x4 del lodge y conducido por su personal.

A continuación dejamos el camping para ir hasta el lugar donde se encuentran los grabados y pinturas rupestres de Twyfelfontein o /Ui-//aes, lugar inscrito en la lista de Patrimonios de la Humanidad desde 2007. Desde el camping son 6,7 km de pista.

Algunos de los grabados y pinturas rupestres del sitio arqueológico de Twyfelfontein
Algunos de los grabados y pinturas rupestres del sitio arqueológico de Twyfelfontein

Al llegar pagamos la entrada (700 N$ los tres, 250 N$/adulto y 200 N$/niño) y nos asignaron una guía que nos haría el recorrido y las explicaciones de todo aquello que fuéramos viendo.

Patrimonio de la Humanidad En Twyfelfontein hay una de las mayores concentraciones de petroglifos de todo el continente africano y datan de finales de la Edad de Piedra. La mayoría de ellos están en buen estado de conservación y representan rinocerontes, elefantes, avestruces o jirafas, entre muchos otros animales. El yacimiento también tiene refugios rupestres con motivos de figuras humanas pintados en color ocre rojo. El conjunto de grabados y pinturas muestra las prácticas rituales relacionadas con las comunidades de cazadores-recolectores de esta parte del sur de África durante al menos 2.000 años.

La visita guiada, de unos 45 minutos aproximadamente, estuvo muy bien y nos gustó mucho. La encontramos muy interesante y las pinturas rupestres y grabados son una maravilla. Es una visita más que recomendable.

Saliendo de aquí recorrimos 8 km de pista para ir a un lugar denominado Organ Pipes. Se trata de un fenómeno geológico visible en un cerro aislado del monte Burnt y que ha dado lugar a un grupo de columnas basálticas que se asemejan a los tubos de un órgano de iglesia, y de aquí el nombre. El lugar tiene una cierta similitud con las formaciones rocosas que se pueden encontrar en la Calzada del Gigante, sobre la costa norirlandesa.

Cuando llegamos al lugar vimos que había que pagar una entrada de 700 N$ por los tres y consideramos que no valía la pena. Además, hacía mucho calor y estábamos muy agotados por todo lo que llevábamos ya hecho esa mañana.

Volvimos atrás por la D3254 y dejamos atrás Twyfelfontein recorriendo 10 km hasta conectar con la D2612, que cogimos hacia el oeste durante 15 km hasta llegar a la C39. Se iban sucediendo bonitos paisajes pétreos.

Uno de los grandes troncos convertidos en piedra del Bosque Petrificado de Khorixas
Uno de los grandes troncos convertidos en piedra del Bosque Petrificado de Khorixas

Al cabo de 30 km hacia el este nos paramos en el Bosque Petrificado de Khorixas (indicado como Versteende Woud), a pesar de que antes de llegar ya habíamos ido viendo carteles anunciando otros «bosques petrificados» ubicados en fincas privadas. El que mencionamos aquí es el oficial, declarado como Monumento Nacional, y situado en la posición GPS -20.4391579, 14.6061689.

Pagamos 700 N$ por la entrada de los tres e incluía una visita guiada de 30-45 minutos. El uso de guía es obligatorio. En esta visita se recorre un camino por una zona abierta donde hay esparcidos troncos de árboles petrificados de hasta 34 metros de largo y 6 metros de circunferencia, que se estima que tienen unos 260 millones de años.

A causa de la carencia de restos de raíces o ramas, se cree que los troncos fueron transportados a este lugar durante una inundación. Se pueden ver unos 50 árboles individuales, algunos medio enterrados en piedra arenosa y muchos perfectamente petrificados en sílice, con corteza y anillos de árbol.

Nos resultó muy interesante las explicaciones del guía sobre el fenómeno geológico de la conversión de la madera de los árboles en rocas. Pudimos coger un trozo da tronco de árbol petrificado y comprobar que pesaba como una piedra. Durante la visita también vimos numerosos ejemplares de la curiosa Welwitschia, una planta solo presente en el desierto del Namib.

Ejemplar de Welwitsquia sobre un tronco de piedra en el Bosque Petrificado de Khorixas
Ejemplar de Welwitsquia sobre un tronco de piedra en el Bosque Petrificado de Khorixas

Finalizada esta interesantísima visita retomamos el viaje por la C39 en dirección hacia Khorixas, 44 km hacia el este. Esta ciudad fue la capital de la histórica región de Damaraland, pero actualmente está en franca decadencia, con una población muy empobrecida y una tasa de paro estimada del 70%.

En Khorixas solo nos paramos para comprar algunos víveres en un supermercado. A continuación continuamos viaje hacia Outjo por la C39, asfaltada a partir de Khorixas. Por el camino nos paramos en un lugar de picnic junto a la carretera para comer algo rápido.

La distancia desde Khorixas a Outjo por la C39 es de 135 km. Finalmente llegamos a Outjo sobre las seis de la tarde y fuimos directamente al Ombinda Rest Camp, un camping que habíamos visto recomendado en la guía Bradt.

Este camping estaba muy bien equipado, siendo la antítesis del de la noche pasada en Twyfelfontein y, además, era más barato. Aquí aprovechamos para limpiar un poco el coche por dentro y por fuera porque después de tantos kilómetros de pista estaba enteramente cubierto de polvo.

Alojamiento en Alojamiento en Outjo: Ombinda Country Lodge & Campsites (29 €/noche en camping). Camping situado junto a la salida sur de la carretera B1, a 1 km del centro de Outjo. Este lodge/camping esta muy bien, ya que la plaza de camping tiene un baño y ducha privado cerrado, así como una mesa y bancos para sentarse bajo un cobertizo y la tradicional zona de barbacoa. Y el suelo es de cemento y césped, así que no debemos estar pisando arena. Muy recomendable.

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 325 km.


Día 16: OUTJO - OTJIWARONGO - METEORITO DE HOBA - GROOTFONTEIN

Empezamos el día yendo a desayunar a la Outjo Bakkeryimage (75 Hage Geingob Av, Outjo), toda una institución en Outjo y lugar de parada casi obligatoria para los viajeros en esta ciudad. Tiene una amplia carta, con énfasis en la pastelería tradicional alemana.

Junto a la Outjo Bakkery hay un gran supermercado Spar y al otro lado de Tuni Rd se encuentra la tienda Images of Africa, con una amplia selección de artesanía y productos de calidad para llevarse como recuerdo de Namibia y a unos precios mucho más asequibles que en otros lugares del país.

Después de llenar los depósitos de diésel en una de las estaciones de servicio próximas, pusimos rumbo hacia Grootfontein, siguiendo la carretera B1.

La vieja locomotora de vapor alemana, ahora frente a la estación de tren de Otjiwarongo
La vieja locomotora de vapor alemana, ahora frente a la estación de tren de Otjiwarongo

Al llegar a Otjiwarongo, la capital de la región de Otjozondjupa y a 70 km de Outjo, pasamos por delante de la estación de tren de Otjiwarongo y aquí nos paramos para admirar una antigua locomotora alemana de vapor fabricada en Kassel en 1912 y que perteneció a los ferrocarriles de Sudáfrica. Ahora es un monumento, ubicado justo ante la estación de tren.

Aprovechando que era ya la hora de comer, en esta misma ciudad encontramos el restaurante Kari's Place (13 Hindenburg St, Otjiwarongo). Comimos bastante bien, pero sobre todo el lugar es tranquilo y agradable.

Después del almuerzo retomamos la ruta en dirección hacia Grootfontein, todavía por la B1. Al llegar a la población de Otavi, a 121 km de Otjiwarongo continuamos la ruta por la carretera B8 y al cabo de 59 km cogimos a la izquierda la pista D2860, indicada con el letrero Meteorite.

Desde este cruce con la B8 son unos 23 km de buena pista hasta llegar al lugar del Meteorito de Hoba. Aquí se encuentra el meteorito intacto más grande del mundo, con una masa que se estima en más de 60 toneladas. También es la pieza de hierro natural más masiva registrada en la superficie terrestre. De hecho, el meteorito continúa en el mismo lugar donde cayó, hace unos 80.000 años.

Imagen del meteorito de Hoba
Imagen del meteorito de Hoba

Pagamos 700 N$ por las entradas para los tres. En la visita nos acompañó un chico que nos dio todas las explicaciones pertinentes. Es impresionante el tamaño de este trozo de hierro del meteorito. A instancias del chico que nos hacía de guía subimos y nos pusimos de pie sobre el meteorito, sobre un punto central de la parte superior, y gritando cualquier cosa podíamos notar el efecto del metal sobre el sonido de la voz, creando un cierto efecto de eco. Otra visita muy recomendable. Además, estábamos solos y pudimos quedarnos todo el rato que quisimos.

Acabada la visita al meteorito nos dirigimos al alojamiento que teníamos reservado para hoy, el Meteorite Rest Camp, a solo 3 km de aquí. Teníamos un chalé ubicado en los terrenos de una granja, en un entorno muy bonito. Nos bañamos en su piscina, pero el agua estaba muy fría, tal como pasa en todas las piscinas de Namibia en esta época.

Alojamiento en Alojamiento en Grootfontein: Meteorite Rest Camp (65 €/noche en un apartamento tipo chalet). Lugar situado dentro de los terrenos de la granja Venus, a unos 4,5 km del Meteorit Hoba ya 20 km del centro de Grootfontein. El chalet tiene cocina, comedor, sala de estar, baño y dos habitaciones. Está rodeado por un hermoso y agradable entorno, con una piscina al exterior. El wi-fi sólo funciona en la recepción. Su dueña, Madeleine, es muy amable y atenta. En resumen es un sitio muy recomendable y que vale la pena.

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 275 km.


Día 17: GROOTFONTEIN - HAKUSEMBE RIVER LODGE - RUNDU - HAKUSEMBE RIVER LODGE

Cuando nos despertamos, a primera hora de la mañana, el chalé estaba rodeado de vacas comiendo hierba seca de un campo próximo. Después de desayunar y cargar el equipaje en el coche marchamos de esta granja en la que habíamos estado tan bien.

Teníamos por delante un trayecto de 290 km hasta Rundu, prácticamente todo de carretera asfaltada. La pista D2905 conecta con la carretera B8 poco antes de llegar a Grootfontein. La B8 cruza la población de Grootfontein, la cual parece un lugar ordenado y muy bien puesto, y continúa hacia el norte.

Jirafa junto a la carretera entre Grootfontein y Rundu
Jirafa junto a la carretera entre Grootfontein y Rundu

Íbamos recorriendo kilómetros y los paisajes se iban sucediendo, similares pero diferentes. En un punto nos paramos para ver unas jirafas junto a la carretera. Al cabo de 127 km desde Grootfontein llegamos a la Puerta de Mururani.

Esta puerta es un punto de control que hace de barrera veterinaria para evitar la propagación de la enfermedad boca-manos-pies al ganado de las granjas que hay hacia el sur de la puerta. Coincide con el límite entre las regiones namibias de Otjozondjupa y Kavango West.

A partir de la Puerta de Mururani el paisaje cambia radicalmente: se pasa de los grandes latifundios que ocupan las granjas propiedad de los blancos del sur, en Grootfontein, a los minifundios de la población negra hacia el norte.

En la parte norte no hay, en general, vallas que eviten que las vacas, cabras o caballos invadan la carretera. También encontraréis bastante gente andando por la orilla de la carretera. Por tanto hay que estar más atentos al conducir para evitar atropellos. Otra diferencia es que alrededor de la carretera se suceden pequeños poblados con muchos tenderetes donde se venden figuras de barro, artesanía en general o bien fruta.

Y al cabo de 144 km desde la Puerta de Mururani llegamos al Hakusembe River Lodge sobre las 13 horas. Después de registrarnos en la recepción del lodge, de disfrutar de una bebida de bienvenida y dejar las cosas en nuestra cabaña, dimos una vuelta rápida por el complejo. Es un lugar caro, pero lo cierto es que está muy bien.

Este lodge está construido junto a la orilla del río Okavango, elevada sobre el nivel dedl río unos pocos metros, por lo que las vistas sobre el río y los alrededores son sensacionales.

Al otro lado del río se extiende una zona despoblada que pertenece a la provincia angoleña de Cuando-Cubango. Este era el primer río con agua que veíamos en Namibia en todo el viaje.

En esta época del año el caudal del río no está en máximos, pero aún lleva bastante agua. Parece que es entre octubre y noviembre cuando el río Okavango está en mínimos e impide que cualquier barca navegue por él. Aun y así, el río no tiene demasiada profundidad en este tramo y llegamos a ver dos personas vadeando el río a pie desde el lado namibio hasta el lado angoleño y el agua les llegaba a la cintura. Probablemente sabían que por allí el río era menos profundo.

Puesta de sol sobre el río Okavango, aquí frontera natural entre Namibia y Angola
Puesta de sol sobre el río Okavango, aquí frontera natural entre Namibia y Angola

Tras un rato explorando los alrededores del lodge cogimos el coche para ir hasta el centro de Rundu, unos 15 km al este del lodge. La idea era buscar un lugar por comer ya que en el lodge hay restaurante, pero al mediodía la carta es poco variada y con precios muy caros (y por la noche solo existe la posibilidad de un bufete que costaba 450 N$/persona).

Finalmente nos quedamos en el Gino's Bakery & Takeaway (calle E Kakakuru, Rundu), donde comimos platos ya preparados y que no estaban nada mal. Después de comer dimos una vuelta por el centro de Rundu con el coche, puesto que en aquel momento la temperatura en el exterior era de 35°C. Rundu es la capital de la región Kavango East.

De vuelta al lodge, por la tarde, nos dimos un baño en la piscina pero, tal como era esperable, el agua estaba bastante fría. Y después a disfrutar de una magnífica puesta de sol sobre el río Okavango. Fantástico momento del día en este lugar, con una luz y tranquilidad sin parangón.

Alojamiento en Alojamiento en Rundu: Gondwana Hakusembe River Lodge (280 €/noche en una cabaña, cono almuerzo de tipo buffet incluido). Este lodge se encuentra en unos 15 km al oeste de Rundu, ubicado en un lugar fantástico, junto al río Okavango y frente a Angola. Las cabañas son muy confortables y acogedoras. El almuerzo, incluido en el precio, es muy completo, pero no cenamos ni comer en el restaurante del resort porque los precios nos parecieron muy caros. Tiene piscina, unos bonitos jardines y una terraza sobre el río donde disfrutar de unas estupendas puestas de sol. El sitio está muy bien, pero es demasiado caro para el que ofrece.

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 327 km.


Día 18: HAKUSEMBE RIVER LODGE - FRONTERA DE SARASUNGU - KAYENGONA - RUNDU - HAKUSEMBE RIVER LODGE - CRUCERO FLUVIAL RÍO OKAVANGO - HAKUSEMBE RIVER LODGE

Después de un buen desayuno de tipo bufete en el restaurante del lodge, cogimos el coche con la idea de explorar los alrededores de Rundu. Esta ciudad y alrededores solo es un lugar de paso en la ruta hacia el Caprivi, la zona más oriental del país. En nuestro caso, sin tiempo para continuar más hacia el este, la razón de venir hasta Rundu fue la de ver una región del país muy distinta al resto, tanto en paisajes como socioculturalmente.

El puesto fronterizo de Sarasungu entre Namibia y Angola
El puesto fronterizo de Sarasungu entre Namibia y Angola

Primeramente fuimos hasta el paso fronterizo de Sarasungu, un puente flotante sobre el río Okavango que une Namibia y Angola unos pocos kilómetros al este del centro de Rundu. Cuando llegamos vimos que se trata de un lugar fronterizo con muy poca actividad y bastante cutre. A este paso fronterizo se llega a través de una pista de 3 km desde la antigua carretera de Rundu a DIvundu.

Aparcamos el coche junto a los barracones del lugar fronterizo namibio y pedimos a una funcionaria si podíamos cruzar hacia el puente, la tierra de nadie, para hacer fotos y pudimos hacerlo sin problemas. Así que cruzamos la puerta-valla metálica fronteriza y pudimos hacer fotos sobre el río Okavango desde el mismo puente que une ambos países.

A continuación seguimos con el coche hacia el este unos 14 km por la carretera que bordea el río Okavango hasta llegar al n'Kwazi Lodge. Queríamos tomar alguna bebida en él, pero lo encontramos cerrado y tuvimos que regresar por el mismo camino. En cualquier caso el trayecto mereció la pena por las diferentes vistas sobre el río y para poder constatar la dura realidad rural de esta zona del país.

En el entorno rural de Rundu, en la orilla namibia del río Okavango
En el entorno rural de Rundu, en la orilla namibia del río Okavango

Desde aquí volvimos hasta el centro de Rundu y fuimos a comer al restaurante del Tambuti Lodge (Mbwangungu Hamutenya St, Rundu), ubicado junto a la llamada Rundu Beach. Comimos bastante bien y la carta era extensa, a pesar de que el servicio fue un poco lento.

Por la tarde volvimos hacia el lodge donde estábamos alojados porque por la mañana habíamos reservado plazas en el crucero por el río Okavango (Sunset Boat Cruise) a las 17:00, para ver la puesta de sol desde el río. El precio del crucero era de 366 N$/adulto y 183 N$/niños.

Tras subir a la embarcación con unas siete personas más, a las 17:00 iniciamos la navegación saliendo del pequeño muelle del lodge. Primeramente navegamos siguiendo la orilla angoleña del río en dirección este. Vimos pequeños cocodrilos, una serpiente verde, pájaros, etc. aparte de bonitos paisajes y de unos pescadores pescando tilapias.

Cuando llegamos al punto más lejano de la excursión, el patrón de la barca la ancló en el centro del río y nos sirvió a todos los pasajeros un pequeño refrigerio con bebidas y snacks. Cada cual podía elegir la bebida que quisiera. Así que todos pudimos hacer un brindis en mitad der río Okavango, nosotros con champán.

Pescadores en el río Okavango
Pescadores en el río Okavango

Acabado el refrigerio retomamos el crucero por el río, ahora navegando hacia el oeste y por la otra orilla, viendo más animales en el camino. Pasamos por delante el lodge y continuamos más allá durante unos centenares de metros. Pudimos disfrutar de una preciosa puesta de sol desde el mismo río.

Cuando ya llevábamos unos 90 minutos del crucero volvimos al lodge y desembarcamos. El tiempo a bordo se nos pasó volando porque la experiencia fue muy gratificante y valió mucho la pena.

Alojamiento en Alojamiento en Rundu: Gondwana Hakusembe River Lodge (280 €/noche en una cabaña, con desayuno incluido)

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 84 km.


Día 19: HAKUSEMBE RIVER LODGE - TSUMEB - PUERTA DE NAMUTONI (entrada P. N. Etosha) - NAMUTONI

Hoy dejábamos Rundu y poníamos rumbo hacia el Parque Nacional Etosha. Así que tras el desayuno y de recoger el equipaje hicimos las últimas fotos del río Okavango y de este entorno tan maravilloso. Debemos reconocer que las vistas desde la terraza del bar y restaurante del lodge son extraordinarias.

Dejamos el lodge e hicimos los 14 km hasta conectar con la carretera B8 que va hacia el sur. Unos pocos kilómetros después nos paramos en uno de los tenderetes de artesanía que hay junto a la carretera y junto a un pequeño grupo de humildes casas. Acabamos comprando una bonita figura de madera de un rinoceronte, ante la expectación de niños y mujeres que salieron de no sabemos dónde para ver unos guiris regateando y comprando.

Después de haber recorrido 270 km desde el lodge hicimos una corta parada en una estación de servicio de Grootfontein para llenar el depósito del coche. Y desde aquí recorrimos 69 km hacia el noroeste hasta llegar a Tsumeb.

La iglesia de Santa Bárbara en la población de Tsumeb
La iglesia de Santa Bárbara en la población de Tsumeb

El centro de la ciudad minera de Tsumeb es muy agradable a la vista, con un gran parque verde en el centro. Aprovechamos la visita para comer en el restaurante del Minen Hotel Lodge, donde comimos de lujo en su terraza exterior.

Después de comer dimos una vuelta a pie por el centro de Tsumeb, alrededor del parque United Nations, para ver algunos bonitos edificios y diferentes símbolos de su pasado y presente minero. Merece la pena, ni que sea por fuera, ver el Museo de Tsumeb, así como recorrer la calle President St.

Volvimos al coche y continuamos viaje hacia Etosha. Desde Tsumeb hasta la Von Lindequist Gate o Puerta de Namutoni, la entrada oriental del Parque Nacional Etosha, hay 100 km por la B1 y la C38. Llegamos a esta puerta de entrada a las 16:30, donde tuvimos que llenar un registro de entradas con los datos nuestros y del coche.

Desde la puerta hasta llegar al campamento Namutoni Camp hay 12 km. En este trayecto ya pudimos ver elefantes, jirafas y otros animales junto a la carretera. En la recepción del campamento de Namutoni pagamos las tasas de entrada y de estancia en el parque para los cuatro días: un total de 1.800 N$ por los tres y el vehículo. También nos asignaron la plaza de camping que tendríamos.

La puerta de Namutoni, la entrada oriental al Parque Nacional Etosha
La puerta de Namutoni, la entrada oriental al Parque Nacional Etosha

A continuación aprovechamos el tiempo que aún quedaba hasta la hora en que se cerraban las puertas del complejo, a las 18:47 (hora de la puesta del sol), para hacer el primer safari dentro del parque y elegimos la ruta Twee Palms Drive, la cual bordea la laguna Fischer's Pan. En este recorrido, de 12 km en cada sentido, vimos muchos herbívoros.

Para organizar nuestras rutas por Etosha contamos con la inestimable ayuda del folleto Map of Etosha que compramos en la tienda del campamento de Namutoni. En el mapa que contiene el folleto se marcan todas las pistas, abrevaderos, miradores y campamentos del parque, entre otros puntos de interés para el visitante.

De vuelta al camping y antes de ir a dormir fuimos hasta el abrevadero (waterhole en inglés) del complejo, pero en aquel momento no había ningún animal.

El Parque Nacional Etosha tiene una superficie de 22 270 km² y es uno de los parques naturales más grandes del mundo, acogiendo centenares de especies de mamíferos, aves y reptiles, incluidas varias especies amenazadas y en peligro de extinción como el rinoceronte negro.

Alojamiento en Alojamiento en Namutoni (P. N. Etosha): Namutoni Camp (65 €/noche en camping). Este campamento se encuentra en el lado oriental de Etosha. Su nombre proviene del un antiguo fuerte alemán que le da mucho carácter. En Namutoni hay dos restaurantes, una piscina, un bar y una tienda que vende algunos víveres, así como artesanía, recuerdos y libros. Este campamento, de gestión estatal como todos los demás que se encuentran dentro de los límites del parque, tiene una relación calidad/precio no demasiado buena, pero es su ubicación para explorar el parque el que le convierte en una buena opción.

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 467 km.


Día 20: NAMUTONI - P. N. ETOSHA (área norte, este y sur de Namutoni) - NAMUTONI

Dedicamos este día a explorar los alrededores del Namutoni Camp, sobre todo hacia el norte, hacia el este y hacia el sur, visitando los diferentes abrevaderos que íbamos encontrando.

A primera hora de la mañana salimos de Namutoni en dirección norte por la pista King Nehale Gate Drive, la cual bordea el lado oriental de la gran depresión o cuenca (pan en inglés) que caracteriza el Parque Nacional Etosha.

La cuenca de Etosha es una gran depresión de sal endorreica de unos 120 km de longitud. El cauce de esta depresión está seca la mayor parte del año, pero tras una fuerte lluvia se acumula una fina capa de agua, que es fuertemente salada a causa de los depósitos minerales de la superficie.

Aquel día hacía viento y la polvareda que levantaba del cauce de la gran cuenca escondía el sol tras una nube de polvo y la visibilidad era bastante mala.

Grupo de elefantes bebiendo en uno de los bebederos del Parque Nacional Etosha
Grupo de elefantes bebiendo en uno de los bebederos del Parque Nacional Etosha

Por el camino fuimos visitando los diferentes abrevaderos que íbamos encontrando, como los de Tsumcor o Stinkwater. Y así llegamos hasta el abrevadero más septentrional del parque, el de Andoni, ya muy cerca de la King Nehale Gate, la puerta norte de acceso al parque.

Desde aquí deshicimos parte del camino y como que ya era la hora de comer fuimos hasta el Resort de Onkoshi, uno de los seis alojamientos que hay dentro de los límites del parque y que está muy bien situado sobre la orilla oriental de la cuenca de Etosha.

Imagen fantasmagórica de la cuenca de Etosha vista desde Onkoshi
Imagen fantasmagórica de la cuenca de Etosha vista desde Onkoshi

Nuestra idea era comer en su restaurante, pero cuando llegamos parecía un lugar fantasmagórico y de otro planeta: no parecía haber nadie, pero la puerta de entrada estaba abierta y fuera el viento soplaba fuerte bajo un cielo cubierto por el polvo en suspensión. Todo ello nos recordó una imagen salida de una película apocalíptica.

Finalmente salió una mujer de no sabemos donde y nos dijo que el restaurante estaba abierto. Así que elegimos una mesa con vistas a la cuenca y nos quedamos a comer. Aparte de nosotros, en aquel momento no parecía haber ningún cliente más en todo el complejo. Este resort tiene unas vistas sensacionales, pero está apartado de todo.

Elefantes bañándose en un abrevadero de Etosha
Elefantes bañándose en un abrevadero de Etosha

Después de comer cogimos el coche y volvimos en dirección hacia Namutoni. Cuando llegamos fuimos hasta el abrevadero Klein Namutoni y a continuación recorrimos el circuito circular Dik Dik Drive. Por último, antes de que cerraran las puertas de nuestro campamento todavía pudimos ir hasta los abrevaderos Koinachas y Chodup.

De vuelta al campamento Namutoni probamos suerte yendo nuevamente al abrevadero del campamento, pero no encontramos ningún animal que no hubiéramos visto ya. En todo el día por el parque habíamos visto elefantes, jirafas, órices, cebras, gacelas, ñus, avestruces, etc. pero ni un solo felino.

Alojamiento en Alojamiento en Namutoni (P. N. Etosha): Namutoni Camp (65 €/noche en camping).

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 151 km.


Día 21: NAMUTONI - P. N. ETOSHA (área entre Namutoni y Halali y alrededores de Halali) - HALALI

Hoy dejábamos el campamento de Namutoni y nos desplazábamos hacia el campamento de Halali, 70 km más al oeste. Pero antes de marchar de Namutoni hicimos una rápida visita para ver el bonito fuerte de Namutoni que hay a la entrada. Fue construido por el ejército alemán en 1902-03, a pesar de que el actual es una restauración de 1957.

Grupo de cebras en uno de los abrevaderos de Etosha
Grupo de cebras en uno de los abrevaderos de Etosha

Salimos de Namutoni hacia el oeste y primeramente fuimos a visitar el abrevadero Koinachas que ya habíamos visto ayer y más adelante nos desviamos para ir hasta el de Kalkheuwel. También hicimos el circuito circular de 19 km para ir al abrevadero Ngobib. De vuelta a la pista principal nos desviamos por la pista que bordea la cuenca para ir hasta el abrevadero Okerfontein. Y de nuevo en la pista principal fuimos hasta los abrevaderos Springbokfontein y Batía.

Abandonamos nuevamente la pista principal y fuimos por otra que va más al sur y en dirección a Halali. Por el camino visitamos los abrevaderos Goas y Noniams.

Algunos de los abrevaderos visitados estaban secos y en otros no había ningún animal. Pero en el resto veíamos animales, como jirafas, gacelas saltadoras, elefantes, kudús, ñus, etc. Es simplemente cuestión de suerte... o de esperar hasta que aparezcan. Y antes de llegar a Halali también nos desviamos ligeramente para ir hasta el abrevadero Helio.

Kudús en el Parque Nacional Etosha
Kudús en el Parque Nacional Etosha

Llegamos al campamento de Halali casi a la hora de comer. Nos registramos en al camping y fuimos a comer al restaurante del complejo, donde había un menú de bufete que costaba 240 N$ por persona. Este menú estaba muy bien y era muy completo.

Después de comer y descansar un poco salimos de nuevo con el coche y volvimos al abrevadero Helio para, a continuación, recorrer el Rhino Drive. En las primeras 2/3 partes de este recorrido no vimos ni un solo animal, pero hacia el final la cosa se animó bastante.

Al conectar nuevamente con la pista principal nos desviamos por un ramal que bordea la cuenca y fuimos a visitar los bonitos abrevaderos Salvadora y Charitsaub. Desde aquí volvimos hacia el este y nos paramos en el abrevadero Rietfontein donde pudimos ver un rinoceronte negro solitario durante un buen rato.

Gacelas saltadoras y avestruces en el Parque Nacional Etosha
Gacelas saltadoras y avestruces en el Parque Nacional Etosha

Ya era tarde y teníamos que volver hacia el campamento antes de que cerraran sus puertas a las 18:47 (la hora se va ajustando a la puesta de sol). Llegamos por los pelos.

Antes de ir a dormir visitamos un par de veces el prolífico abrevadero Moringa, el cual se encuentra junto al campamento y está iluminado con luz artificial. Tuvimos la suerte de ver un grupo de cuatro rinocerontes blancos, donde dos de ellos se pelearon y un tercero tuvo que irse por piernas ante las amenazas del resto. También vimos otros animales, como chacales, gacelas, cebras, etc.

Alojamiento en Alojamiento en Halali (P. N. Etosha): Halali Camp (65 €/noche en camping). Este campamento está situado en una llanura y cerca de las únicas colinas de esta zona del parque, a medio camino entre los campamentos de Namutoni y de Okaukuejo. Enter sus servicios cuenta con un restaurante, un bar, una piscina y una tienda.

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 176 km.


Día 22: HALALI - P. N. ETOSHA (área entre Halali y Okaukuejo) - OKAUKUEJO

Hoy volvíamos a cambiar de campamento para ir al de Okaukuejo, 71 km al oeste de Halali. Salimos de Halali hacia el este y pasamos nuevamente por el abrevadero Helio y también por el lado de las Helio Hills, los únicos cerros que rompen la monotonía de esta gran llanura.

Conduciendo por el Etosha Lookout sobre el estanque seco de Etosha
Conduciendo por el Etosha Lookout sobre el estanque seco de Etosha

Unos 3 km antes de llegar al abrevadero Goas cogimos la pista que va hacia el noroeste y llegamos al de Nuamses. Y desde aquí fuimos hasta un lugar llamado Etosha Lookout, un espectacular trozo de pista trazado sobre la superficie seca de la cuenca y que se adentra más de 1 km en mitad de un paisaje que parece de otro mundo. Maravilloso.

Desde aquí volvimos hacia la pista principal y fuimos en dirección oeste, pasando nuevamente por el abrevadero Rietfontein. Más adelante nos volvimos a desviar para ir a ver nuevamente los de Salvadora y Charitsaub. En los dos encontramos un montón de herbívoros, bastantes más que ayer.

Más adelante fuimos también al abrevadero Sueda , pero lo encontramos seco. Y continuamos por la pista principal hacia el oeste y más adelante visitamos el abrevadero Ondongab, así como los Kapupuhedi y el Nebrowni.

Llegamos al campamento Okaukuejo sobre la hora de comer. Nos registramos en recepción, donde nos dieron las llaves del chalé que teníamos reservado. Aquí no nos fue posible reservar una plaza en el camping porque ya estaba todo completo para el día que queríamos.

Tras dejar el equipaje en la habitación fuimos a ver el abrevadero que teníamos junto al chalé. El abrevadero de Okaukuejo tiene una merecida fama, ya que es muy bonito y siempre hay bastantes animales deambulando por él.

A continuación fuimos a comer al restaurante del complejo, el cual no está mal, pero aquí no es de tipo bufete y sale, en general, más caro que en el de Halali porque se debe escoger de la carta.

Después de comer salimos de Okaukuejo y fuimos hacia el este para visitar los abrevaderos Gemsbokvlakte y Olifantsbad. En el primero de ellos vimos un grupo de leonas que en su camino hacia el abrevadero pasaron justo por delante de nuestro coche, a escasos tres metros. También vimos un par de leones descansando muy cerca de allí.

Una de las leonas vistas en el abrevadero Gemsbokvlakte
Una de las leonas vistas en el abrevadero Gemsbokvlakte

Desde este abrevadero volvimos hacia el este, pero nos desviamos al cabo de poco hacia el norte para ir hasta el abrevadero Nebrowni, donde encontramos una jirafa solitaria bebiendo agua y a unos 100 metros de ella un grupo de seis leonas que, al principio, parecían estar siesteando y jugando. Pero poco después algunas de las leonas iniciaron las maniobras de ataque a la jirafa solitaria.

Asistimos en primera fila al juego del gato y el ratón entre la jirafa que no perdía de vista a las leonas y las propias leonas que intentaban ir avanzando discretamente hacia la jirafa, pero con poco éxito. Finalmente las leonas cejaron en el ataque al ver que la jirafa las tenía controladas y empezaron a retirarse.

Una pareja de leonas buscando posibles presas en el abrevadero Nebrowni
Una pareja de leonas buscando posibles presas en el abrevadero Nebrowni

Desgraciadamente teníamos que marchar porque ya eran las 18:30 y cerraban la puerta del campamento a las 18:47 y aún nos quedaban 8 km de pista hasta llegar a él. Finalmente pudimos llegar a tiempo antes de que cerraran.

Solo llegar al complejo fuimos hasta el abrevadero de Okaukuejo que teníamos a escasos metros del chalé y vimos unos cuántos animales, entre ellos un par de rinocerontes. Hoy había sido para nosotros un día muy prolífico en en cuanto a la cantidad y a la calidad de los animales vistos. Lo dicho: es cuestión de suerte.

Alojamiento en Alojamiento en Okaukuejo (P. N. Etosha): Okaukuejo Camp (235 €/noche,en un chalet con desayuno incluido). Este campamento está situado en la parte sur del parque nacional de Etosha ya sólo 17 km de la puerta de Anderson. La fama de su pozo de agua, donde la fauna salvaje se reúne, sobre todo durante el invierno, para saciar su sed, hacen que el alojamiento en este campamento tenga una demanda superior a la de la resto de campamentos. Entre sus servicios hay una gasolinera, una tienda, un restaurante, un bar y una piscina.

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 163 km.


Día 23: OKAUKUEJO - P. N. ETOSHA (safari matinal y ruta hacia el norte y oeste de Okaukuejo) - OMBIKA - PUERTA ANDERSSON (salida Parque Nacional Etosha) - OUTJO - OTJIWARONGO

Nos levantamos a las 5:50 porque a las 6:20 teníamos que estar delante de la recepción para el Game Drive que habíamos reservado el día anterior. Habíamos pagado 650 N$/adulto y 325 N$ por nuestra hija para un recorrido de tres horas (de 6:30 a 9:30) en un vehículo y con un guía del parque.

Fuimos en un camión descubierto con cinco personas más. El camión tiene tres hileras de asientos de tres plazas cada una ubicadas en el remolque. Salimos por la puerta de Okaukuejo a las 6:34 de la mañana, cuando aún era bien oscuro y hacía frío. Inicialmente seguimos la pista C38 en dirección este.

Dos rinocerontes blancos cerca del abrevadero Nebrowni
Dos rinocerontes blancos cerca del abrevadero Nebrowni

Mientras era oscuro el conductor iba con un foco de luz roja apuntando a lado y lado para localizar los animales. Al poco de salir vimos un pequeño chacal. Cuando ya se ha estaba haciendo claro y estaba a punto de salir el sol nos paramos en el abrevadero Nebrowni, donde vimos dos leonas solitarias que no paraban de jugar entre ellas.

Poco más allá encontramos dos rinocerontes blancos junto a la pista. Después fuimos al mirador Kapupuhedi, desde el que hay una bonita vista elevada sobre la cuenca de Etosha. Nuestro conductor y guía nos iba dando interesantes datos e información sobre todo lo que íbamos viendo.

Un águila oteando posibles presas cerca de Okaukuejo
Un águila oteando posibles presas cerca de Okaukuejo

Por el camino también vimos varias especies de pájaros (águilas), además de avestruces y otros. A continuación cogimos la pista que va hasta el abrevadero Gemsbokvlakte y por el camino encontramos un grupo de elefantes. Cuando llegamos al abrevadero Gemsbokvlakte encontramos una gran cantidad de ñus, gacelas y cebras que iban y venían del abrevadero, dando lugar a una imagen muy plástica. También vimos unas cuántas jirafas.

Al final en el Parque Nacional Etosha habíamos visto los Big Three que hay en este parque: elefantes, rinocerontes y leones (aquí no han búfalos ni leopardos, los grandes mamíferos que completarían los Big Five).

Desde Gemsbokvlakte volvimos hacia el campamento de Okaukuejo, donde llegamos a las 9:32. Aquí finalizó este Game Drive, el cual valió mucho la pena y lo recomendamos vivamente.

Nada más llegar fuimos directamente a desayunar al restaurante del complejo. El almuerzo, de tipo bufete, estaba incluido en el precio de la habitación. A continuación fuimos hasta el chalé para recoger el equipaje y cargarlo en el coche.

Vista del abrevadero del campamento de Okaukuejo
Vista del abrevadero del campamento de Okaukuejo

Antes de marchar del campamento de Okaujuejo aprovechamos para hacer una última visita al prolífico abrevadero que teníamos junto al chalé. En aquel momento había varios grupos de herbívoros.

También subimos hasta la parte superior de la torre de piedra que hay a la entrada del campamento. Esta torre es todo lo que queda de un antiguo fuerte. Desde lo alto de la torre, a la que se sube por unas escaleras de espiral, hay muy buenas vistas sobre el complejo y sus alrededores.

Salimos de Okaukuejo con el coche, yendo hacia el norte por la pista que va hacia el abrevadero Okondeka. Por el camino vimos algunos elefantes y otros muchos herbívoros. Y en Okondeka nos encontramos una gran cantidad de jirafas, ñus, cebras, órices y gacelas haciendo turnos para ir a beber.

Desde aquí volvimos por una pista más hacia el oeste para llegar al abrevadero de Leeubron. Al llegar a este abrevadero no encontramos ningún animal, pero por el camino habíamos visto muchos herbívoros y el camino en sí es muy bonito.

Jirafas, cebras y gacelas cerca de un abrevadero
Jirafas, cebras y gacelas cerca de un abrevadero

De vuelta al complejo de Okaujuejo allá cogimos la carretera asfaltada C38 que sale del Parque Nacional Etosha por el sur y va en dirección a Outjo. Antes de salir de Etosha nos paramos en el abrevadero Ombika que hay pocos kilómetros antes de llegar a la Puerta de Andersson.

Con mucha pena salimos de Etosha por la Puerta de Andersson, la salida sur del parque. Ahora teníamos por delante 99 km de carretera hasta llegar a Outjo. Pero ahora ya podíamos correr hasta los 120 km/h en vez de los 60 kn/h de la velocidad máxima dentro del parque.

Al llegar a Outjo ya eran las 14:05 y nos paramos a comer en el Outjo Bakkeryimage. Después de comer aprovechamos para comprar algunos víveres en el supermercado Spar y pusimos rumbo hacia Otjiwarongo, a 70 km por la B1.

La calle principal de Outjo, con la Outjo Bakkery a la izquierda
La calle principal de Outjo, con la Outjo Bakkery a la izquierda

Y cuando llegamos a Otjiwarongo fuimos directamente a encontrar el alojamiento reservado: la Kamaku Guesthouse. Antes de que oscureciera salimos a dar un paseo a pie por los alrededores y fuimos hasta el Out of Africa Guesthouse, donde tomamos una bebida en una mesa exterior sobre un bonito jardín. Una magnífica forma de acabar el día.

Alojamiento en Alojamiento en Otjiwarongo: Kamaku Guesthouse (52 €/noche en un B&B).Este pequeño B&B ofrece una habitación espaciosa y muy confortable. Todo está muy limpio, cuidado y a un precio razonable. Cuenta con una piscina y agradables espacios exteriores. El desayuno, incluido en el precio, es muy completo. Y los propietarios del B&B, Karola y Nico, son muy amables y atentos. Hay aparcamiento privado y seguro para el coche. Sitio 100% recomendable.

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 243 km.


Día 24: OTJIWARONGO - CHEETAH CONSERVATION FUND (CCF) - WATERBERG CAMP (P. N. WATERBERG)

Tras un magnífico almuerzo, incluido en el precio, recogimos el equipaje, lo cargamos en el coche, nos despedimos de nuestros anfitriones y marchamos de Otjiwarongo para ir a ver guepardos a la Cheetah Conservation Fund, a 45 km. Nuestra hija es una gran fan de estos animales y no podíamos desaprovechar la oportunidad de verlos aquí.

El guepardo (Acinonyx jubatus) es uno de los grandes felinos más amenazados que hay en su entorno natural y Namibia acoge una quinta parte de toda la población total mundial de guepardos aún en libertad.

Mural en el Cheetah Conservation Fund
Mural en el Cheetah Conservation Fund

Así pues, donde ver guepardos en Namibia?. En el parque nacional Etosha es posible verlos en libertad, pero aquí el factor suerte es vital, puesto que, en realidad, los parques nacionales no son el mejor refugio para ellos. En Etosha hay una población importante de leones y hienas y ambos son dos grandes depredadores de los guepardos. Y otros carnívoros, como los leopardos, roban con facilidad las presas capturadas por los guepardos, condenándolos a veces a morir de hambre.

Por este motivo, en Namibia la mayoría de los guepardos viven en tierras de cultivo donde sus principales competidores han sido erradicados. Aparte de algunas granjas y reservas privadas, los mejores lugares para ver guepardos en Namibia, a pesar de que no en total libertad, son la Cheetah Conservation Fund (CCF) y en Okonjima. Nosotros elegimos el primero de ellos.

Volviendo al viaje, salimos de Otjiwarongo por la carretera que va hacia Otavi y poco después nos desviamos a la derecha para tomar la D2440. Se acaba el asfalto y empiezan 40 km de pista, pero que está en muy buen estado.

El Cheetah Conservation Fund (CCF) es una institución de investigación que se dedica al estudio y el mantenimiento de la población de guepardos de Namibia, la más grande y más sana de todo el mundo. Los esfuerzos educativos y de conservación de este centro se orientan a mantener la población de guepardos en Namibia y como modelo para los programas de conservación de guepardos en otros países del mundo donde se encuentran estos felinos.

Llegamos al centro de conservación de guepardos sobre las 11:30, una hora antes de que empezara la actividad Cheetah Drive que habíamos reservado vía web para aquella hora.

Uno de los guepardos del centro Cheetah Conservation Fund
Uno de los guepardos del centro Cheetah Conservation Fund

En este tiempo de espera aprovechamos para ver un video donde se explica la historia y los objetivos del centro y también vimos el museo con numerosos paneles explicativos sobre los guepardos. Todo es realmente muy interesante puesto que el guepardo es un animal del que no sabíamos gran cosa.

La actividad Cheetah Drive, una de las que ofrece el centro, consiste en un paseo con un guía del centro por un gran recinto cerrado donde se encuentran algunos de los guepardos que no se pueden liberar y permite tener la oportunidad de ver estos fantásticos animales de muy cerca. El precio de la actividad era 665 N$/adulto y 332,50 N$ los menores de 12 años. Dura aproximadamente una hora.​

Poco antes de las 12:30 nos reunieron a los 9 visitantes que haríamos la actividad y subimos a un camión descubierto. A continuación entramos en un recinto cerrado y el conductor/guía nos explicó que allí viven cinco guepardos hembra, cada una con su propia historia. Con el camión fuimos recorriendo el recinto, encontrando en lugares diferentes a las cinco guepardos.

Primer plano de uno de los guepardos del centro Cheetah Conservation Fund
Primer plano de uno de los guepardos del centro Cheetah Conservation Fund

Con cada una de ellas el guía nos explicó nuevas cosas sobre los guepardos y de la dificultad de que en el futuro estos animales puedan sobrevivir como especie, al menos en Namibia, donde los guepardos en libertad son el enemigo de los grandes granjeros porque atacan a sus rebaños. De aquí que este centro haga pedagogía entre los granjeros del país para encontrar fórmulas de convivencia que aseguren la continuidad de los guepardos.

Finalizada la visita al recinto de los guepardos, nos llevaron a otro recinto donde hay perros adiestrados para cuidar los rebaños de ganado y convencer a los granjeros de que si usan estos perros no tendrán que matar a los depredadores del ganado, como los guepardos, y así todo el mundo sale ganando.

Finalizamos esta interesante actividad a las 13:40 y cinco minutos después fuimos a ver otra actividad, incluida en el precio de la primera, que es ver como se da de comer a los guepardos en cautividad.

Antes de marchar del centro fuimos a su pequeño bar y aprovechamos para comer algo antes de poner rumbo con el coche hacia el Parque Nacional Waterberg, nuestro siguiente destino de hoy.

Desde el CCF deshicimos los 45 km hasta Otjiwarongo, donde cogimos la carretera B1 que va hacia el sur. Al cabo de 28 km nos desviamos a la izquierda por otra carretera asfaltada, la C22. Los paisajes a lo largo de toda esta ruta son espléndidos. Y unos 41 km hacia el este nos desviamos a la izquierda por la pista D2512. Desde este cruce ya solo son 18 km por una pista en muy buen estado hasta llegar a la recepción del campamento Waterberg.

Llegamos a la recepción del campamento Waterberg a las 17:10. Aquí pagamos 900 N$ en concepto de tasas de estancia en el Parque Nacional de Waterberg durante dos días, ya que este campamento se encuentra dentro de los límites del parque.

Lugar de acampada en el Parque Nacional Waterberg, con el acantilado de Waterberg al fondo
Lugar de acampada en el Parque Nacional Waterberg, con el acantilado de Waterberg al fondo

A continuación fuimos al camping para elegir la plaza donde montaríamos las tiendas, con vistas a la magnífica pared rocosa de Waterberg. Y después subimos andando pista arriba hasta llegar al lugar donde se encuentra el restaurante del complejo, el cual ocupa un bonito edificio que construyeron los alemanes a principios del siglo XX.

Las vistas sobre el acantilado de Waterberg con el último sol de la tarde son muy bonitas, sea qué sea el punto del parque donde os encontréis. El color de la roca magnifica las tonalidades rojas de la última luz del día.

Alojamiento en Alojamiento en P. N. Waterberg: Waterberg Camp (42 €/noche en camping). Este campamento, de gestión estatal, se encuentra en un sitio realmente precioso, pero las instalaciones muestran una clara falta de mantenimiento. Es una lástima, porque no hay muchas más opciones de alojamiento en la zona. El campamento es visitado frecuentemente por babuinos, facóqueros, dik-dik, damanas de El Cabo, kudús, etc. El restaurante ocupa un hermoso edificio histórico. En resumen, vale mucho la pena por el entorno natural.​

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 178 km.


Día 25: WATERBERG CAMP - rutas a pie por el P. N. WATERBERG - WATERBERG CAMP

Mientras preparábamos el desayuno en el camping teníamos que vigilar de cerca a los numerosos babuinos que había en la zona y que buscan el momento para robar cualquier cosa comestible. También apareció toda una familia de facóqueros buscando comida.

Después lo recogimos todo y fuimos con el coche hasta el chalé que habíamos reservado para la siguiente noche en el parque. Los chalés se encuentran muy bien situados a los pies del acantilado de Waterberg, a 1,4 km montaña arriba respecto del camping.

Vista sobre parte del acantilado de Waterberg
Vista sobre parte del acantilado de Waterberg

Dejamos el coche junto al chalé y nos dispusimos a hacer la caminata Waterberg Mountain View, una de las varias caminatas que hay el Parque Nacional Waterberg.

El camino Waterberg Mountain View (1,9 km, 340 metros de desnivel y un tiempo aproximado de 75 minutos) parte desde un parking (GPS: -20.5089458, 17.2399132). El camino empieza a subir y se va volviendo estrecho paulatinamente. El tramo final de camino, antes de llegar a un punto donde la vegetación se abre y permite las vistas sobre la llanura, es bastante empinado y hay que subir por grandes piedras, pero tampoco es de una gran dificultad técnica. En cualquier caso el camino es muy bonito y, aparte de las vistas, permite ver las rocas del acantilado desde bien cerca. Esta caminata vale mucho la pena.

Vistas desde el sendero Waterberg Mountain View
Vistas desde el sendero Waterberg Mountain View

Después de esta caminata hicimos otra de las disponibles en el parque. Se trata del Forest Trail, donde pudimos ver un bosque muy verde y denso a causa de un pequeño riachuelo con agua que lo cruza.

Por la tarde, cuando el sol bajo teñía de rojo las rocas del acantilado, hicimos la ruta Fig Tree, llamada así porque pasa junto a una enorme higuera. Es muy bonita, porque además teníamos el acantilado justo sobre nuestras cabezas.

Vista del acantilado de Waterberg desde el «Francolin Walk»
Vista del acantilado de Waterberg desde el «Francolin Walk»

Y a continuación fuimos hasta el principio del camino Francolin Walk, un camino largo que baja desde donde están los chalés hasta donde está el camping. El sendero empieza bajando desde el principio por un camino lleno de rocas. Desde este camino podíamos ver ante nosotros una gran llanura y a nuestras espaldas quedaba el magnífico acantilado de Waterberg.

Hacia el final de este camino pasamos por las ruinas de Mission Way y por una zona inundada de agua y barro que tuvimos que atravesar como pudimos intentando mojarnos lo menos posible. Llegados a la pista que va del camping al Cementerio de Guerra seguimos la pista hacia la izquierda y conectamos con la carretera que va desde la recepción del parque hasta el lugar donde están los chalés y pasa por delante del restaurante.

El edificio histórico que hospeda el restaurante del campamento del Parque Nacional Waterberg
El edificio histórico que hospeda el restaurante del campamento del Parque Nacional Waterberg

Desde aquí subimos unos 900 metros por la pista de cemento, con un fuerte desnivel, hasta llegar al restaurante del complejo. A lo largo de estos caminos recorrido en el día de hoy habíamos encontrado un montón de babuinos, un kudú y unos cuántos dik-dik, unos minúsculos antílopes africanos muy simpáticos.

En el interior del restaurante, que a principios del siglo XX fue una estación de policía de los alemanes hay fotos de época de aquellos años, entre 1904 y 1930, que son muy interesantes de ver. Y es que en esta zona, en 1904, tuvo lugar la batalla de Waterberg y el posterior genocidio herero y namaqua perpetrado por los alemanes entre 1904 y 1907.

Nos quedamos a cenar en el restaurante para compensar el frugal comer que habíamos hecho hoy. La carta no era muy amplia, pero cenamos muy bien.

Tras la cena andamos los 800 metros hasta nuestro chalé, disfrutando por el camino de un cielo lleno de estrellas.

Alojamiento en Alojamiento en P. N. Waterberg: Waterberg Camp (152 €/noche en un chalé, con desayuno incluido). Esta noche cambiamos del camping a un chalé, el cual se encuentra a los pies del espectacular acantilado de Waterberg. Los chalés son rústicos y austeros, pero no están mal. Tiene dos habitaciones con cuatro camas en total, dos baños, un gran salón comedor y una pequeña cocina. Y fuera hay una pequeña terraza, una barbacoa y aparcamiento para el coche. La relación calidad/precio no es demasiado buena, tal como pasa en el resto de campamentos gestionados por el gobierno.


Día 26: WATERBERG CAMP - rutas a pie por el P. N. WATERBERG - OTJIWARONGO - OMARURU

Tras el desayuno en el restaurante (estaba incluido en el precio del chalé) y antes de abandonar el Parque Nacional Waterberg queríamos hacer dos caminatas, la Anthill Way y la Aloe Circle, qua combinamos en una sola. Se trata de un recorrido muy bonito y muy recomendable, como todos los senderos de este parque. No os perdáis los numerosos ejemplares que encontraréis en este camino de árboles de aloe marlothii, los cuales son altos y muy fotogénicos.

Ejemplares del árbol Aloe Marlothii en el sendero «Aloe Circle»
Ejemplares del árbol Aloe Marlothii en el sendero «Aloe Circle»

Hacia el mediodía dimos por acabada nuestra visita al Parque Nacional Waterberg, el cual nos maravilló y nos gustó mucho. Salimos del parque y deshicimos todo el camino que habíamos hecho días atrás hasta llegar nuevamente a Otjiwarongo, a 89 km de aquí.

Al llegar a Otjiwarongo hicimos una parada para comer en el restaurante del Out of Village Boutique Hotel. Fue un acierto pararnos aquí. Es un agradable lugar, con un bonito jardín donde comimos en una mesa exterior. La comida muy bien, como ya venía siendo habitual.

Después de una magnífica comida (y de unos postres que eran para llorar de placer) retomamos la ruta hacia Omaruru, a 137 km de Otjiwarongo. Todo el trayecto es por la carretera C33, asfaltada y muy recta. En el trayecto pasamos por Kalkfeld, un pequeño pueblo sin más.

A las 16:30 llegamos a Omaruru y fuimos directamente al Omaruru Guesthouse, el lugar reservado para esa noche. Tras registrarnos y dejar el equipaje en la habitación nos bañamos fugazmente en la piscina antes de salir a dar una vuelta a pie por este pueblo tan pintoresco, con algunos bonitos y curiosos edificios, como por ejemplo la Torre Franke.

La Torre Franke de Omaruru
La Torre Franke de Omaruru

En este paseo a pie cruzamos un par a veces el ancho cauce del río Omaruru, el cual estaba completamente seco.

Alojamiento en Alojamiento en Omaruru: Omaruru Guesthouse (54 €/noche, en una habitación triple con desayuno incluido). Este hotel está ubicado en el nº 305 de dr. Ian Scheepers Drive, en Omaruru. Es un lugar muy agradable, con un bonito jardín, con muchos árboles y una piscina fantástica. La decoración de los interiores también está muy cuidada y la habitación estaba muy limpia. El desayuno, incluido en el precio, está bastante bien. El hotel tiene aparcamiento privado y seguro para el coche. Sitio muy recomendable.

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 232 km.


Día 27: OMARURU - OKAHANDJA - WINDHOEK

Después del desayuno, incluido en el precio de la habitación, cargamos el equipaje en el coche y nos dispusimos a marchar de esta pequeña y tranquila ciudad. Pero antes de marchar de Omaruru dimos una última vuelta por la calle principal, de punta a punta, para ver algunos edificios que no habíamos visto ayer por la tarde.

La antigua casa de la misión de Omaruru, actualmente un museo
La antigua casa de la misión de Omaruru, actualmente un museo

A continuación fuimos con el coche hasta la bodega Kristall Kallerei, la cual se encuentra a unos 3 km al norte del centro de Omaruru. Pero cuando llegamos estaba cerrada y un empleado nos dijo que hasta mucho más tarde no llegaría la persona que abría la recepción. Así que decidimos no esperar y marchar hacia Windhoek. Fue una lástima, porque nos hubiera gustado probar estos vinos de la región de Erongo.

La distancia de Omaruru a Windhoek es de 212 km. Al principio la C33 estaba asfaltada, pero pronto nos desviamos por la C36, una pista en bastante buen estado, pero de tierra. Es un trayecto de pista de 67 km hasta llegar a Wilhemstal, donde conecta con la B2, una carretera asfaltada que en este tramo fue la mejor de todas las que habíamos visto en Namibia: muy asfaltada, con arcenes asfaltados y líneas casi acabadas de pintar.

Al llegar a Okahandja nos desviamos para ir hacia el centro de la población, haciendo un alto en la panadería Dekker Bäckerei para tomar un café y algo dulce. Se nota que esta panadería es más local y no para extranjeros de paso, ya que no tiene nada que ver con la de Outjo.

Por otro lado, en Okahandja hay bastantes mercadillos y tenderetes de artesanía, pero no nos paramos en ninguno de ellos porque ya teníamos comprados varios recuerdos del viaje. Así que continuamos el trayecto hacia Windhoek, a solo 73 km de aquí. La mayor parte de este trayecto es de autovía, la primera que veíamos en todo Namibia.

A las 14:00 llegamos al número 77 de la avenida Independence, en pleno centro de Windhoek, donde se encuentra el apartamento Unit 46 @ 77 on Independence que habíamos reservado. Pudimos dejar el coche en el aparcamiento del edificio y una vez tuvimos las llaves del apartamento subimos el equipaje.

Bonito mural en un muro del edificio Old Breweries Craft Market (Windhoek)
Bonito mural en un muro del edificio Old Breweries Craft Market (Windhoek)

A continuación fuimos a pie hasta el Old Breweries Craft Market, un lugar situado en la parte posterior del apartamento y que contiene un mercado de artesanía, así como un pequeño bar y restaurante que es muy popular entre los visitantes. Aprovechamos para comer en su pequeño restaurante Crafts Bar). La comida estuvo bien, pero el servicio fue lentísimo.

Después de comer volvimos al edificio del apartamento para coger el coche e ir hasta la oficina de la compañía de alquiler Autovermietung Savanna para devolverlo antes de que cerraran a las 16:30. Antes, pero, nos paramos en una estación de servicio para llenar el depósito y dejarlo tal como nos lo habían dado.

Al llegar a la oficina un empleado comprobó que tanto el coche como los enseres que nos habían entregado estaban en perfecto estado. Entregado el coche en perfecto estado, nos llevaron de vuelta a nuestro alojamiento con un minibús de la compañía y quedamos que al día siguiente nos irían a buscar a las 16:00 para llevarnos al aeropuerto.

El resto de la tarde la aprovechamos para pasear por el centro de Windhoek, por ejemplo la calle Post St Mall, donde están la Torre del Reloj y los fragmentos del meteorito Gibeon que se exhiben en mitad de esta calle peatonal.

La hermosa iglesia de Kristuskirche, en Windhoek
La hermosa iglesia de Kristuskirche, en Windhoek

Después fuimos a pie hasta la bonita iglesia Christuskirche. Detrás de la iglesia vimos los jardines y los grandes edificios del Parlamento de Namibia.

Y a continuación fuimos hasta la curiosa torre de ocupa el Museo de la Independencia y subimos hasta la cuarta planta de la torre, donde hay un restaurante y bar con unas terrazas exteriores desde las que hay una vista de 360 grados sobre Windhoek y alrededores. Para poder salir a las terrazas a hacer fotos se debe tomar una bebida y si es a partir de las 17:00 entonces hay que pagar 150 N$ por persona. Las vistas valen muchísimo la pena.

Vistas de Windhoek desde la terraza de la torre del Museo de la Independencia
Vistas de Windhoek desde la terraza de la torre del Museo de la Independencia

De vuelta a la calle vimos, detrás de la torre anterior, un lugar histórico llamado Altes Fort y ante ella la estatua Gedenkstatue Freiheitskampf. Cerca de aquí hay otros muchos edificios históricos del centro, construidos en los primeros años del siglo XX por los alemanes.

Volvimos a la avenida Independence y fuimos paseando arriba y abajo, viendo prácticamente todos los lugares que indicaba nuestra guía Bradt en su propuesta de ruta a pie por el centro de Windhoek. A las 18:45 dimos por finalizada esta ruta y volvimos hacia el apartamento.

Alojamiento en Alojamiento en Windhoek: Unit 46 @ 77 on Independence (63 €/noche en un apartamento). Está situado en un moderno y gran edificio en el nº 77 de la avenida Independence de Windhoek, a poca distancia a pie de la gran mayoría de lugares de interés de la capital. El apartamento tiene cocina, comedor, dos habitaciones y un baño. Está muy bien equipado y muy confortable. Tiene parking privado para el coche en las plantas subterráneas del edificio. Muy recomendable.

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 226 km.


Día 28: WINDHOEK - AEROPUERTO HOSEA KUTAKO - ...

Último día de viaje. Nuestro vuelo internacional salía por la tarde y ya lo teníamos prácticamente todo visto en el centro de Windhoek. Rehicimos todo el equipaje y aprovechamos para limpiar las mochilas por fuera y sacar todo el polvo que tenían acumulado después de tanto días de viaje por pistas polvorientas.

Dejamos el apartamento por la mañana y, tal como habíamos acordado con la propietaria del apartamento, dejamos todas las mochilas y bolsas en una habitación cerrada con llave que nos abrió el guarda del edificio. Y allí estarían hasta la tarde, cuando las fuéramos a buscar.

Ya libres del equipaje salimos a la calle y fuimos andando hasta llegar al Zoo Park, una zona verde donde hay un lugar en el que se encontraron los huesos de un elefante prehistórico. También hay un memorial dedicado a los soldados alemanes muertos en una de las guerras contra las tribus locales, uno más de los muchos monumentos coloniales que aún quedan en este país.

La Torre del Reloj, en la avenida Independence de Windhoek
La Torre del Reloj, en la avenida Independence de Windhoek

En un momento de la mañana nos paramos a tomar una bebida en la agradable terraza exterior de la cafetería Slowtown Coffee Roasters, viendo la vida pasar ante nuestros ojos en esta capital que es como un pueblo grande.

Después continuamos paseando por los alrededores de la avenida Independence. Y a la hora de comer elegimos un restaurante de la cadena Spurs en Windhoek. Esta cadena ya la conocíamos de cuando estuvimos en Sudáfrica. Nos sentamos en una terraza exterior sobre la Avda. Independence y comimos razonablemente bien y con muy buenas vistas sobre esta importante avenida del centro de Windhoek.

Después de comer volvimos a ir al Old Breweries Craft Market para hacer las últimas compras de recuerdos. A la hora acordada volvimos al apartamento, recogimos todo nuestro equipaje y subimos a la furgoneta de Autovermietung Savanna que ya nos estaba esperando en la calle para llevarnos al aeropuerto.

Como que éramos los únicos clientes que íbamos en lq furgoneta salimos de inmediato hacia el aeropuerto Hosea Kutako, ubicado a 46 km del centro. Llegamos en unos 40 minutos. Tras despedirnos del empleado de esta confiable y seria compañía de alquiler de coches entramos en la pequeña terminal para facturar el equipaje.

Hicimos mucha cola para facturar, pero una vez facturado el equipaje fuimos hacia la puerta de embarque. Pero antes aprovechamos para bebernos la última Tafel Radler, una cerveza clara muy buena y que ya habíamos bebido en varias ocasiones a lo largo del viaje.

Embarcamos en un avión Airbus A330-200 de la compañía Discover Airlines. El avión despegó a las 20:50. Teníamos por delante un vuelo nocturno de 8.322 km de recorrido hasta el aeropuerto de Frankfurt.

Kilómetros recorridos en coche Kilómetros recorridos en coche: 46 km.


Día 29: ... - Frankfurt - Barcelona

Aterrizamos en el aeropuerto de Frankfurt a las 6:55 de la mañana, tras un vuelo efectivo de 10 horas y 5 minutos.

Después de desayunar en el mismo aeropuerto embarcamos en un vuelo de Lufthansa que acabó saliendo a las 10:40. Y aterrizamos en el aeropuerto de Barcelona / El Prat a las 12:15, después de 1 hora y 35 minutos de vuelo.

Y aquí finalizó un largo, fantástico e inolvidable viaje y lleno de aventuras por tierras namibias.


De càmping amb nens per Namíbia i Botswana - Manel Cristóbal [2010]